smoker ; ym au !

34

Cuando los dos llegaron a la casa de Yoongi entre risas y charla, ingresaron inmediatamente a su habitación.

Jimin miró el alrededor y no se esperó que estuviera todo impecable y limpio, se imaginó que Yoongi quizá sería como esos chicos que suelen tener puro lío en su habitación.
—¿Limpiaste? —le preguntó Jiminie.

—Siempre limpio. —respondió Yoongi riéndose. —¿Tengo cara de ser un mugriento? —Jimin negó rápidamente y eso causa más risa en el mayor.

Después invitó al menor a sentarse en un pequeño escritorio en frente de su cama y se colocó al lado de él.

—Mira, esto es una tabaquera, acá armo yo mis propios puchos, si queres te enseño esto también. —le explicaba mientras Jimin seguía todos sus movimientos con ojitos grandes.

—Yo traje cigarrillos, Yoongi. —habló luego de unos segundos.

—Ah, pensé que te iba a tener que dar de los mios. —Jimin negó con una sonrisa. —¿Están en tu mochila? —Jimin le asintió.

Se acercó a la mochila rosa pastel del chico y la abrió, un papel salió por accidente pero no le dió tanta importancia ya que estaba todo arrugado y seguramente era basura asi que lo dejó en el piso, luego lo levantaría. Siguió inspeccionando el interior de la mochila pero no vió nada parecido a cigarrillos y volteó a mirar a Jimin en busca de ayuda. El menor rió y se acercó a él tomando ahora su propia mochila.

—Esto. —tomó una pequeña caja que decía "Hello Kitty" de metal y color morado y la abrió revelando unos cigarrillos de colilla rosada y un delicado encendedor del mismo color. Yoongi quiso morir de ternura.

Jimin miró avergonzado al chico y este se dió cuenta.
—¿Qué? —preguntó Yoongi.

—¿No vas a decir nada? —interrogó el menor con la cabeza agacha.

—¿Por tus cigarrillos? —Jimin asintió con un puchero, Yoongi rió de ternura, sus cachetitos eran realmente algo de otro mundo. —Por dios, no. Son sólo un par de cigarrillos, es más, se ven re caros, ¿cuánto te salieron, bebé?

Jimin perdió la vergüenza y sonrió sonrojado pellizcandole la mejilla a Yoongi. —Tontito, eso no se dice.

El mayor sacó la mano pequeña de Jimin de su cara y lo guió de nuevo a su escritorio haciendo que de nuevo se sentara, el quedándose parado a su lado.

—Bueno, ahora mirame. —ordenó, el menor le prestó atención.

Yoongi colocó un cigarrillo de los suyos en sus labios, y con la mirada clavada en los ojos brillantes de Jimin, agarró su encendedor color negro y lo prendió dando una larga pitada, y luego dejando salir el humo de nuevo por sus finos labios.

Jimin sintió su corazón acelerarse.

—¿Viste? Ahora hacelo vos.

Jimin pestañeó tres veces sin saber que hacer en realidad, había prestado tanta atención y admiración a la expresión de Yoongi que no vió realmente que había que realizar.

El mayor notó lo perdido que estaba y tomó un cigarrillo de la cajita del menor.
—Abrí la boca. — Jimin lo miró desde abajo abriendo levemente sus pomposos labios y su mente le jugó una muy mala pasada. Trató de tranquilizarse internamente y puso el objeto entre los labios del chico. Tomó el encendedor rosa y le dijo: —Cuando lo prenda tenes que inhalar, bebé, como aspirar con la boca, ¿me entendes? No tanto porque sino te ahogas, solo un mini segundo. —Jimin asintió sintiéndose listo.

Yoongi giró la piedra y el fuego salió rápidamente, Jimin trato de hacer lo que el mayor le había ordenado pero sintió una pequeña incomodidad en el pecho que hizo que tosiera. Yoongi atrapó antes de eso el cigarrillo para que no se quemara.

—Me ahogué. —dijo Jimin tosiendo, Yoongi rió.

—Pasa la primera vez. Intentalo de nuevo.

Jimin se acomodó de nuevo en la silla y miró a Yoongi esperando que este pusiera de nuevo el cigarro entre sus labios.

