XXXVIII

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Lucas se encontraba subiendo los escalones de la entrada, cada paso que daba se quedaba sin aliento. Claro pues había corrido lo más rápido que pudo para llegar a tiempo.

- ¡Auch! ¡no puedo, Sabrina!

Cuando el pelinegro volteó hacia atrás, se quedó observando como su compañera intentaba subir las escaleras con unos tacones muy altos.

- Solo sube, Chloe.

- ¡Te dije que no puedo! -la rubia se agachó para sobarse los pies.

La voz chillona de Chloe taladraba los oídos del muchacho, una gran manera de iniciar el día.

- Hueles a perro.

Así nada más, Chloe soltó esas palabras al pasar al lado del chico.
Claro que esté iba oler a perro, en la mañana había ido a pasear a Noisette, la perrita de una señora que vivía en su vecindario.

Cómo Lucas era lo suficientemente maduro y había algo de inteligencia en su cabeza, solo paso de largo en ignoró a la muchacha.

A llegar a su salón sacó una de sus comidas favoritas, sándwich de queso. No pensaba esperar hasta el receso para comerlo.
Pero como llegó la maestra guardó su sándwich. El día pasó totalmente normal, a excepción de un suceso paranormal, diría Lucas.

El había guardado su sándwich de queso, el le pone 3 tipos de queso distintos, porque sabe genial, pero eso no es lo que importa. De la nada el vio como algo negro salió de su mochila, cuando revisó dentro de esta, ¡su sándwich ya no estaba!, Dios mio, que gran crimen.

Cuando interrogó a su Kwami para ver si había visto algo, este solo se vió un poco enojado pero le dijo que no importaba.

- ¿Tú no te comiste mi sandwich entonces? -susurró cuando entraron al baño.

- ¡Que no niño!, entiende.

- ¿Qué fue esa cosa negra voladora?

- No lo se, no vi.

Claro que había visto, porque sabía muy de quién se trataba. Plagg.

- ¿Qué haces aquí? vete -gruñó White al ver a Plagg entrar por la mochila.

- Huele muy bien este apetitoso sándwich -dijo mientras se sobaba la pancita.

- Vete con tu dueño -se cruzó de brazos y le dió la espalda.

Cometió un error, porque cuando dejó de ver, el gatito se llevó el sándwich.

- ¿De dónde sacaste eso Plagg? -Adrien dijo casi inaudible para que nadie del salón lo escuchara.

- Me lo regaló un amigo.

- ¿Qué, alguien te vió? -preguntó un poco alterado tratando de disimular para no llamar la atención.

- Tranquilo, fue un amigo kwami.

- ¿Qué, y está aquí? -la curiosidad empezaba a asomarse.

- Si... -Plagg se dió cuenta de que acababa de revelar que un kwami se encontraba en la escuela, por lo que su portador debería estar ahí mismo- digo, no, no.

- Entonces está en esta escuela ,o en este salón, dime, ¿quién era? ¿Ladybug, Moonlight?

- Perdón, pero no te puedo responder a esas preguntas amiguito.

- Solo dime, no va a pasar nada -intentó manipular a Plagg.

La curiosidad de Adrien cada vez crecía más, el se sentía un verdadero detective porque cada vez estaba más cerca de descubrir la identidad de su compañero. Tenía demasiadas sospechas y algunas pruebas, pero no estaba del todo convencido, tenía que hacer algo.

Moonlight (Chat Noir X Male Reader) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora