28. Cuando te bese

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Cuando te besé, yeh-eh
Sentí que toqué el cielo, uoh-oh-oh
Y no me equivoqué, no-no-no (no), no-no-no (no)
Porque lo haría de nuevo, ay, de nuevo, ay, de nuevo

(Becky G/Paulo londra)

Pedri nos dejo en la casa del sevillano, entramos y encontramos una casa vacía, llevaba así desde que Abril se fue, se fue por los días que pablo estaba en mi ciudad, encontró una nota que decía

"Pablo, gracias por todo lo que hiciste por mí, por haberme recibido en tu casa sin siquiera conocerme, eres alguien importante para mi y siempre te recordaré como el chiquillo que no sabía cocinar :).

Pero ha llegado el momento de irme de casa, he conseguido un lugar para vivir, me duele irme, pero no siempre me quedaría a vivir contigo, te extrañare gatito de Los Palacios.

Cuando necesites hablar con alguien ya sabes que me puedes escribir

Abril Gómez Santana/Leona de Málaga"

Subimos a su habitación, busque una de las muchas camisas de el con un short de pijama de las muchas que yo tenía en su casa, mientras él se cambiaba en su baño yo lo hacia en la habitación, cuando el salió yo ya estaba tumbada en la cama, con su camisa morada y un short negro de alguna pijama que no recordaba.

Él se recostó en el espaldar de su cama, yo me levante di la vuelta a la cama y me senté a horcadas sobre sus piernas

-Hoy si no te libras, ¿Cómo has estado?- pregunte

-¿De que hablas?- se hizo el tonto

-Sabes de que te hablo- el negó -lo de Abril-

-Beck...-

-Beck nada, me preocupo por ti-

-No he estado bien, aun la extraño y me duele-

-Yo si sabía que era mentira que estabas bien- me cruce de brazos

-Perdón por mentirte, no quería preocuparte y, además, ya tienes suficiente con tus problemas, no quería sumarte los míos- agacho la cabeza

-No eres un peso para mí, sabes que me puedes hablar de lo que sea. Pablo, mírame- agarre su cara con mis manos y la levanté -siempre te escuchare, no importa como este yo, bien o mal, tu eres importante para mi y si necesitas hablar dímelo, no solo estoy contigo en las buenas, también en las malas-

-Beck, se mi novia, no aguanto más, la última vez que te lo pedí la cague, y me arrepiento inmensamente, pero te lo prometo que esta vez no lo hare- un brillo se pintó en sus ojos color miel

-Solo prométeme que no ocurrirá otra vez-

-Te lo juro por la vida de mi madre-

Me abalance a él dejando un beso en sus labios, el tardo en seguírmelo, pues lo tome por sorpresa, se levanto un poco para la comodidad de ambos, puso sus manos en mis muslos mientras yo tenía las mías sobre su abdomen desnudo, aquel beso fue subiendo la temperatura, de manera que sus manos pasaron de estar en mis muslos, subiendo suavemente a mi culo, la posiciono allí y apretó un poco, por lo que un gemido salió de mi boca contra sus labios haciendo que la temperatura subiera aún más, sus besos fueron bajando por mi cuello mientras yo jugaba un poco con el borde de su chándal corto, volvió a subir a mis labios

-¿Puedo?- pregunto y yo asentí

Retiro mi camisa dejando mis senos al aire, no lo dudo y empezó con su boca a chuparlos mientras los gemidos salían descontroladamente de mi boca. Volvió a poner sus manos en mía muslos para luego manejar mis piernas y enrollarlas en sus caderas, me tomo y se volteo dejándome a mi debajo de él, volvió a bajar y empezó a besar mi abdomen descubierto, mientras yo daba pequeños jalones a su cabello, el retiro bruscamente mi short dejándome solo en mi tanga, empezando a besar cerca de ella, haciendo que me calentara más, paso su dedo por el borde ella.

Yo lo detuve haciéndolo acostar nuevamente,

Ahora era mi turno

Me volví a sentar sobre el y bese su abdomen marcado, bajando cada vez mas a su ropa, como hizo el, quite su chándal corto dejándolo solo en ropa interior, bese sus labios para luego empezar con mi cadera a hacer movimientos de mi intimidad sobre la suya, sintiendo como se paraba cada vez más, retire la poca ropa que le quedaba y deje que el volviera a tomar el control, me dejo sobre el y con cuidado retiro mi tanga, saco de su cajón un condón

Sabrá dios desde cuándo estará eso ahí

Se lo colocó, y luego introdujo su miembro en mí, puso sus manos en mis caderas y apretó, yo empecé a subir y bajar, los gemidos salían de boca de ambos, el apretaba cada vez mas mis caderas, no paso mucho tiempo para que los dos llegáramos al clímax.

14 de marzo

Gavi

Desperté, tarde, eran las 11 de la mañana, y es que anoche nos habíamos desvelado, apenas abrí los ojos encontré la figura dormida de Beck sobre mi pecho, y de mi con una de mis manos en su cintura, acaricie un poco la zona y luego me levante cuidadosamente para no despertarla, busque en mi armario algo para ponerme, salí de la habitación para luego bajar a hacer el desayuno, mientras cocinaba sentí unas manos sobre mi espalda, cuando voltee vi ahí a la rubia de ojos claros, iba con una camisa ancha y larga que era mía, deje un beso corto en sus labios y luego ella se sentó sobre el mesón de un salto, mientras yo terminaba de exprimir unas naranjas

-¿Dormiste bien?- pregunte

-Super, ¿y tú?-

-Bien. ¿Cuáles son los planes para hoy?-

-¿Películas?-

-Vale, ¿segura que no quieres ir a ningún lado?-

-Si, quiero quedarme contigo-

Servi el desayuno y nos sentamos a comer mientras hablábamos de cualquier cosa sin importancia. Cuando terminamos lavamos los platos y luego subimos a la habitación a ver las películas que ella quería, y en eso se basó todo nuestro día...

—V.bz♥︎

Polos opuestos¹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora