Beomgyu sabía solo dos cosas del papá de su bebé, que se llamaba Taehyun y que era el alfa más caliente que un omega soltero de 21 años podría haberse cruzado en una noche de verano.
O dónde el omega de 24 años y su cachorro comienzan de cero en un...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
La casa de Beomgyu era un cuartel ahora, todo iba a parar allí al parecer.
Habían pasado un día espléndido en la playa, comieron, contaron anécdotas y algunos durmieron la siesta, estaban exhaustos cuando la noche llegó, tanto que pidieron comida y se fueron a la cama.
Yeonjun y Soobin partieron primero, el omega arrastraba los pies y el alfa parecía un león de tanto bostezar.
Beomgyu y Taehyun permanecieron en la cocina con un Kai que había dormido siesta y estaba con mucha energía, al igual que su fiel amigo Pelusa.
El alfa abrazaba al omega en el sillón y miraban la interacción de los en el suelo como si fuera una caricatura de la tele a la que no le puedes prestar tanta atención del sueño que tienes.
ㅡ ¿Cómo te sientes? ㅡ dijo Beomgyu, rompiendo el silencio cómodo.
Afianzó su agarre al rededor del cuerpo liviano del omega, su nariz corrió a sus rizos húmedos por el baño reciente.
Miel y flores, empalagosamente adictivo.
ㅡ Excelente, Beom, ¿tú? ㅡ pregunto, separándose de sus rizos.
Porque, aunque quisiera no tener que hacerlo, no podía respirar contra esa cascada de rizos.
El cielo lo había oído y esa noche su omega había decidido armarse los rulos, dejando un conjunto de rizos definidos en su cabeza que lo hacían parecer el corderito más bonito del mundo.
ㅡ Estoy bien, pero estabas callado y pensé que tal vez te pasaba algo ㅡ respondió, ronroneando contra su cuello.
Podía jurar que no había nadie más preocupado por los otros como Beomgyu, vivía preguntando a todos como estaban y si necesitaba algo. Taehyun, quien no acostumbraba tanto a esto, estaba intentando seguir sus pasos, al menos con él.
Su omega pasaba tanto tiempo preocupado por los demás, que casi ni se preocupaba por él mismo.
ㅡ Solo estoy disfrutando el momento, Beom, me gusta estar con ustedes así ㅡ explicó, buscando sus ojos.
Parpadeaba pesado, tenía sueño, tal vez era momento de acostar al señorito no me duermo nada y llevar a su omega a la cama.
ㅡ ¿Entonces no te aburres? Es que llevamos un tiempo callados y me gusta, pero no sé tú y... ㅡ tomó esa boquita y la silencio con un beso.
Ahí estaba, todo preocupado por él cuando la estaba pasando bien.
ㅡ No amor, me gusta estar así, aun si no hablamos, además se nota a leguas que estás cansado ㅡ recordó como si no fuera obvio.
Probablemente teniendo el mismo pensamiento que él hacía un momento, Beomgyu miró a Kai jugando a las carreritas con un confuso Pelusa que solo quería mordisquear su pantalón.
