Dos años y Hyun Sun continuaba siendo una sombra para Lee Jeno, aunque éste haya tratado de avanzar. Hay nuevas oportunidades para que no cometa el mismo error, pero cuando comienza a percatarse de los sentimientos de su nueva amiga, sus miedos e in...
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Renjun: ¿Dónde estás, Hayoon? Estoy afuera de tu departamento, pero no he recibido ninguna respuesta.
El chico ha fruncido levemente su entrecejo mientras veía la pantalla de su móvil, sin obtener ningún mensaje de regreso de la chica que desapareció de la noche a la mañana. Tampoco se presentó a la primera clase y tuvo que mentir por ella para justificar su inasistencia, aún cuando desconocía su falta.
Marcó su número, con la esperanza de que pudiera responderle, pero lo único que consiguió ha sido que lo enviará al buzón de voz. Apretó sus labios, un tanto preocupado por no obtener señales de Hayoon.
"¿Dónde carajos está?" se cuestionó en su cabeza a medida que giraba sobre sus talones, encontrándose de frente con Jaemin, quién estaba de pie en el umbral de su puerta, con una taza de café en mano mientras lo estaba viendo con atención, sin ninguna expresión en su rostro. Sí él estaba en su departamento, significaba que podría existir alguna posibilidad de que Hayoon estuviera con él, ¿No? De todos modos, era su vecino.
Jaemin le ha regalado una sonrisa a boca cerrada.
– No está. – Renjun volvió a apretar sus labios, sujetando con firmeza la correa de su mochila. ¿Por qué desapareció? ¡Podría haberle avisado! Así él no estaría buscándola con la intención de continuar con el trabajo. –, Salió temprano, pero no supe a dónde se dirigió, Renjun~ah.
– Ah. – Soltó con simpleza. –, ¿Podrías avisarle qué he venido para continuar con nuestro trabajo? No me gustaría tener que molestarme por su falta de interés. – Acotó en voz baja, causando que Jaemin alzará una de sus cejas al oírlo.
– ¿Qué es lo que te preocupa? – Inquirió con extrañeza. Renjun apretó sus labios, sin saber qué responder ante ello. ¿Qué carajos le diría? Su objetivo era únicamente ver a Hayoon, saber que no le había sucedido nada y así quitarse esa sensación amarga golpeando su pecho. –, Desconozco lo que pudo haberle pasado como para haber faltado a su clase, pero sé que no va a fallarte como compañera de trabajo, Renjun, así que no debes preocuparte, ¿Bien?
– Como sea. – Se encogió de hombros. –, Sólo avísale, ¿Sí?.
– Está bien. – Murmuró, observando a su amigo yéndose por el pasillo, dirigiéndose hacia el ascensor. Da un sorbo a su taza de café, sin entender la actitud del chico y sólo puede suspirar con fuerza antes de ingresar a su departamento, cerrando detrás suyo. Ha descansado su espalda en la puerta, recordando la expresión de Hayoon cuando la descubrió saliendo a primera hora del día.
Hayoon no estaba utilizando ninguna gota de maquillaje cuando salió de su hogar. Él sólo buscaba invitarla a tomar desayuno, pues la primera vez que se vieron, le comentó su falta de alimentación por ir atrasada a clases. No quería que aquello volviera a suceder, pero lo único que vislumbró fue un semblante agotado y triste, con sus ojos hinchados por lágrimas que debió haber expulsado toda una noche.
