Capítulo 14

108 69 14
                                    

No sentía la muñeca de mi brazo por la fuerza acompañada del dolor

La residencia era privada, estaba un poco abandonada por lo que podía ver en el interior

-¿Que le sucede?, ¿porque está haciendo esto?. -El gemido de mi angustia abarcada en todo mi ser, la opresión en el pecho agitaba mi respiración, mi rostro mojado por las lagrimas, estaba sintiendo la sangre correr por todo mi cuerpo

Subimos la enorme y larga escalera ovalada, se dirige a una puerta marrón mientras me agarra apretando mis manos, con sus pies patea la puerta y está abre

Una habitación que no tenía nada, apenas había un colchón tirado, me lleva a él lanzándome como si me aborreciera, emití sonido de dolor a mi cabeza haberse golpeado un poco, chocando con aquella pared, la muñeca de mi brazo estaba morada por la coacción de este hacía mi

Mi corazón se acelera más lo que me hace reaccionar echándome hacia atrás, pegando mi espalda de aquella pared, quedando inmóvil por aquella arma que este hombre apuntaba hacia mi

Quería salir huyendo de ahí

-De aquí no te moverás. -Su voz amenazante hablaba a mi oído.

La ansiedad abrazaba mi cuerpo, mi pulso aceleró, el sudor bajaba por mi frente sintiéndome enrojecida, sentía escalofríos, el pánico me consumía, los pensamientos destructivos arropaba mi mente.

La voz no me salía, este hombre parecía un demente, Cerró la puerta, detrás de aquella puerta vino el sonido de un móvil, me espanto, acerque mi cuerpo a esta, para ver si escuchaba algo

-Si patrón está aquí... esperare a que usted venga, no me moveré de aquí.

Escuchar eso me hizo pensar que alguien mas vendría por mi, los sentimientos de pavor era mucho, no sabía que me iban hacer, por cuánto tiempo estaré aquí, en situaciones cómo está solo pensaba en morirme, con qué propósito nací, con el único de salir herida por cada paso que doy.

La pelvis me dolía más de lo normal, había hecho mucho desarreglos, estar aquí era uno de ellos, sentía mareos, dolor en mi cabeza, mis ojos ardían, no me e alimentado bien, mis fuerzas se están agotando, tener la regla no ayudaba.

Pasan unos minutos y La puerta se abre otra vez, del pavor me hecho hacia atrás, temblando fui mirando desde abajo lentamente alzando la mirada.

La negación de estar en aquel lugar con lo que veía era relevante, estaba pálida, confundida haciéndome todas las preguntas posibles para entender cómo volví a estar en mano de semejante monstruo

-Creíste que no me vengaría, aquí estoy, nuevamente se repite, te enseñaré a no meterte conmigo, maldita perra... Por ti tengo marcas que cada vez que las veo pienso en solo matarte. -Ríe burlonamente. -Pero tranquila que no te voy a matar.

-¿Que haces?, suéltame hijo de putaa. Intentaba demostrarle que no le temía.

De repente un puñetazo vino hacia mi rostro haciendo que de mi boca saliera sangre, no sentía la cabeza, mis lagrimas eran como una fuente que no cesaba, agarro mis manos y las amarró fuerte, también mis piernas, mi cuerpo se rompía, el dolor era inaguantable, tomó mi mandíbula con autoridad. 

-Abre la boca estúpida. -Me negaba, mientras el que me trajo aquí me golpeaba las piernas fuerte con un palo para que obedeciera, abrí la boca haciéndome beber de aquel líquido.

(...)

Gregory

-Al fin la perra está inconsciente, tenemos 12 horas para que despierte, así que aprovechar el tiempo.

Un Sentimiento Encontrado Hacia Un Pasado OscuroOnde histórias criam vida. Descubra agora