Beautiful ocean killer

☠️||ayuda

Las dos chicas se encontraban en el bar, cada una en lugares diferentes. La pelinegra estaba en la barra cubierta con una capucha y algunos pañuelos, mientras que la chica de pelo naranja se encontraba tomando algo apoyada en una columna.

Nami vio como un chico de cabello verde entraba con una bolsa y se sentaba justo al lado de su amiga mientras dejaba la bolsa al otro lado

—Una botella para mí y otra para mi amigo —le pidió —tuvo un día difícil —le dijo al ver como la cantinera miraba la bolsa

—Mmm un cazador de piratas —una voz dulce captó la atención el muchacho —hace mucho que no veo uno —dijo mientras veía la bolsa al lado de el

El chico de cabello verde miro a su derecha encontrándose con una encapuchada que se encontraba comando una botella

—Siéntete alagada —le dijo serio logrando que la chica sonría divertida y se voltee a verlo

Zoro vio unos ojos azules que lo miraron y por primera vez en su vida no se sintió como el cazador, sino como la presa. Pero no pudo ver nada más de su rostro ya que la mujer estaba cubierta por completo

—Lo estare cuando encuentre a un cazador de verdad, pero nada mal para ser principiante —le respondió aquella chica antes de dejar de verlo para tomar de su botella

Por alguna razón Zoro sintió como si algo le faltará, sentía una desesperación por la falta de atención que le dio la chica y la gran necesidad por hacer que sus ojos lo vean otra vez.

Pero lo único que pudo hacer el chico fue mirarla serio y en cuanto iba a decirle algo una niña que lo miraba tímidamente y soltaba risitas nerviosas captó su atención, pero en cuanto la miro la niña salió corriendo logrando que el cazador suspiré antes de tomar un trago a su bebida

—Hola, te invito un trago —Nami miro indiferente al chico

—Muy alto —dijo como si fuera lo que necesitaba decir para que el chico se vaya

De reojo miro a la chica encapuchada y sin que nadie se diera cuenta está dio un sutil movimiento de cabeza indicándole a Nami que el marinero que debía seducir era el que se encontraba a su lado. El merinero era medio calvo, un poco gordo, tenía barba y parecía ser muy estúpido.

Nami se levantó con una sonrisa ignorando al chico que la había invitado y se sentó a un lado del marinero que había escogido su amiga

—¿Te gusta el ron? —le pregunto coqueta

—Sí, claro, a todos les gusta ¿No? —respondió nervioso

—No se lo pregunto a cualquiera —la chica sonrió al escuchar la respuesta de su amiga

El cazador miro como nuevamente la niña había regresado pero esta vez con un plato de bolas de arroz 

—¿Qué es eso? —le pregunto serio

—Son bolas de arroz, para tí —la niña le extendió el plato

—¿Tú misma las hiciste? —la niña asintió con una sonrisa —¿qué es la cosa café? —le pregunto

—Chocolate, hace que todo sepa mejor

La madre de la niña la llamó logrando que ella se de vuelta pero sin querer choco con alguien haciendo que su comida se caiga al suelo

—Eres una mocosa estúpida, ¿qué haces? —la persona con la cual había chocado era un rubio de pelo largo, el cual se encontraba molesto

El chico piso una de sus bolas de arroz mientras la miraba enojado —¿Por qué no miras por donde vas? —le pregunto antes de acercarse a la barra

—Rika, ofrécele una disculpa —se escucho nuevamente la voz de la madre

—P-perdón l-lo siento señor —se disculpo tartamudeando mientras aguantaba más lágrimas

—Perdón, lo siento señor —repitió el rubio con burla —a la próxima no seré tan lindo

—Tiraste mi comida —el chico se agachó en el suelo y probó un poco de la bola de arroz pisada —delicioso —le dijo a la niña logrando que esta sonría feliz

Parecía que todos se habían callado solo para escuchar y ver lo que estaba a punto de pasar. El chico levantó el plato y lo apoyo en la barra mirando al rubio

—Ahora come una tú y discúlpate con ella —le dijo serio pero lo único que consiguió fue que el rubio se le ría en la cara

—¿No sabes quién soy? —dijo acercándose a él mientras paraba de reír

—Un marino de mierda con un espantoso corte —dijo luego de mirarlo de arriba a bajo

El rubio saco su espada enojado mientras el cazador se apoyó en la barra cerrando los ojos

—Yo no haría eso

—Ay por favor chico rudo, ¿tres espadas? —el marino se rió falsamente antes de ponerse serio —yo solo necesito una

El chico abrió los ojos con pesadez —bien, pero va a doler —le advirtió

El marino corrió para atacarlo pero fue bloqueado por el cazador, sin siquiera sacar la espada pudo tirar al piso al rubio. El marino se arrastró lloriqueando mientras gateaba para agarrar su espada.

Luego dos marinos más se metieron y otra vez sin necesidad de sacar su espada los dejo en el suelo, se terminó su vaso y golpeó a otro marino en el estómago. Justo en ese momento el rubio volvió a atacar pero el cazador lo esquivo logrando que su espada se quede autorizada en la barra, mientras el luchaba por sacarla el de pelo verde luchaba contra otro más.

Uno de los marinos que corrían para atacar al cazador tropezó con el banco de la encapuchada tirándola al piso, y sin importarle siguió corriendo hasta el cazador.

—Idiota —susurro enojada antes de ver como el cazador luchaba contra dos mientras el marino que la había tirado iba por atrás para atacarlo sin que él se diera cuenta

La chica suspiro antes de levantarse y agarrar su banco con el cual golpeó al marino mientras que el cazador terminaba con los dos que lo atacaba

—¿Qué haces? —le pregunto serio

—Cuidado de tu espalda, cazador —le dijo la chica antes de que tres marinos más llegarán y esta vez atacarán a los dos

—¿Nadie te dijo que no te metas en lo que no te incumbe? —le pregunto el de pelo negro mientras ambos pelaban contra los marinos con facilidad

—¿Nadie te enseño a dar las gracias? —le devolvió la pregunta antes de noquear a uno de ellos mientras el otro acababa con una mujer

Un poco más alejados de ellos Nami se encontraba quitándole el uniforme a un marino que noqueó.

Mientras que dos amigos se encontraban viéndolos, uno fascinado y otro preocupado. Ambos chicos se habían subido a una mesa mientras pelaban con todos los marinos que se acercaban para atacarlos

—Ten cuidado, cazador —le dijo la chica al sentir como el de pelo verde la pisaba

—Cállate —le dijo el chico antes de que ambos terminen noqueando al último marino

—Wow que impresionantes guerreros —dijo un chico con un sombrero de paja

El chico se acercó a el rubio que se encontraba contra la barra lloriqueando, lo agarro de la camisa y lo levanto como si nada

—No saques tu espada si no sabes usarla —le dijo en su oído

—No me mates por favor, mi papá te dará todo lo que pidas —le suplicó el rubio

—¿Quién es tu papá? —le pregunto la encapuchada

—El capitán Morgan —respondió —esta a cargo de la base de la marina

—Entonces me debe dinero —dijo mirando la bolsa con el pirata muerto

—Yo iré —avisó la encapuchada antes de tomar lo que quedaba de la botella del cazador —y se dice gracias —le dijo mirando al chico de cabello verde que la miraba serio