Tu Felicidad (Libro 1)

Cap. 23

☄Alexandra☄

Le agradezco a Dios padre que no estoy recibiendo clases y poder disfrutar ver cómo se humillan mis compañeros por puntos.

Ya iniciaron con los ensayos de la gimnasia y los bailes folclóricos.

No no voy a participar, debo de asistir cuando se realize la actividad pero no voy a bailar; no me gusta participar; no por vergüenza si no por el gasto y también porque los maestros no se saben organizar.

Siempre convencen a los demás a participar por puntos extras pero como mis notas son exelentes a mi no me pueden chantajear.

Ahora están practicando el baile de los listones, veo a Victoria y Jorge en la fila de enfrente; mi mejor amiga se mueve como babosa en sal mientras Jorge parece un palo por lo tieso que son sus movimientos.

Carlos, Max, David, Ana y Elyan también están en el baile.

Observo como de mala ganan hacen los pasos de la correografia, algunos de los chicos de primer año se acercan a mi para hablarme y ver el espectáculo que montas mis amigos.

-¿Y tú no bailas Ale?- me pregunta uno de ellos

-Depende-

-¿Depende de qué?-

-De que tan grueso este el billete-

Se ríen ante mi respuesta; seguimos hablando sobre la danza y al pasar un tiempo dejan el ensayo para otro día.

La maestra llama a los que saldrán en la gimnasia y mis compañeros vienen a mi dirección para poder descansar.

-Que horror- se lamenta Max

-No lo haces tan mal- lo intento animar

-como lo va a hacer mal si tiene toda la cara de maya azteca, ese baile es de sus orígenes- se burla Mishell

Max le saca el dedo corazón, Elyan se sienta en el piso junto a mi y recuesta su cabeza en mi hombro.

-¿Por qué no sales? Me dejas solo humillandome-

-Yo solo por dinero me humillo- le recuerdo

Él rie entre dientes y levanta su rostro para dejar un suave beso en mi mejilla.

Nunca me han incomodado sus muestras de afectó, en realidad me siento muy cómoda cuando me da un pequeño beso en la mejilla o cuando me abraza por lo hombros pero la verdad es que ya no resisto; él no se da cuenta de lo que causa.

No he tenido el valor para volver a intentar decirle mis sentimientos o no encuentro el momento oportuno.

Pero debo de aceptar que tengo mucho miedo.

-Ahora vamos a ensayar la gimnasia - anuncia la maestra

Algunos de mis compañeras van a la cancha para ensayar mientras que otros nos quedamos a ver.

-Vamos por algo de tomar- me dice Elyan

Accedo y me levanto junto a él para ir a la cafetería.

-¿Qué te pareció la danza?-

-Si quieres mi opinión sincera pues se miraban horribles-

Pone sus ojos en blanco -gracias por tus ánimos - me recrimina

-Solo soy honesta, y la culpa de que se vea así es que ustedes bailan sin ganas-

-Es que no quiero salir-

-Pero como te faltan puntos ahí handas- me burló

El frunce el entrecejo y yo le pellizco el estómago, salta de la impresión mientras yo me río.