¡𝗧𝗼𝗱𝗼 𝗣𝗼𝗿 𝗨𝗻 𝗘𝘀𝘁𝘂𝗽𝗶𝗱𝗼 𝗣𝗿𝗼𝘆𝗲𝗰𝘁𝗼! → sᴜɴᴋɪ

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Sunoo caminaba lento por las calles vacías y frías de aquella noche, su mano derecha en metida en el bolsillo de su chaqueta mientras que la otra sostenía un cigarrillo a medio terminar, Aquel era un dato que nadie sabía de él, nadie sabía que fumaba. Jungwon una vez lo había cachado y lo regaño muy feo por eso. Pero sunoo pudo evadirlo fácilmente con prometer no volver a hacerlo. Aunque claramente le mintió, aunque tampoco es que fuera un adicto al tabaco o alguna mierda como esa, era rara la vez que tenía un cigarrillo entre los dedos, una caja podía durarle literalmente años. Solo lo hacía de vez en cuanto, cuando su estrés estaba a tope y no sabía cómo manejar sus nervios, recurria a eso para al menos relajarse un poco. Cosa que lo amerito en ese momento

Había salido con jungwon heeseung jay jake y Sunghoon esa noche, inicialmente no iba a ir. Pero jungwon insistió en llevarlo para sacarlo de su habitacion qué su mejor amigo llamaba cueva, Siendo ayudado por jake y Sunghoon. Qué eran el triple de insistentes qué jungwon, así que terminó por aceptar. Estaba bien al principio. Pero no se sentía cómodo estando ahí, se sentia paranoico al quedarse solo, así que mejor decidió irse a casa. Diciéndoles a los demás que tenía un malestar de cualquier cosa para irse. Ellos no rechistaron a ello y Jay se había ofrecio a llevarlo a su casa, pero sunoo se negó. Quería caminar un poco y pensar también, aunque dichos pensamientos no eran tan bonitos que digamos

Estaba preocupado por ni-ki, durante todo ese tiempo espero que tal vez volviera. Le llamara o algún mensaje. Cualquier cosa que para saber que estaba bien, pero no había nada, trataba de comprender las cosas y hacer exactamente lo que ni-ki dijo: ser paciente y esperar

Pero, ¿podían culparlo por no serlo?

Sabia que debía esperar. Pero sentía que no podía, extrañaba a ni-ki, lo extrañaba tanto y obviamente estaba impaciente a verlo. No importaba si fueran solo un par de minutos o solo segundos, solo quería verlo y saber que estaba bien, pues la idea de que este con sus padres le ponía inquieto y preocupado, Sunoo no confiaba en lo absoluto en ellos

Se sentía culpable, y la persona más inútil de este maldito planeta por no hacer nada por su novio como debía hacer, aunque aveces trataba de no ser tan duro consigo mismo, pensar que tal vez no era taaan culpa suya que ni-ki tuviera que irse, pero aún así, sentía que la mitad de la responsabilidad le pertenecía, y que ni-ki tuviera que asumirla por completo le hacía sentir inútil, porque se supone que iban a hacer esto juntos. Y aunque quisiera. Pareciera que ni-ki no quería que se metiera en esto, aunque había considerado el no hacerle caso, considero el ir a hablar con jurin sin decirle a ni-ki y al menos tratar de hacer el intento, pero las dudas lo atacaban cada dos segundos de pensarlo, porque no sabía cómo la tía de su novio iba a tomar su presencia, ¿Y si se enojaba más? ¿Y si por eso castigaba peor a ni-ki o algo así? Tampoco sabía si el de cabello bicolor se iba a enojar con el porque iba a hablar con jurin considerando lo serio que hablo en el momento que le dijo que no debia acercarse a ella, asi que siempre que pensaba que debía hacerlo. Que debía hablar con ella para aunque sea le deje hablar con ni-ki otra vez, al final lo descartaba. Pues la sola idea de pensar en meterlo en más problemas por eso... Le hacía doler la cabeza

- Eres en verdad un idiota, Kim sunoo - se regaño a si mismo, deteniendose a un lado de un contenedor de basura. Apagando el cigarrillo para después tirarlo, soltando un largo suspiro en ello. De verdad esta situación no lo tenía tranquilo

Siguió su camino. Mirando rápidamente la hora en su teléfono. Eran las doce y algo, era tarde y quería llegar rápido a casa, así que apresuró su paso. Mientras seguía lamentandose internamente. Mirando sus zapatos únicamente. Perdido en su cabeza hasta que estuvo frente a la puerta de su hogar. Saco sus llaves y procedió a abrir la puerta. Pero antes que pudiera ingresar a su hogar como tanto quería, una voz detrás de él lo hizo quedarse quieto en su lugar