El Hilo Teñido de Venganza

Tom Prior

- Vamos Noah - me llama Lisa desde la puerta del apartamento.

Ya está completamente recuperada tras un día de descanso, aunque sigue llevando un parche en la zona de los puntos, que en unos pocos días habrá que volver al hospital para que se los quiten.

- Hoy no voy a ir a comisaría - le digo saliendo de mi habitación.

- ¿Tu investigación secreta? - me dice con una sonrisa.

- Exacto. Te dejo de responsable junto con Nico.

El mencionar al subinspector tiene el resultado de que al instante Lisa se ponga colorada. Me gusta ver sus curiosas reacciones.

- ¿Pasó algo en el hospital? - pregunto divertida.

Lisa abre los ojos y camina hacia mí enfadada.

- Todo fue tu culpa. No me avisaste de que se quedaría conmigo. No sabes la vergüenza que pasé. Pensaba que él eras tú y estuve hablando sin parar por tres minutos sobre nuestra casa, los costes de arreglarlo y el trabajo.

- Eso no tiene nada de malo.

- ¡Claro que lo tiene si te estoy diciendo que acaba de comprarme sujetadores nuevos y que esperaba que no los hubieran robado o roto!

Por unos segundos quedo muda pero al instante empiezo a reírme.

- ¡No te rías!

Empieza a pegarme pero yo no puedo parar de reír.

- ¿Eso se la has dicho a Nico?

- ¡Es tu culpa Noah! No quiero ir al trabajo.

- ¿Qué hiciste después de darte cuenta que era él?

- ¿Qué voy a hacer? Me escondí debajo de la manta y no volví a salir.

Vuelvo a reírme y Lisa me vuelve a pegar.

- Me voy - dice mientras me asesina con la mirada - Será mejor que no vengas en todo el día. Te mataré si lo haces.

- Fíjate bien a ver si vas a matar a Nico en vez de a mí.

Lisa me saca el dedo mientras se sube en el ascensor y me sigo riendo. Pero recuerdo algo por lo que corro hacia ella antes de que las puertas se cierren.

- ¡Lisa!

- Que susto.

- Vigila a Cairo.

- ¿Sigues sin fiarte de él?

- No me refiero a eso. Bueno también, pero obsérvalo de vez en cuando y luego me cuentas como ha estado.

- ¿A qué te refieres Noah?

- Tú dime si lo ves triste o enfermo.

-¿Estamos hablando del mismo Cairo?¿Estás preguntando tú por su estado?

Suelto las puertas del ascensor y me marcho. Me siento en el sofá mientras observo el papel con el número de teléfono de Tom Prior.

No me permito pensar mucho, en esta vida hay cosas que mientras más las piensas menos sentido tienen. Saco mi teléfono y marco el número.

Al tercer tono una voz me responde.

- ¿Quién me está llamando a este número?

- Buenos días señor Prior - digo con un tono de voz firme - Soy la inspectora Noah, de la unidad central de Delincuencia Especializada y Violenta. ¿Se acuerda de mí? 

Tarda unos segundos en responder que se me hacen eternos.

- Me acuerdo de usted. ¿A qué  se debe su llamada?