CAPÍTULO 41

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Aclaración: en este cap, todo lo que los personajes digan y esté en cursiva, es porque lo están diciendo en inglés.


Milagros pov:

—¿Ya te dije que te quiero muchísimo y te deseo la mejor de las suertes para hoy?

—Creo que como 3 veces ya, Cris —me reí y lo abracé.

—Bueno, una cuarta nunca está de más. —Me correspondió el abrazo y me apretó contra él, casi cortándome la respiración.

A veces me olvidaba que tenía mucha fuerza y agradecía no tener que jugar partidos contra él porque sabía que, probablemente, terminaría con algún hueso roto.

—Cris... —susurré divertida—. Me estás asfixiando.

—Ay perdón —se disculpó—. Es que te veo tan feliz en estos momentos y tengo miedo de que no sea igual cuando vuelvas. —Se separó del abrazo y puso sus manos en mis hombros para mirarme directamente a los ojos—. Si cuando están en la universidad, empieza a haber mucha gente que los reconoce y eso te hace sentir incómoda, no dudes en decirle a Lisandro. Ya sé que ya lo sabés pero solo quiero recordártelo para que no sientas que sos una boluda por sentirte abrumada si llega a pasar eso. Es porque no estás acostumbrada a que la gente te preste tanta atención mientras solamente existís y es normal. A veces nosotros no sentimos incómodos y ya estamos bastante más acostumbrados, así que imaginate.

—Gracias por recordármelo. —Le di un beso en el cachete a modo de agradecimiento. Cristian era bastante cariñoso la mayoría de las veces con las personas y solía ser muy demostrativo. Más cuando estabas sensible o lo estaba él—. Probablemente sea un poco incómodo pero creo que voy a estar bien y cuando vuelva, les voy a contar absolutamente todo: como es el edificio, las cosas que hay, si tiene una biblioteca o si no, todo.

—Le voy a avisar a todos entonces y voy a comprar helado para cuando vuelvas con Licha y Zoe —me sonrió—. Si todo salió bien, celebramos y si no, podemos quejarnos comiendo helado.

—Eso me parece excelente —dije y se me ocurrió una idea para proponerle—. Che, ¿viste que cuando nos conocimos me dijiste que me seguías porque te gustaba mucho mi contenido?

—Ajá.

—Se me acaba de ocurrir que, ya que voy a hacer pública mi relación con Lisandro, algún día de estos podrías aparecer en algún video mío que te cope.

—¿Me lo estás diciendo en serio? —preguntó emocionado.

Asentí y se tiró encima de mí para abrazarme otra vez. Lo había hecho con tanto impulso, que terminó levantándome del piso y empezó a girar.

—Bueno, se ve que la extrañaste mucho, Cuti. —Lisandro apareció por la puerta que conectaba al hall de entrada y el comedor—. La vas a matar si la seguís abrazando tan fuerte.

Cristian me bajó y se separó de mí, pasando uno de sus brazos por arriba de mis hombros mientras se reía.

—Uuh ya se puso celoso este. —Lo miró divertido—. Sí, la extrañé mucho y a vos también pero vos no me ofrecés salir en videos tuyos recorriendo la ciudad o hablando de libros, ella sí. Aparte...es más linda —susurró jodiendo y Lisandro se empezó a reír fuerte.

—Me duele lo que me decís, Cristian. —Licha se llevó, de manera exagerada, una mano al pecho—. Yo pensé que me considerabas lindo y talentoso, me mentiste.

—En mi defensa, te lo dije cuando todavía tenías el pelo oscuro —contestó—. Ahora que lo tenés teñido de rubio arriba... —Hizo un silencio, dando a entender más o menos a lo que se refería pero sin terminar la frase—. Igual, el corte que tenés hecho ahora te queda hermoso eh. Muchísimo más lindo que cuando tenías el jopo.

Malentendido | Lisandro MartínezWhere stories live. Discover now