¿Amiga o enemiga?

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Todo estaba confuso para Ariene. No tenía recuerdo en absoluto de nada de lo que había pasado el día anterior. Sentía cómo si todo hubiera pasado en un segundo. Su cabeza se sentía vacía, y muy vagos recuerdos aparecían en su mente, pero sólo duraban segundos.

─¿Peter...?─, musitó, su último recuerdo era haberlo visto a él. Y después, cómo si en una película se cambiara de escena drásticamente, recuerda haber visto una araña parada en su piel.

La araña.

Juntó fuerza, colocó firmemente sus manos en el piso, y con la fuerza de sus brazos y abdomen, se levantó lentamente del piso.

Al momento de estar de pie, sintió un ligero mareo, que duró segundos.

Ariene miró a su alrededor. Había algunas decoraciones de cumpleaños adornando el departamento. Ella sabía que había tenido su fiesta de cumpleaños, pero no recordaba nada de lo sucedido.

Miró a su alrededor, parecía que recién estaba amaneciendo, ¿o estará anocheciendo otra vez? No tenía idea, el tiempo se sentía confuso. Ella se sentía confusa.

Caminó unos cuantos pasos para llegar a la barra de su cocina. Necesitaba agua.

Al momento de tomar su vaso de vidrio, servir agua y después tomarla, cuando quiso soltar el vaso en el lavabo, no pudo.

─¿Qué putas...?─, expresó inconscientemente. Por más que sacudía su mano para desprender el vaso, este no se despegaba de ella. Mientras más lo intentaba, más se desesperaba. Esta vez comenzó a usar su mano libre para despegarlo, pero de un tirón hizo que el vaso saliera volando, cayera al piso y se rompiera.

Ariene dió un suspiro de pesar al momento en el que escuchó cómo se rompió el vaso. No tenía de otra más que limpiar los pequeños pedazos de vidrio que quedaron en el suelo. Fue por su escoba y recogedor, y cuando se aseguró que ya no había vidrio esparcido por ahí, quiso dejar las cosas en su lugar, pero recordando lo que acababa de pasarle con su vaso, guardó su escoba de forma lenta y segura, como si hacer las cosas de forma rápida y sin pensarlo, afectaran en si se quedaban adheridas a su mano. Al hacerlo de forma calmada, nada fuera de lo normal sucedió, dando un suspiro de alivio y sintiéndose más tranquila.

necesitaba despejar su mente un rato, por lo que decidió dirigirse al baño para mojarse la cara y refrescarse. Sin embargo, cuando fijó su vista en su reflejo, algo en ella estaba diferente. Sus ojos ya no eran color café claro, ahora eran color negro intenso, ni siquiera se distinguía la pupila del iris. Parecían dos perlas negras brillantes. Al principio pensó que sería por la poca iluminación, pero después de unos segundos, su teoría no le hizo sentido, ya que aún así, no se vería completamente negro el iris.

[...]

Mientras más horas pasaban, más rara se sentía Ariene. Sentía que se desconocía en momentos repentinos. Estaba completamente desorientada, y casi no agarró el celular en todo el día. Recibía llamadas de su hermano y mensajes de sus amigos, pero no contestaba la mayoría de esas llamadas y mensajes.
Necesitaba estar sola, no se sentía lista como para hacer su vida cotidiana.

Cosas extrañas le pasaban a su cuerpo. Las pocas veces que se veía al espejo, notaba que su físico era un poco diferente. Su cuerpo estaba más tonificado y estaba unos dos centímetros más alta. Sin embargo, eso no fue lo más extraño que le pasó en el día.
Hubo un momento en el que se recargó en su pared, pero cuando quiso incorporarse en su postura, pareció como si la pared no se quisiera despegar de ella. De la desesperación, Ariene forcejeó para zafarse, mas no lo logró, y al contrario, su cuerpo ahora se encontraba de forma horizontal, de pie en la pared.

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⏰ Last updated: Aug 29, 2023 ⏰

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Just Fine ─ Miguel O'HaraWhere stories live. Discover now