Hijo de un angel y un Demonio

presente

Hoy era el exámen físico, por obvias razones realizó el escrito en su hogar. Ahora mismo estaba en el auto de sus padres, acostado escuchando música, no quería que la gente lo viera a través de la ventana.

Siendo sinceros tenía miedo, miedo de que lo trataran igual que cuando era pequeño, su "deformidad" como lo llamaban las personas, le había creado varias inseguridades. Sus cuernos, quienes era su mayor problema, se habían enrollado(tipo esas cabras), aunque podía desenrollar las y quedaban muy altas, en su opinión.

-Katsuki, ya llegamos- Hablo su madre - tu capucha esta en el maletín, Ponte la si quieres pero sabes que tendrás que quitarte la para la prueba- Le explicó mientras se volteaba y lo miraba.

-Esta bien.. - El tenía problemas en hablar pero no de pronunciación, como cuando no le puedes hablar a alguien por timidez y te quedas callado, claro que eso no pasaba con sus padres.

Busco la capucha y se la puso, le cubria todo el cuerpo hasta los pies, tenía un símbolo de la UA para que lo reconocieran y no pensaran que era un villano. Su madre les habían avisado de su "condición" y explicado como era.

Cuando bajo del auto todos los estudiantes lo miraban, al parecer pensaron que era un villano por que muchos de ellos se alejaron, camino a paso rápido hacia un maestro, el cual era Aizawa shota, el le tenía confianza, más por que no lo juzgó cuando lo vio por primera vez.

-Hola katsuki, ven vamos a entrar, te llevaré con los demás -Hablo Aizawa mientras le ofrecía su mano.

-Esta bien, gracias.. -Hablaba con el sin problemas pero muy bajo, no queria que otros lo escucharán.

Tomó la mano de su tío, el lo llamaba así desde que se conocieron, osea cuando tenía 14 años, no tanto pero le tenía cariño. Caminaron hasta que entraron en una sala donde habían muchos adolescentes, tenia miedo? Un poco si, no sabía cómo iban a reaccionar cuando lo vieran si su capucha.

Cuando su tio lo dejó solo, por temas del examen, varias personas lo miraron como si se hubiera infiltrado, algunos se alejaron por miedo y otros solo miraban con curiosidad.

A lo lejos un peli-verde lo miraba de forma discreta no tan discreta, lo recordaba, el niño que se veía raro y el que su abuela le dijo que no se acercara, estaba arrepentido pues en esos tiempos el era su único amigo y talvez el lo era para el.

Mientras con nuestro protagonista, el estaba nervioso por no decir que estaba aterrado, faltaba poco para que la prueba comenzara, había un reloj arriba en la pared donde decía el tiempo que faltaba, sabía que cuando llegará a cero las puertas se abrirían y tendría que mostrarse, solo esperaba que nadie lo juzgará.

Antes de que el cronómetro llegará a cero, se escuchó un altavoz donde decia "Estudiantes! Prepárense la puesta comenzara en 5 segundos!" y eso fue todo para que los jóvenes se preparaban.

Cuando la cuenta regresiva llegó a cero las puertas se abrieron, todos empezaron a correr menos el, solo camino hasta la puerta y se quitó la capucha cuando salieron todos.

Hermosas alas blancas se abrieron completamente, todos los presentes se quedaron asombrados por lo hermoso que era, aunque tenía cuernos y una cola puntiaguda nadie le temió, solo admiraban su belleza.

De pronto el ser majestuoso salió volando hacia los robots explotando los en cada ataque, todos quedaron en shock pensaron que sus alas era su poder pero no, su poder eran las explosiones, 'Talvez tenga dos quirks' pensaron todos. Entonces comenzó la prueba.
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Cuando el examen acabo katsuki se volvio a poner la capucha pero sin que le tapara la cabeza, ya lo habían visto no hacia falta taparse otra vez, los adolescentes lo miraban con admiración pero el no lo sabía, hasta que..

-Bro, Eres increíble! Como es que tienes dos quirks? Es impresionante!! -Hablo un pelirrojo emocionado junto a un chico rubio que daba brincos a su alrededor.

El se impresiono pues nadie le había dicho eso antes, se tapó la cara en vergüenza pero sonrió detrás de sus manos.

-Gracias... -Se escuchó una voz muy baja, los dos jóvenes se quedaron en shock era la voz más dulce que habían escuchando.

Los dos chicos le dieron una sonrisa cuando se destapó los ojos, talvez estar aqui no sería tan malo...