Tú eres mi Aeternum

Capítulo 7: ¿Me dirás tu nombre?

Amanda

Hace un rato Daniela había usado mi Lamborghini con la excusa de que el de ella se había estropeado, estaba en perfectas condiciones, pero el mío le encantaba y pues qué más daba, dejé que se lo llevara un rato, luego salí yo en él con la idea de pasarme un rato por un restaurante cinco estrellas mientras coordinaba una reunión con Mario

Cogí una carretera que siempre estaba desolada para disfrutar un poco de tranquilidad que nunca tenía, pero cuando iba a medio camino para mi sorpresa la muy inteligente me lo había devuelto sin apenas combustible, no me había dicho nada y ahora estaba en una carretera en medio de la nada donde fácilmente podría aparecer cualquier psicópata o asesino serial.
Le había llamado veinte veces y no me respondía, llamé a Joshua y pasó a buzón, Mario está en Escocia desde ayer en la tarde y los taxis no vienen a esta zona puesto a que pocos saben de ella. Llevaba tres horas aquí y la verdad cuando viera a Daniela íbamos a tener serios problemas. ¿Era mucho pedir un poco de tranquilidad o es que ni eso podía tener?

Estaba recostada en el Lambo cuando veo a lo lejos que se acerca un auto
¿Noticia buena o mala?

Reduce la velocidad <<va a parar>>

Reviso que en mi bolso traiga mi Glock, la cual no dudaría en usar si era un maniático, en que ese fuera el caso le disparaba, me llevaba el auto y salía de aquí
*Ok, no, ¿qué mierda estaba pensando? Más optimista imposible*

Se detiene por completo frente a mi y se baja un hombre con aspecto de todo menos de maniático

Alto, pelo marrón, traje de marca, zapatos de diseñador, reloj exclusivo
Era millonario, no tenía duda

- ¿Todo bien? Me parece que te has quedado sin combustible en medio de la nada-me dice entonces

- ¿Cómo le has adivinado? Pensé que parecía que estaba dando un paseo

-Ya, no todos los días hay personas en esta vía- suelta una pequeña risa-¿Pensabas acampar- dice con sarcasmo marcado

-Por supuesto, ¿no ves que ya he armado la carpa?-le sigo el juego, parecía un puto arrogante y que estaba haciendo un esfuerzo monumental para tratar de ser amable

- Me doy cuenta-hace silencio unos segundos - ¿Necesitas un aventón? ¿A dónde te diriges?

-Al restaurante "Bona'dour"

-¿Con reserva?-se sorprende un poco puesto a que es de los más caros del lugar

-Hace tres horas tenía, ahora no estoy muy segura

Ríe descaradamente

- Pues si quieres puedes venir conmigo, te prometo que aunque no tengas reserva más a recibir la mejor atención del lugar

-¿Estás seguro?-dudé, pero venga, no le conocía de nada

-Si, claro, y no te preocupes, no soy un asesino en serie, si lo fuera ya te habría matado-dice entonces-O tal vez si lo soy ¿quién sabe?-bromea-¿Te arriesgas?

Seamos sinceros. Estaba en un lugar desierto, sin combustible y le había dado hoy el día libre a mi personal. No tenía forma de salir de aquí, y si las cosas se ponían feas aún traía mi Glock

-Me arriesgo-dije dedicándole una sonrisa amable

Nos dirigimos a su auto, un convertible verde, y salimos de allí. Luego de unos minutos me habló

-Y cuéntame, como terminaste sin combustible en medio de la nada durante tres horas-me pregunta desviando momentáneamente su vista hacia mi, y juraría que le había visto antes pero no sabía dónde, supongo que en una de las tantas entrevistas que he dado