Solo una misión - Anya x Damian © ✔

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La noche de la cena llegó, estaba terminando de alistarme, tocan mi puerta.

— Anya: Adelante. (Veo a papi) ¿Qué pasa?
— Papi: Solo quería ver como estabas.
— Anya: Casi termino.
— Papi: No hablo de eso... Sé que Damian significa mucho para ti y esta noche...
— Anya: Es el principio del fin.

— Papi: No pienses así, puede que sí te quiera.
— Anya: ¿Qué pasa si no me quiere lo suficiente? Te recuerdo que destruiré a su familia.
— Papi: En el mejor de los casos...

Veo lo que piensa.

Damian miraba triste a Anya.

— Anya: Entiendelo Damian, era parte de la misión. (Dijo la pelirosa desesperada)
— Damian: ¡Me niego a creer que fui solo una misión! Algo que se sintió tan real no puede ser parte de la misión, Anya.
— Anya: NO SOY LA PERSONA QUE CREES (Grito la pelirosa)
— Damian: ¡No me importa, Forger... Yo te amo!

Eso se sintió muy irreal. 

— Anya: Él dejó de llamarme Forger hace mucho tiempo.
— Papi: ¿Como tú... ?
— Anya: Soy una aspen gracias a la experimentación.

Lo veo abrir demasiado los ojos.

— Papi: ¡¿Qué?!
— Anya: Lo que oíste.

— Papi: Así es como consigues saber como me siento.
— Anya: Sí... ¿Recuerdas el día del paseo, en el que ayudamos a una asiana?
— Papi: Claro, tu estómago nos ayudó.
— Anya: No fue mi estómago, simplemente disfrace así mis poderes.
— Papi: Así supiste lo de Yuri.

Termino de maquillarme, camino hacia mi puerta.

— Anya: Esta familia tiene muchos secretos... Ya va siendo hora de que se acaben.

Salgo hacia la sala, veo a mami ya vestida.

— Anya: Te ves muy bien, mami.
— Mami: Gracias cariño. (Ella camina a la cocina, la sigo) ¿Sucede algo?
— Anya: Esta familia tiene muchos secretos... Ya va siendo hora de que se acaben ¿No crees?
— Mami: ¿Muchos secretos?
— Anya: Cada integrante de la familia, hasta los tíos tienen un secreto.
— Mami: ¿Yuri y Franky? 

Mi teléfono suena, Damian... Contestó.

— Anya: Hola Dam.
— Damian: Hola Enana, ¿como vas? ¿Lista para conocer a mi familia?
— Anya: ¿Familia? ¿Estará toda tu familia?
— Damian: Sí, mi padre, madre, abuelo y hermano, por primera vez en años.
— Anya: Claro... ¿Aún puedo negarme a ir? (Damian ríe)
— Damian: No, firmaste tu sentencia cuando me aceptaste como novio.
— Anya: Muy gracioso, nos vemos allá.
— Damian: Espera, ¿De que color vienes vestida?
— Anya: Voy con un vestido morado, casi negro.
— Damian: Muy bien, trataré de combinar, adiós Enana.
— Anya: Adiós Damian.

Salgo de la cocina y busco a papi, cuando lo encuentro.

— Anya: ¿Qué va a pasar con Damian?
— Papi: Supongo que solo les quitaran su fortuna.
— Anya: Yo tengo una tarjeta de él, ¿también me la quitarían?
— Papi: ¿A nombre de quién está?
— Anya: Al mío.
— Papi: Entonces no. Bien, vamos.
— Anya: ¿Dentro de cuanto se acabará?

— Papi: Un mes como mucho, en lo de Demetrius piensa si entrega a su padre o no. (Asiento)
— Anya: ¿Nos quedaremos en Ostania?
— Papi: Es algo que tenemos que hablar en familia.
— Anya: Quiero quedarme, Becky está aquí... Al igual que Damian.
— Papi: ¿Sigues pensando que te odiará?
— Anya: Sí. Pero yo a él no.

¡¿Ya están listos?! — Escuchamos gritar a mami.

— Anya: Sí, ya vamos.

Salimos a la sala.