Capítulo 12

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Era de mañana , el sol entraba por ese ventanal enorme de la habitación.
Sin querer abrir sus ojos se tapó un poco con la manta y quiso girar su cuerpo pero sintió dolor.

Jimin se quejo tanto de la luz que entraba como del dolor en su parte trasera, recordó que después de unas cuantas rondas de sexo en la ducha, en la cocina y también en la habitación  habían asaltado la heladera y comido lo que encontraron y luego se habían dormido.

Cuando en la madrugada había tomado su celular,  noto que tenía un mensaje de Taemin diciendo que había salido de viaje esa misma tarde que salió de la empresa luego de despedirse de él.

Tambien que le había dejado un par de cosas en su departamento, lo cual Jimin no tenía ni idea que podría ser.

Pero al no estar Taemin y no tener que enfrentarlo ahora se propuso disfrutar de jungkook y aclarar todo lo que tuvieran que aclarar, solo quería saber cómo seguirían ahora.

Estiró lentamente su mano por la cama y abrió rápidamente los ojos al percatarse que el lugar se encontraba vacío.

Movió su cuerpo un poco, levanto su cabeza y giró en dirección al baño y allí encontro una enorme espalda musculosa Con pequeños arañazos.

Sonrió orgulloso al recordar que él era el autor de tal hazaña.

Ignorando el dolor que sentía en su trasero y con hambre de más, se levantó en silencio.

Mientras jungkook cepillaba sus dientes y enjuagaba su boca sintió unas pequeñas manos rodear su cintura y tocar su pecho, acariciándolo seductoramente con sus dedos..

-Haz notado lo que me hiciste? ..... preguntó el pelinegro mirándolo por el reflejo del espejo

-A tu espalda le hacía falta un par de marcas.....
Respondió juguetonamente jimin. - Y tú?... haz notado como me dejaste.? Siguió.

-Y te lo volveré ha hacer de nuevo..... dijo él pelinegro dándose vuelta y tomando a Jimin de su cintura, volteando a ambos  y subiendo al rubio en la pequeña mesada del baño.

Sin darle tiempo a decir nada presionó su cintura, tomo su cuello y  lo beso desesperadamente.

Alineando su miembro ya erecto a la entrada del rubio le sacó un fuerte gemido por la sorpresa.

-Ah..ah... ah... si kook.
Gemía el rubio tras recibir fuertes estocadas del pelinegro

Parecía que oír esos gemidos desataban la bestia que el pelinegro llevaba dentro.

Sentia como su miembro era apretado por el agujero del rubio aunque lo hubieran hecho toda la noche.

Ver marcas en la piel de su chico a través del reflejo del espejo lo hizo sentir orgulloso, quería dejar más, que todos vieran que Jimin era de él.

Mientras hundía su miembro en el menor bajo su boca al cuello donde siguió con su trabajo de dejar marcas.

Jimin sentía como era succionada su piel, movió su cabeza dandole más acceso al pelinegro y este gruño de puro placer.

Era una imagen digna de ver reflejada en el espejo, el rubio con sus piernas abiertas y flexionadas siendo sostenidas y apretadas con esas fuertes manos, el pelinegro en medio, penetrando a Jimin y besando cada parte de su piel.

Solo gemidos, jadeos, gruñidos y el ruido de sus pieles chocando se podían apreciar en las cuatro paredes de ese baño.

Luego de un par de estocadas más, el pelinegro tomo el miembro de Jimin sin dejar de moverse en su interior y masajeo al mismo ritmo produciendo mas gemidos, eso provocó que el  orgasmo de ambos explotara al mismo tiempo.

Entre besos y palabras llenas de  dulzura se dieron un baño preparados para pasar todo el día juntos.

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-Kook..... llamó el rubio girando su vista al pelinegro, era un hermoso atardecer, habían decidido salir al jardín, estaban sentados uno al lado del otro en los sillones que tenía el pelinegro.

Un brazo de jungkook rodeaba las caderas de Jimin mientras leía unos documentos con su mano libre.

El rubio había  terminado de dar pequeñas órdenes a su secretaria desde su celular.

-Debemos hablar.... dijo serio.

-Si mi amor, lo sé .... respondió con pura dulzura Jungkook, no importaba nada de lo que pasará alrededor, él sabía que nada ni nadie podría separarlos ahora, luchará contra todo si es necesario.

Jimin al notar el tono suave del pelinegro solo pudo sonreír, le resultaba más difícil decir las cosas ahora.

Obviamente quería estar con él, pero debía castigarlo un poco por el dolor que le hizo pasar al marcharse por tanto tiempo.

I'm come back- kookminWhere stories live. Discover now