¡Omega Mío, hay que aparearnos!

17

Solo falta un mes para ese día, será un 3 de diciembre, un día antes de mi cumpleaños.

Ya todo esta listo para ese día, mi madre sigue furiosa por hacer eso a sus espaldas sin consultarle primero, la ironía, por otro lado cuando se lo conte a Dayeon ella me compro varias cosas que voy a necesitar y me dio muchos consejos.

Yoongi me regaló varios libros de su biblioteca privada me dijo: "Más vale que los cuides o voy a perseguirte en tus pesadillas", después se echo a llorar diciendo que era una mierda que todos los alfas tengan que pasar por esto.

Otra persona de la cual recibí mucho apoyo fue de Miyo, la mamá de Jungkook, ella como que me adoptó, es la persona que me acompaña para los exámenes previos para el SM y la que se encarga de asistir a las reuniones del instituto.

Yo realmente estoy muy agradecido con Dayeon, Yoongi y Miyo. Son un pilar muy fuerte que me sostiene ante la pérdida de mi mamá, yo realmente espero que en el futuro nuestra relación mejore, espero que la distancia ayude.

***

Una de las cosas que me pidió Miyo fue que se lo dijera a Jungkook  cuando faltarán pocos días, no estuve de acuerdo con esa idea pero ella insistió tanto que cedí.

Solo falta una semana y ya me dieron luz verde para decirle.

Me arrepiento de haberme enlistado cuando veo las lágrimas de Jungkook aparecer y quiero morir cuando se aferra a mi con un llanto fuerte me pide que no me vaya.

- Kookie, cariño deja de llorar- digo en un susurro cuando veo que su llanto no piensa cesar.

- No me dejes Jinnie - dice entre sollozos, aferrándose a mi

Siento a mi lobo aullar de tristeza, yo estoy igual de triste pero trato de tragarme las lágrimas de ver a mi niño todo lloroso y triste.

- Bebé, no me voy a ir para siempre - digo tratando de limpiar las lágrimas de sus ojos - Tú y yo estamos destinados lo olvidaste.

Eso parece calmar el llanto de Jungkook,  pero la tristeza no desaparece.

- Tengo regalos para ti - digo sonriendo mientras que con cuidado aparto a Jungkook para poder sacar dos cajas envueltas - ¿Cuál vas abrir primero?- digo con una sonrisa.

Jungkook me mira con un puchero en sus labios, no está interesado en los regalos pero a pesar de todo decide ceder escogiendo el más grande para abrirlo –Lo tomo de lo brazos para que se siente a mi costado. Abre el regalo con mucha delicadeza y cuando ve en el interior, frunce el seño de una manera adorable.

- ¿Un teléfono?

Me causa gracia que lo diga tan desanimado cuando muchos chicos de su edad mueren por tener un teléfono propio.

- Es uno de los mejores en el mercado - informó un tanto orgulloso, trabaje mucho para comprar ese teléfono- Además con ese teléfono podre llamarte, hacer video llamadas o simplemente enviar mensajes.

De pronto los ojos de Jungkook se llenan de emoción y felicidad pero la sonrisa que espero no aparece.

- Es bonito, gracias- dice en un susurro.

Me apresuró a poner en sus manos el otro regalo que le prepare, en una cajita más pequeña y simple. Me siento un tanto nervioso cuando la abre.

Sus ojitos examinan el pequeño anillo dorado que tiene unos pequeños diamantes rosados formando una flor. Cabe a mencionar que el anillo es de fantasía pero eso no le quita lo bonito que se ve.

- ¿Me estás pidiendo matrimonio? - Jungkook pregunta en una voz bajita casi tímida.

Sonrío de manera dulce al ver sus mejillas sonrojadas y como una pequeña sonrisa aparece. Mi lobo aúlla de gusto al ver que estamos alejando la tristeza.

- Sí, aunque tú ya me ganaste en eso, corazón- digo acusadoramente y él deja salir una risita divertida, eso hace que mi corazón se regocije de gusto. - Jeon Jungkook, ¿aceptas casarte con...

No puedo terminar cundo mi pequeño se me abalanza gritando pequeños si, saltando de emoción en el sillon , dejando besos por toda mi cara y riendo cuando le devuelvo los besos.

- ¡Sí! - vuelve a gritar dejando ver esa sonrisa por la cual e caído tantas veces.