—Agarralo vos, mañoso. —le dijo Yoongi sonriendo y mostrando su mano donde todavía estaba entre dos dedos el cigarrillo de demostración que prendió la primera vez.

Jimin con un puchero y miedoso de quemarse trató de colocarlo también sobre sus deditos lograndolo fácilmente, sonriendole al mayor.

—Muy bien, bebé. Ahora de nuevo, dale, acordate de hacerlo despacio y no tanto tiempo.

Y con su mano, el chico puso el cigarrillo entre sus labios e inhaló un segundo sacándolo rápidamente, cuando sintió el humo atravesando su pecho incomodó pero no tosió, de alguna manera le gustó el sabor que su cigarrillo tenía y sopló el humo en la cara de Yoongi.

—¡Me salió! —gritó feliz y volvió a darle otra calada de nuevo tirando el humo en la cara de Yoongi.

El mayor rió y agitó su mano alejando el humo.

Ahora los dos fumaban, uno ya con experiencia, y el otro que lo hacía de una manera tonta pero muy tierna.

Luego de unos minutos, Jimin miró de nuevo a Yoongi.
—¿Yoongi?

—¿Mh?

—¿Me vas a pasar el humo por la boca?

Y Yoongi se ahogó.

El menor se sorprendió por su reacción y dió palmadas en su espalda preocupado.

—Pensé que no te ibas a acordar. —le dijo ya calmado.

Jimin rió. —Tontito... ¿Lo vas a hacer?

Yoongi pensó unos segundos, pero cuando miró hacía abajo y Jimin lo miraba mordiendose un labio simplemente no pudo negarse.
—Está bien. —suspiró.

—Wi~ ¿Que tengo que hacer? —le preguntó emocionado.

—Nada, vos quedate ahí. Dame tu pucho. —Jimin se lo pasó con cuidado.

Cuando lo tuvo en su mano se inclinó despacio hacía Jimin, el chico se sorprendió por su cercanía pero igual se quedó quieto.

—Cuando yo saque el humo de mi boca, vos lo tenes que atrapar con la tuya, ¿okey? —el menor asintió un poco nervioso.

El mayor le dió una pitada y se acercó al chico aún más quedando solo a un centímetro boca a boca, exhaló el humo y le sorprendió lo rápido que fue Jimin para atraparlo e inhalarlo también.

Se miraron unos segundos y Yoongi de nuevo imhaló el tabaco, pero esta vez dejó su cigarro en un cenicero y seguidamente agarró la mandíbula de Jimin, al hacer una leve presión, sus gorditos labios se volvieron una O y fue ahí que volvió a soplar, el menor gustoso y con el corazón a mil recibiendo todo ese humo.

Lo soltó y sus cachetes ardían en rojo, eso le causó ternura a Yoongi. Le dió de nuevo su cigarrillo al chico y tomó de nuevo el suyo.

Jimin sintió cosquillas en todo su estómago, nunca había estado así de cerca con un chico tan lindo como Yoongi, en realidad nunca había estado así de cerca con nadie.

—¿Estás bien? —le preguntó Yoongi mirándolo. Él solo asintió. —Mh... ¿Te gustó, mañoso?

Jimin sonrió ante el apodo, le gustaba que el mayor le pusiera diferentes apodos.
—Me gustó, Yoongi.

—Me alegro.

El menor se paró de su silla y se puso en frente del mayor que seguía apoyado en el escritorio fumando tranquilamente.
—¿Ahora te lo puedo pasar yo a vos?

Yoongi lo miró con las cejas levantadas y se carcajeó completamente rendido, no le podía decir que no a Jiminie.

Porque era su bebé.

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kmo andan las pibas!!!!yo para el orto pq esta vez si se m va la criatura al sm pero bno les quise actualizar igual espero q esto les saque x lo menos una sonrisita.

coso!!!les iba a decir q yo en este au no trato d romantizar nada ok??? se q fumar esta mal y blablabla pero bno esta es la trama d este au asiq no traten d funarme ni comenten boludeces solo pq UN PERSONAJE FICTICIO FUMA nada eso chao