Capítulo No.19

26 8 2
                                    

Yesung tomó el celular y comenzó a examinar los expedientes de cada camarero, comparando las caras de sus fotos con el recuerdo que tenía. Después de unos minutos encontró lo que buscaba. Se llamaba Mélanie y trabajaba como camarera desde hacía dos años.

“Esta es”. 

“Deja, busco su dirección”. 

Tras unos minutos más de búsqueda descubrió que la chica vivía cerca, a siete manzanas del edificio.
“Vámonos”. 

Salieron con rapidez y pocos minutos después llegaban al departamento de la chica, situado en un edificio un poco feo pero céntrico en la ciudad. Ya era de madrugada cuando tocaron a la puerta. pero por la velocidad a la que la muchacha respondió, se hizo evidente que no podía dormir.

“¿Nadie te ha dicho que veas por la mirilla antes de abrir? ¿Sabes a cuántas chicas de tu edad secuestran por ser descuidadas?”
Replicó Min molesto.

Melanie retrocedió asustada pero luego vio a Yesung lo reconoció.
“Señor Kim... lo siento, es que con todo lo que pasó estoy muy nerviosa”.

“No te preocupes, te entiendo, pero necesitamos tu ayuda”.

“¿Mi ayuda...? ¿para qué?”

“Para identificar a la jefa de servicio de tu compañía”. 

La muchacha pareció dudar un momento y Min lo notó.
“¿Qué es lo que pasa? ¿En qué pensaste?” 

“Bueno es que... la conozco desde hace dos años... o sea desde que empecé en la empresa. Y es una persona muy dulce y amable. ¡No me la imagino haciendo algo tan malo como... bueno como lo que le hicieron al señor Kim!”
Explicó la muchacha.

Yesung respiró profundo y asintió.
“Lo entiendo, pero no la estamos acusando. Por ahora solo necesitamos saber qué fue lo que pasó, ella también desapareció del edificio. Si ella no hizo esto o lo hizo bajo amenaza, puede incluso que hasta esté en peligro”. 

Melanie abrió mucho los ojos y asintió de inmediato.

“Esperen, debo tener alguna foto de ella en mi teléfono”.
Dijo ante de que Yesung pudiera sacar la foto del expediente digital para corroborarlo, pero en cuanto la muchacha le mostró la de su celular, comprobó que era la misma persona.

“¿Esa es?” 

“Sí, ella misma es”.

“Perfecto. ¿Sabes su dirección?” 

“Bueno, nunca he ido a su casa, pero sé que está al este, en el barrio de las flores”.
Respondió la chica.

Min asintió, porque la dirección del expediente estaba justamente en ese barrio y después de agradecer salieron de allí de inmediato. Todos subieron a los autos y dirigieron al este. Por el camino, Min les explicó que era una mujer de unos treinta y cinco años de edad, soltera y con un hijo de siete años.

“No tiene relaciones con nadie peligroso que conozcamos”.

“¿Ni siquiera con Lee TaeSun?”
Pregunto Yesung

“No, nada que ver. Pero supongo que pronto lo sabremos, ya estamos llegando”.
Respondió SeoJoon y señaló a una de las casas de la calle, sin embargo, mientras se acercaban a su dirección vieron algo que los hizo desconfiar.

La jefa, se bajaba de su auto apresurada, con un niño en brazos al que apenas era capaz de cargar ya. Estaba evidentemente nerviosa y asustada, pero en cuanto ellos se acercaron aquel nerviosismo pareció convertirse en terror y corrió hacia la casa sin decir palabra.

"Creer".Where stories live. Discover now