Que Estés ~pablizza

capítulo 25

Pov Sofia

"–Te ves ojerosa, cansada, con los párpados rojizos. Yo conozco a Pablo desde que estaba en pañales"

Las palabras de mi suegro sonaban en mi cabeza, mientras tapaba con una base lo que había él había señalado

Y tiene razón. Realmente estaba destrozada, desesperada.. cada día que pasa se acerca más a ella y se distancia de mí.

Sé que no debí atacar a alguien vulnerable en el hospital. Pero fueron mis patadas de ahogado.

Así que pensé que tal vez Sergio me podría ayudar, sé que le agrado o al menos así me lo ha hecho saber desde que me conoció.

"–Por fin Pablo, está es una buena"

Regresé donde me espera aquel canoso señor, un poco más desinteresado viendo la tele

–Ah, regresaste –murmuró Sergio– me alegra verte mejor. Si ya tenés que irte no te preocupes por mí, mandale un saludo de mi parte a Pablo.
Me hiere profundamente que no haya podido venir a visitarme y aún más que me haya dejado colgado sin explicación..
Es triste, Pablo es todo lo que tengo. Es el único que se molesta en visitarme o bueno lo hacía, ya está

Asentí

–No se preocupe, yo me quedó. Sé como se siente

Quizás Pablo me tiene completamente paranoica, quizás me dejé llevar por las pocas cosas que el hijo habla de él. Incluso me atrevería a decir que necesitaba ir al baño y despejarme para ver que en realidad Sergio sigue siendo amable conmigo, como siempre lo fue.

Que seguramente ahora se siente más suelto sin Pablo cerca por toda la tensión e historia que existe entre ellos.

–¿Ah sí? Mirá vos.. –se alzó de hombros

–Y no se preocupe porque Pablo no tiene ningún conflicto personal con usted.

Me incomodan los silencios, cuando venimos de visita acá hay mucho silencio.

Pero a mi novio lo apoyo.

–¿Le pasa algo a Pablito? –indagó Sergio

–No no. Algo no, alguien –hago bromas de mi desgracia

El papá de Pablo no es más que un viejo en un psiquiatra, que seguramente no le interese mucho lo que pasa entre Pablo y yo. Justo por eso me tomo la libertad de hablarlo con él

–¿Alguien?

¿En qué cambia si Pablo está conmigo o no? Él se preocupará únicamente por su hijo, no por mí.

–Sí, cierta persona del pasado lo confunde mucho a Pablo. Pero pronto volverá todo a la normalidad no se preocupe.

La felicidad de su hijo, es lo más importante para un padre.

–¿Marizza? –cambió de canal

Lo volví a ver extrañada por el nombre que me acaba de dar.

–La tira bombas esa siempre le movió el piso a Pablo –dijo con un tono desinteresado– bueno me voy creo que es hora de la caminata.
Gracias por la vista.. ya vas a ver que Pablito se va a dar cuenta que esa nunca fue para él.

Pov Pablo

Llevé las manos a mi rostro, probablemente esto es de las cosas que más me han movido en la vida
Me hice hacía adelante colocando mis codos sobre mis piernas.

–Jamás la vi así.. –solté con un suspiró– fue horrible, de verdad pensé que se moría.

Le aseguré a mi mamá con los ojos cristalinos.

–Pero.. ¿qué pasó?

–Una sobredosis. Se inyecto, inhalo, hasta que.. la llevó al borde

Se creó un gran silencio en la habitación

–¿Sabes qué pienso? –mi mamá hizo una mueca para que continuará– ella se quería matar..

Me llevé las manos a los ojos para detener las lágrimas, durante unos segundos, mi vieja puso su mano en mi espalda compasivamente.

–Lleva intentándolo hace mucho tiempo pero yo no he querido ver. Por eso Manuel la obligó a regresar a capital. Para tenerla vigilada todo el tiempo y aún así terminamos acá

Mi madre estaba muda sin palabras, como todos fue un trago amargo.

Sólo asentía y palmeaba mi espalda.

Mientras yo .....

–¿Alguna vez te enamoraste, mamá? Quiero decir, alguna vez amaste tanto?

Traté de cambiar de tema. Creo que jamás había sufrido tanto y mucho menos desmoronarme al frente de mi madre.

–Bueno de tu papá.. pero no fue algo recíproco –mi mamá me siguió la corriente– yo lo conocí más joven sin tanta maña, sin tanta maldad, eso sí con mucha ambición y muy atractivo. Mi papá estaba encantado que yo saliera con el hijo de su amigo.
Mis padres murieron y bueno yo quedé sola, sin trabajo, con deudas que mi papá nunca se ánimo a contarme y en brazos de un hombre que no podía ver más allá de él mismo y el poder.

–¿Y qué pasó? –pregunté curioso

–Yo creo que tu padre si me llegó a querer, mucho antes de la política pero nunca a amar, amó la idea de su esposa de buena familia que le daba buena imagen, pero en ese tiempo yo estaba deslumbrada, me decía:
"No te preocupes, Mora. A vos nunca te va a faltar nada, porque vos sos mi mujer" y claro yo sin nadie más que me apoyara..
Viste eso que cuentan que si vos metes uno rana en una olla y poco a poco vas aumentando el calor, la rana no se da cuenta cuando la olla está hirviendo, pues eso pasó, Pablito

–Pero.. ¿Vos ya no lo amas? –indague con curiosidad

–No, es el padre de mis tres hijos pero me volví a enamorar tres veces más. Aunque hoy no esté en pareja

Asentí con la cabeza, sorbiendo de mi mate.

Podía entender a lo que mi madre se refería, lo que muchas personas me aconsejaron, lo que presencié hoy en el hospital con Mia y Fran: seguir con sus vidas

Pero de alguna forma aunque intentara no podía y algo en mi me dice que no soy el único atrapado en esta historia romántica, que ya no soporto

–Porque así se dieron las cosas, Pablo –contestó mi vieja como si leyera mis pensamientos– muy pocas veces conoces a una persona buena y la elegis siempre. A mi me hubiese gustado que mi primer amor fuese tan bonito, tan fuerte o alguno de los anteriores, pero no hay una matemática suficiente para aplicar con los sentimientos de cada persona y sus distintas situaciones.
¿Te pido algo?

–Decime.

–No las lastimes y no te lastimes