prologo

2 0 0
                                    


AHG!- Exclamo Julia luego de haber caído al piso al ser golpeada por una pesadilla- Mierda!

Una de esas cosas horribles de acercaba a ella lentamente, pensando en una sola cosa, comida. 

La pequeña niña ya no podia más, estaba cansada, con hambre y sed. Aquella sombra seguía acercándose mientras parecía abrir su boca cada vez más, dejando ver sus grandes dientes y la sangre por la que estos estaban manchados. Sangre de humano -pensó Julia- No, yo no puedo ser la siguiente. Todavía, no los he encontrado- La menor estaba a punto de llorar, aunque no quería hacerlo, pero sabía que ese era su fin. No dejaba de pensar en la unica misión que tuvo desde que todo ese desastre comenzó. 

la sombra seguía acercándose, ya se podia ver toda su boca. Julia lo tenía casi respirándole en la cara. Podia oler la sangre y ver los huecos que tenía esa cosa por ojos ya que no los tenía. Alli fue cuando una pequeña lagrima bajo por el pómulo del infante, y no tuvo más remedio que acomodarse sentándose en la esquina del final del callejón, y abrazando sus piernas para luego meter su cabeza entra sus rodillas, esperando su muerte. La pesadilla estaba a punto de actuar hasta que de repente, soltó un grito infernal. 

AAAAAAAAAAAAA- Un horrible sonido. Se asemejaba a cuando un cubierto raspaba un plato y emitía un ruido que hasta llegaba a lastimar los odios, Julia levanto de un susto su cabeza. La criatura comenzó a sangrar y se giró repentinamente hacia atrás que era desde donde parecía que lo habían lastimado. La cosa camino a caminar hacia atrás y buscar al agresor. Julia tenia miedo, respiraba tan agitadamente que podrían escucharla a mas de dos metros, hasta que una mano le tapo la boca. Julia quiso gritar pensado que se trataba de otra pesadilla, pero al girarse un poco hacia la izquierda, logro ver a un chico de no más de 16 años que con su otra mano puso un dedo en su boca en señal de que guardara silencio. La niña entendió aquella seña y asintió aun con lagrimas en sus ojos. Aquel chico saco su mano de la cara de Julia e hizo una seña para que la niña lo siguiera. Esta, le hizo caso.

__________WORST NIGHTMARES, CAPITULO UNO__________

Tiempo antes:

La noche era oscura como todas las demás, la lluvia caía en la ciudad de Nueva York y nublaba la vista. El mundo parecía querer acabarse, pero todavía no se rendía. Aunque, toda la ciudad se preguntaba cuando lo haría... o al menos lo que quedaba de ella. Aun así, ya a nadie le importaba. Lo único importante era sobrevivir. 

Fue entonces cuando deje mis pensamientos atrás y trate de concentrarme en mi objetivo actual, llegar a casa a salvo. La lluvia seguía cayendo, Y escuché como una de esas cosas se acercaba a mi, me di la vuelta y vi una sombra negra que se acercaba. Está, no parecía haberse percatado de mi así que corrí en silencio. Tenía los alimentos de esta noche, y ya podia ir a mi casa. Corri una cuadra entera evitando cualquier encuentro inesperado con esas cosas y llegue a la puerta. 

Luego de mirar que no hubiera nadie, quite el tablón que la cubría y entre, volví a poner el tablón donde, iba con el propósito de no dejar que nadie pase, y deje mis cosas en la sala. Estaba a punto de prender la vela que había tomado de la mesa junto la puerta, cuando que escuche un ruido dentro de la casa. Encendí rápidamente la linterna, la cual no debía gastar la batería porque ya casi no tenia, y tomé un palo que tenía cerca mío, apunte a todos lados buscando a lo que había provocado el ruido, cada vez lo escuchaba más cerca. Sentí algo en mi pierna y estaba a punto de patearlo.

Miau- Maulló Church el cual se encontraba pegado a mi pierna

¡Dios mío! CURCH! - grite al gato- Casi me matas del susto!

el gato dejo de frotarse en mi pierna y volvió a adentrarse en la oscuridad, como si lo hubiera hecho apropósito. Solté un suspiro y prendí las velas de la sala hasta iluminarla toda. Agarre la bolsa que había traído de mi anterior exploración y prendí una hoguera. Cuando el fuego era considerable, tomé la pequeña lata que había encontrado de tomate y la calenté. 

Mientras, esperaba a que calentara, me serví un vaso de agua y le puse un poco a Church de ella. Era un gato curioso, blanco con ojos verdes. Lo había encontrado en esta misma casa, llegue hace un mes y el gato estaba durmiendo en el sillón que ahora era nuestra cama. Nos hicimos muy amigos a pesar de que, en nuestro primer encuentro, cuando trate de acariciarlo me había rasguñado.

Las horas pasaron y la lluvia seguía cayendo. Me sente como todas las tarde-noche junto a la ventana y entreabrí la cortina para mirar por la ventana sin que me vieran a mi. Church se acostó sobre mis piernas y así nos quedamos esperando a que la noche pasara. Rara vez llegaba a conciliar el sueño, era difícil para mí. La idea de que las pesadillas podrían encontrarme mientras dormía era suficiente motivación para quedarme despierta toda la noche. 

Esa noche era particularmente oscura, no se veía nada y era preocupante. De repente, la vela que estaba cerca de la puerta principal se apagó sola. Gire la cabeza hacia la puerta y luego hacia Church, lo tome, y lo quite de arriba mío para luego pararme. Tome de la mesa el encendedor de mi padre y me acerque a prender la vela, hasta que se volvió a apagarse otra vela diferente. Me gire rápidamente y se apagaron dos más, esto ya no era el viento. Comencé a llamar a Church para que se acercara a mi, pero este no parecía escucharme. Corri sin hacer ruido hacia él y de paso tome mi mochila con mis cosas. Estaba a punto de cruzar la puerta cuando vi a una de esas cosas en la entrada. La cerré rápidamente y me quedé frente a ellas.

  Pum- Estaba golpeando la puerta para entrar. ¡PUM! cada vez se escuchaba más fuerte, no parecía querer parar PUM, PUM, PUM, Ahi me di cuenta, esa cosa, tenía hambre.


_ (cuando aparezca esta raya, significara un cambio de personaje) _

30 minutos después.

La lluvia seguía cayendo en la ciudad, pero las pesadillas hoy no parecían estar agresivas, eso me facilito mucho el camino de vuelta. 

Llegue a una avenida la cual estaba, extrañamente, muy vacía. Me encontraba pasando por detrás de los coches abandonados para que ninguna de esas cosas pudiera verme y de paso, "chequearlos". Estuve así un rato hasta que por fin llegué al último coche.

Vacio- Dije para mi mismo cuando termine de revisar aquel ultimo auto. Solo había encontrado una foto de dos gemelos pequeños y sus padres. Me pregunte que les habrá pasado. 

Todas las familias e personas de la ciudad de Nueva York tenían una historia trágica, nada bueno había salido desde aquel fatídico día donde se anunció el fin de la ciudad y, probablemente, del mundo. Mis recuerdos terminaron allí cuando un grito me saco. Pase despacio detrás de árboles para luego llegar a un callejón vació, allí fue cuando una sombra apareció detrás de mi. Sin dudarlo, corrí más rápido hacia el fondo del callejón donde había grandes contenedores de basura. Me acerque a ellos y vi una escalera que estaba tapada, corrí aquellos contenedores e intente abrir la escalera, no había caso, estaba trabada. La cosa se seguía acercando y sentía como su caminar se hacía más fuerte ya que estaba más cerca. Comencé a patear la escalera haciendo un gran ruido, esto atrajo a más pesadillas y mi desesperación comenzó a aumentar. Estaban detrás de mí, querían comerme, no había escapatoria. 

Worst NightmaresWhere stories live. Discover now