Reencarne en Petunia Evans

Capítulo 3

Finalmente ya he actualizado. Quería decirles que me digan que les pareció el capitulo y que le den apoyo a mi nueva historia de "Transmigré en Draco Malfoy" 💗💗

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Habían pasado horas y Lily y Severus seguian hablando y hablando, aunque más bien, Lily era la que hablaba, Severus solamente la miraba sonrojado y la escuchaba atentamente.

-¿Nos podemos ir ya?- Dije molesta mientras me acercaba a Lily y Severus.

-No seas molesta, mocosa.- Dijo Severus mirándome mal por haber interrumpido a Lily.

Ví como Lily solamente se rió y yo me senté molesta al lado de los dos.

-No seas molesta, mocosa- murmuré en voz baja y repitiendo las palabras de Severus con tino molesto y burlon.

-¿Que has dicho, mocosa?- Dijo tranquilo Severus mientras se levantaba, yo me sentía un poco intimidada por la diferencia de altura y edad aunque ya sabía que sería imposible que el me agrediera así que solamente me quedé en silencio con y mirando los pájaros que volaban.

Yo ví como Severus se sentaba al lado de Lily y ellos seguian conversando, aunque en realidad Lily hablaba y Severus le miraba ligeramente sonrojado.

Yo suspiré aburrida y me quedé observando y analizando a Lily y a Severus. Lily era una chica bonita, con cabello pelirrojo y unas bonitas pecas en su rostro pero lo que más destacaba de ella eran sus ojos verdes. Lily y yo éramos polos opuestos, ella era tan alegre y con una apariencia salvaje y bonita. Yo era rubia de ojos azules, con la piel sin ninguna imperfección y sin ninguna peca, yo era muy tranquila y tenía cara de niña buena.

Yo seguía callada y mirando los pájaros y noté como Severus se quedó mirándome por unos segundos. Yo como la chica tan madura y responsable que soy, le saqué la lengua y le miré burlona ya que Lily no me había visto. Cuando Lily se giró, yo disimulé y seguí viendo los pájaros volar. Lo que yo no había notado fue el pequeño sonrojo en el rostro de Severus...

-"Lily...¿Puedo irme yo sola a casa? No me perderé."- Hablé un poco tímida mirando a mi hermana mayor. Ella suspiró molesta y me dejó irme.

Yo me levanté y comencé a caminar hacia mi casa, por suerte no estaba lejos y ya me sabía el camino. Yo entré a casa y ví a mi padre bebiendo café, seguramente mi madre habría salido con sus amigas.

-"Petunia, ¿que haces aquí en casa? ¿Donde está Lily?"- Escuché hablar a mi padre, yo le miré fijamente a los ojos y hablé con mi bonita y aún infantil voz.

-"He vuelto sola, Lily aún esta con severus hablando."- Expliqué tranquila y mi padre me acarició la cabeza. Yo bajé la mirada sintiendo como me ponía nerviosa y timida, no estaba acostumbrada a este tipo de afecto...

-"Papá, ¿Puedo probar un poco?"- Pregunté mirando fijamente la taza de café de mi padre, el delicioso olor a café  me hacía recordar todas las noches que me desvelaba para estudiar y lo que me salvaba era un delicioso café bien preparado.

Miré a mi padre dudar un poco y seguido a eso el bajó su taza de café y me la dio. Yo la agarré y comencé a beber, cerré los ojos al sentir el delicioso sabor pasar por mi garganta, iba a beber más hasta que mi padre me quitó la taza. Yo le miré fijamente a los ojos y con un adorable puchero en mi lindo rostro.

-"No me mires así, aun eres una niña, si bebes café te hará daño."-Escuché decir a mi padre y el me pellizcó suavemente mi mejilla.

-"Pero solo he dado un pequeño sorbo, solo un poquito más  porfavor papá..."- Dije suplicante y decidí usar mis lindos rasgos a mi favor. Yo miré fijamente a los ojos a mi padre con mis brillantes ojos azules, mirándole de manera adorable y suplicante.

-"Pequeña manipuladora..."- Escuché murmurar a mi padre y el bajó la taza de café y me la dio. Sabía que nadie podría resistirse a una bonita cara infantil y adorable.

Yo agarré la taza de café en mis pequeñas manos y comencé a beber. Había echado mucho de menos el beber café. Yo ya me terminé toda la taza y escuché a mi padre hablar.

-"No le digas nada de esto a tu madre."- Escuché decir a mi padre y el cogió un papel y me limpió suavemente mi boquita que estaba un poco manchada de café.

-"Prometo no decir nada, gracias papá."-Dije tranquila y le sonreí a mi padre. Seguido a eso yo me marché a mi habitación.

Horas después escuché como volvieron Lily y mi madre a casa, mi madre subió a mi habitación y abrió la puerta sin pedir permiso, ella parecía muy enojada...