Star.

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- Bueno bebé, primero que nada... tenemos que buscar un lugar dónde vivir, o al menos para esperar a que amanezca... pero está difícil ya que es de madrugada ya - El Omega decidió después de haber terminado de llorar y tomar a su bebé, que no podía quedarse esperando a que una solución le cayera del cielo, lo único que caería del cielo sería agua otra vez -

Le gustaba hablar con su bebé que nunca le respondía, al menos no como a el Omega le gustaría, pero aún así lo hacía porque de alguna manera estaba seguro de que lo entendía.

- Pero estamos juntos, seremos valientes y podremos con todo ¿Verdad? - El Omega se detuvo y sostuvo a su bebé de frente mientras le sonreía. El bebé solo soltó una risita escandalosa agitando sus bracitos y piernitas para acercarse al cuello de su mami donde enrolló sus brazos y balbuceando cosas que solo el mismo entendía al igual que sus repentinas risitas _

- Tomaré eso como un "Si, mamá" - El Omega desvió la atención que le daba a su bebé cuando un sonido lo hizo colocarse alerta, pareció haber sido un golpe -

- ¡Basta! ¿Que necesito para que me dejes en paz? -

- ¡Sabes perfectamente que es lo que quiero! -

- ¡Te he dicho millones de veces que no volveré contigo! -

El Omega sintió nervios, en el callejón que había del otro lado de la calle dos personas discutían, un Alfa y una Omega por lo que entendió y percibió de los fuertes aromas de ambos.

- ¡NO PERMITIRÉ QUE ME DEJES COMO A UN IMBÉCIL! -

- Corrección, te dejé como a un imbécil, ¡imbécil! -

El Omega desde dónde estaba veía toda la escena con claridad y de cierta forma admiraba la valentia con la que la Omega le hablaba al Alfa que la tenía aprisionada en el callejón, y mientras su pequeño estaba más pendiente de jugar con el cabello sobre una de las orejas de su mamá que de lo que había a su alrededor.

- ¡Serás mía! De nadie más! Entiende! - El Omega abrió más sus ojos cuando el Alfa tomó bruscamente a la Omega del cabello y tiró de este hacia atrás dejando expuesto su cuello -

- ¡Ah! ¡Maldito desquiciado! ¡Suéltame! ¡Ah! -

- Te marcaré aquí, me vas a satisfacer como la perra que eres - El Alfa comenzó a lamer y a besar el cuello de la Omega que no había parado de forcejear para liberarse -

- Si tan perra te parezco entonces suéltame y búscate a otra -

- ¿Que parte de que 'eres mi perra' no has entendido? -

Escuchar esa frase hizo que al Omega se le vinieran una serie de recuerdos, como un Deja Vu.

- ¡SUÉLTAME MALDITO! - La Omega estaba empezando a sentir mucha tensión al sentir al Alfa centrarse en una única parte de su cuello - ¡NO LO HAGAS! -

- Serás mía para siempre Son - El Alfa alcanzó a susurrar contra el cuello de la Omega provocándole un escalofrío que recorrió toda su espina dorsal -

Y sin siquiera esperarlo, un golpe seco se escuchó y como peso muerto el cuerpo del Alfa calló a un lado de la Omega que no tenía idea de lo que había sucedido.

La Omega levantó la mirada del Alfa inconsciente y se encontró con un pequeño chico que sostenía un palo de madera mirando en shock el cuerpo en el piso.

No le importaba quien era, mi porque lo hizo pero lo único que se le ocurrió a la Omega fue abrazar al pequeño chico que se quedó paralizado sin saber cómo responder.

La Omega con los ojos húmedos miró al Omega separándose de él y quitándole el palo de la mano tirándolo a un lado, el Omega la miró y luego nuevamente al Alfa en el piso con terror en sus ojos.

Rain to be.   ♡   Showki. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora