UN ADOLESCENTE EN CASA

293 33 11
                                    

Narrador/ra:

Los días pasaron, los meses, los años, los oficiales aquel día no encontraron nada para incriminar a Rius, pero le advirtieron que no volviera a hacer eso a espalda de los padres de los pequeños, quienes tuvieron que volver a casa con aquella mujer y su padre, el infierno volvió para ambos, los oficiales le advirtieron a los padres que si seguían drogándose les quitarían a sus hijos, por lo que tuvieron que ir a rehabilitación, cuando salieron de aquello, Victor y Sparta volvieron a casa con ellos, Victor ya era todo un señorito, un joven apuesto de 15 años, era bastante protector cuando se trataba de Sparta, quien solo tenía los 9 años y medio.

Victor se hacía cargo de su hermanito, le daba de comer, lavaba la ropa de ambos, le ayudaba con su tarea, en pocas palabras el joven apuesto tuvo que madurar mucho antes de tiempo por culpa de sus padres, y se hizo cargo de su hermano como si de su hijo se tratase, aquella mujer se había adueñado de todo, Victor se encontraba en la cocina haciendo algo de comer para el y su hermano.

??: que cocinas? -entra a la cocina-

Victor: la comida.. -serio-

??: que bueno, me muero me hambre y no tengo ganas de cocinar

Victor: que lastima, seguirás con hambre porque esto no es para ti..

??: disculpa?

Victor: esto es para Sparta y para mí, si quieres comer, o pides a domicilio, o cocinas, pero no me vas a poner a hacerte de comer, escuchaste? -serio-

??: -rie levemente- como se nota que ya te llegó la adolescencia, querido, no es que quieras o no, o cocinas para todos en esta casa, o te castigo

Victor: no eres mi madre, lárgate antes de que te ponga el sartén hirviendo en la cara! -molesto-

??: tch.. -se va-

Victor: que molesta.. -serio-

Sparta: Victor, me ayudas con mi tarea..?

Victor: claro Sparta -sonríe- solo deja terminar de hacer el almuerzo y nos vamos a tu cuarto jeje -desordena su cabello-

Sparta: mh.. no me toques el cabello! -hace puchero-

Victor: -riendo-

Cuando el joven castaño termino de cocinar, sirvió la comida en dos platos para luego irse los dos a la habitación del castaño menor, el chico cerro la puerta con seguro, mientras esa mujer estuviera en casa, el lugar no era seguro para ninguno.

Victor: muy bien, dime en qué necesitas ayuda, Sparta

Sparta: no le entiendo al tema de dividir..

El castaño mayor estuvo todo el día con su hermanito, ayudándolo en su tarea mientras jugaban y se divertían, cuando terminaron salió del cuarto y se dirigió a la sala, viendo a su padre quien estaba viendo televisión.

Victor: papá..

Timba: que pasa, Victor, no vez que estoy viendo la televisión?

Victor: ya no hay comida, Sparta y yo tenemos hambre.. -serio- tu esposa se comió todo, es una tragona..

Timba: deja de decirle así a tu madre, Victor!!  -lo mira molesto- no voy a permitir esa falta de respeto en esta casa, me escuchaste?!, es tu madre, debes tratarla como tal, si ella te dice que hagas algo, lo haces, entendiste?!

Victor: porque debería hacerlo?, no es como si me haya criado de la mejor manera, todo era perfecto hasta que ella llegó, tu eras perfecto, eras el mejor padre hasta que ella llegó a esta casa, llegó ella y arruino todo!!

Timba: Victor, deja de gritarme, soy tu padre!!

Victor: y que?!, no te has comportado como tal, estoy harto de tener que callarme y escuchar sus quejas, porque yo no puedo quejarme, eh?!

Timba: Victor, no me hagas castigarte!!

Victor: uhg!! -se va a su habitación-

Narra Victor:

En lugar de irme a mi cuarto, fui al de Sparta y tome su mochila, comenzando a sacar algunas cosas de su armario.

Sparta: -lo mira- hermano?, que es lo que haces con mi mochila..?

Victor: nos vamos, Sparta.. -serio-

Sparta: que?!, a dónde?! -nervioso- no tenemos a dónde ir, hermano!

Victor: -lo mira y se acerca a él- recuerdas al tío Rius?, podemos ir con el..

Sparta: no es verdad hermano, la policía dijo que tenía una orden de alejamiento, si nos acercamos o el se acerca a nosotros irá a la cárcel, no lo hagas! -nervioso-

Victor: es el único lugar al que podemos ir, Sparta, confía en mi, si?, estaremos bien, lo prometo.. -lo abraza-

Sparta: -solloza- tengo miedo, no lo hagas por favor, hermano, le haremos daño al tío Rius y papá se enojara mucho si vamos con el..

Victor: a papá ya no le importamos, solo le importa esa loca, así que le daré una simple y sencilla lección, ella o nosotros..

Sparta: hermano, estás loco, no lo hagas..

Victor: ... -suspira y lo abraza, comenzando a llorar-

Sparta: Victor.. -lo abraza-

Victor: todo era perfecto, todo iba bien..! -llorando- solo llegó esa tipa y lo arruino todo, papá no era así, no nos ponía una sola mano encima, éramos felices los tres!! -llora más-

Sparta: tienes mucho estrés, hermano..

Victor: estoy cansado.. porque no solo debo cargar con mis estudios y mi vida social, sino que también debo cuidar de ti, el aseo que llevas, y todo el aseo de la casa solo porque esa tipa no mueve un solo dedo, estoy tan cansado, Sparta..!!, ya no puedo más!, Acenix y yo terminamos porque me dijo que no le daba suficiente atención, estoy desesperado! -llorando-

Sparta: Vic.. -preocupado, se aferra a el- ya no llores, estoy aquí contigo, hermanito.. solo eres un niño como yo, papá es cruel contigo por dejar que todo eso pase frente a sus ojos..

Narrador/ra:

Mientras que los niños se desahogaban entre ellos y entre lágrimas, no se daban cuenta de que su padre escuchaba todo desde la puerta, pues había ido a ver a Víctor y reclamarle solo lo que había dicho para que se disculpara, pero ahora se sentía mal, el escuchar el sufrimiento de quieres eran su sangre, escuchar a sus hijos llorar a escondidas por miedo a que el los castigue, fue suficiente para que su corazón se quebrara, y comenzó a pensar que estaba haciendo un mal, que quizá alejarlos de quién fue su amigo en algún tiempo, no fue la mejor decisión de su vida.

Pensó que les estaba haciendo un bien, pero al descubrir que lloraban y se aliviaban entre ellos, callando frente a el para no levantar sospechas, el escuchar a Víctor diciendo que estaba cansado de todo, comenzó a pensar, pensar que todo estaba mal, que esa familia estaba rota, recordando cuántas veces les dió la espalda a ambos por su mera comodidad, se sintió un mal padre y se retiró de ahí de inmediato, no quiso seguir escuchando a sus hijos sufriendo.

ℕ𝕒𝕕𝕚𝕖 𝕝𝕠𝕤 𝕢𝕦𝕖𝕣𝕣𝕒́ 𝕔𝕠𝕞𝕠 𝕝𝕠 𝕙𝕚𝕔𝕖 𝕪𝕠 [𝑅𝑖𝑢𝑚𝑏𝑎]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora