La Caótica Mente de un Corazón Roto

¿Una carta de Amor?

¿Te digo un secreto?

Cuando te conocí, me llamaste la atención, y con los días fui genuinamente enamorándome de ti.

No de golpe. No, no podría decir que fue un amor a primera vista porque te estaría mintiendo, no caí perdidamente enamorada de tí al conocerte y creo que ese fue el problema; enamorarme lentamente, poco a poco, eso fue lo que hizo que el enamoramiento fuera más fuerte.

No sé cómo, pero si sé por qué...

Porque eres maravilloso, la verdad, y genuinamente eres lo más hermoso que me pasó este año.

Algo que escuchaba constantemente eran las afirmaciones de mis expectativas siendo muy altas, y de repente llegaste tú, como la lluvia refrescante tras un largo día de un sol quemante, y cumpliste con ellas, y me mostraste que había más, cosas que ni siquiera había pensado.

Y me hiciste sentir la persona más bonita del mundo.

Me hacía feliz saber que estabas feliz, me hacía feliz saber que estabas, que ahora eras parte de mi vida.

Cada día me enamoraba más de ti, y me daba cuenta que no habría marcha atrás, que me gustabas.
Me gustabas más de lo que nadie me había gustado y de esa forma me di cuenta de que en realidad, nunca me había gustado alguien más en mi vida.

Y también me di cuenta de que, si un día tus preciosos ojitos decidían no mirarme más a mí, me dolería como no lo había imaginado. Pero, una parte de mi sabía que eso no pasaría, al menos eso quería creer, al menos no pronto, ya que yo no estaba dispuesta a que eso pasara, tal vez motivada por la existencia de un sentimiento real por primera vez.

Y me da algo de miedo.

Me da miedo porque sé que tal vez no esté siendo la persona que estás buscando, y que entre tantas opciones, te des cuenta de que no elegiste la mejor me rompería el corazón, pero créeme que intento ser mejor persona por ti, y también por mí, obviamente, porque en verdad me gustas.

Me gustas, y me gustas.

Y en este punto no hay nada que pueda hacer para remediarlo .
Nada que pueda impedir que siguiera enamorándome cada día, esperando que tú también te enamoraras de mi de la misma manera.

Y después me encuentro a mi misma escribiéndote esto a la 1 de la mañana, y pienso "¿cómo deje que mis emociones llegaran a ser tan intensas, si realmente no somos más que dos personas que se gustan, pero nada más que eso?"

Y no quiero presionar para que seamos nada más que eso, me gusta cómo nos encontramos en este momento, me gusta ser la niña que te gusta, me gusta gustar de ti.

Y me gustaría que fuéramos algo más después de conocernos, claro, esto si aún te gusto para ese momento.

Me gustaría que saliéramos más veces y que me siguieras enamorando cada día, tú también enamorandote de mi con el pasar del tiempo.

Y tras leer esto, me doy cuenta que tal vez solo soy algo intensa y no quiero que pienses eso...

Pero también sé que, no puedo simplemente no externar todo lo que siento, y no por mi, si no porque quiero que te des cuenta de cómo te veo, de que cómo a través de mis ojos eres lo más precioso del universo.

Me encantaría que fueras mi novio, y poder decirle a los demás que tengo como mi novio a una persona tan maravillosa como tu.

Nunca digo cosas así.

Nunca suelo ser así porque tengo miedo de salir lastimada...

Pero creo que contigo vale la pena serlo.

Y de verdad discúlpame si soy demasiado, espero con todo mi corazón que no te termine ahuyentando por ser tan idiota como para escribirte una extensa carta de amor en medio de la madrugada...

Pero créeme que tenía que hacerlo.

Fue un día bastante largo y lleno de emociones que me hicieron darme cuenta de todo lo que terminé diciéndote en esta carta.

Todo lo que terminé sintiendo me ha llevado a escribir lo que algunos clasificarían como una carta de amor...