poliamor (TÍTULO PROVISORIO)

✨ Capítulo único ✨

Fuyu demoró más de lo usual en darle el primer sorbo a su café. Por lo general siempre iba apurado porque se levantaba algo tarde, pero esta vez llevaba despierto desde más o menos las seis, cuando despertó en medio de un sueño húmedo, alertando a su novio Shiro, que como buena pareja que era, alivió su dolorosa erección y le folló en la pose del misionero, una que no solían adoptar en su actividad sexual pero la situación lo requirió.

A Shiro no se le escapaba que algo le estaba carcomiendo la cabeza. Probablemente hubiese soñado con algún fetiche extremo del que le avergonzaba hablar al respecto, pero tenían la suficiente confianza como para contarle sus fantasías al otro, aunque fuesen básicas y muy vainilla.

- Te encuentras bien, amor? Has estado muy callado y pensativo desde esta mañana.

- Ah, sí! Es que... Estoy algo preocupado.

- De qué?

Fuyu se sumió en su típico silencio sobreanalizador. Shiro había aprendido a hacerle hablar sin presionarlo. Los años de salir juntos y convivir le enseñaron a ser delicado con su novio, de modo que no se sintiera un bicho raro ni avergonzado por dar su opinión y expresar sus ideas.

- No es por algo o alguien, sino por... mí.

Al fin retomó la palabra luego de casi dos minutos.

- Y qué es lo que te preocupa, cielo?

Fuyu se tomó su tiempo para responder, inhalando y exhalando para darse valor. Shiro sabía que podía tratarse de algo que no le parecería tan grave a comparación de la mente vergonzosa de su novio, pero por respeto, como tantas otras veces, se aguantaría la risa.

- Tengo miedo de volverme un perderasta.

Su saliva por poco le atraganta. Se hubiera esperado cualquier confesión excepto algo como eso. Era muy grave, sí, pero no iba a juzgarlo antes de que se explicara.

- Eh? No te estoy entendiendo.

Fuyu tomó una bocanada de aire para darse valor y exhaló tan sonoramente que casi vuelca su café medio frío.

- Esta mañana, yo... me desperté muy excitado y tú me aliviaste, pero no te conté por qué me había puesto así. Yo... soñé...estaba soñando...que me tiraba a un estudiante.

- Oh.

Pensó que no era algo tan grave. Fuyu era bibliotecario en una escuela secundaria superior. Los estudiantes superaban los 15 años y algunos cumplían la mayoría de edad antes de graduarse. Tecnicamente lo de Fuyu era efebofilia, pero no iría a corregirle antes de que terminara de explicarse.

- No es que me sienta atraído por uno de ellos, sino que...hay un chico, que no forma parte de ningún club, que viene a la biblioteca todos los días a estudiar él solo. Es muy amable y siempre me sonríe, pero tiene ciertas actitudes que me han hecho pensar que trata de cortejarme.

Shiro asintió procesando la información, pensando, de nuevo, que no era algo tan grave.

- Como cuáles?

- Se inclina sobre mi escritorio y baja la voz cuando antes no lo hacía, y eso que en la biblioteca no se genera ningún eco. Me roza los dedos cuando intercambiamos un libro, se lo esté entregando yo o él, y...se me queda mirando como tú lo hacías cuando me coqueteabas en el bar.

Su novio sonrió nostálgico ante esa última mención. Fuyu era tan tímido en la época en que empezaron a salir que él tuvo que tomar la iniciativa para todo, desde invitarle tragos hasta su primera cita. Le llevó su tiempo, pero siguiendo el ritmo de Fuyu, acabaron siendo novios oficiales al cabo de ocho meses.