ETERNO AMOR DE MARZO

Capítulo 16

- ¡Oye, Abella. Te estoy hablando, carajo! .- exclamó, Abigail, mientras mantenía una expresión enervante en su rostro. - La observé rápidamente llevándome un sobresalto por su quejido y dejando de un lado el teléfono.

Estaba atentamente al móvil, mientras mis dedos se movían con presteza apretando las teclas con frenesí. - El sonido del mismo resonaba. - Sin embargo, mis gestos decían mucho al respecto. - Desde luego te aviso que, tienes cara de una tonta enamorada. - Ignoré completamente todo lo que mi subconsciencia trataba de decirme. Aunque... a lo mejor, y tenía razón. - " Toda una loca adolescente atortolada" .- Reí por mi pensar.

- ¡Dios! .- exclamó. - Nicolás, te tiene babeando por él. Pero ni a mi, te dignas en contestarme los textos de esa manera. - dijo con un tono molesto cruzándose de brazos. - Algo exagerado de su parte. - Reí y rodeé mi vista.

- Ya, Abby. Me sorprende que lo digas, porque no es así, eh. - dije cuestionablemente levantando una de mis cejas. - Ahora la que tomaba su misma postura era yo. - Nos quedamos viendo por un momento y comenzamos a reír por dicha escena.

- Ya, ya está bien. Ahora ayúdame a elegir el atuendo perfecto para esta noche.- espetó. - Al parecer, no era la única que mantenía citas con el chico que le gustaba, Abigail, también tendría la suya hoy. Y ese joven, se hace llamar "Joshua". - Desde luego se le notaba nerviosa. Aunque, no veo porque estarlo, cuando ya habían compartido en cuerpo y alma. - Reí por mis adentros.

Abigail, tenía tres prendas en mente. Eran dos vestidos y un mono. - Me gustaban ambos, aunque para mi gusto terminaría usando el atuendo estilo "jumpsuit" color negro. Era muy bonito y quedaba perfecto en la figura de mi mejor amiga. - Le mencioné que debía usar ese. Pero, no la vi muy convencida respecto a mi punto de vista.

- Así que, estás segura, qué debería llevar puesto éste? .- dijo mientras observaba su silueta en el espejo que yacía en la habitación. - Para ser honesta, se veía hermosa en aquel atuendo. Era un mono de tirantes, dejaba al descubierto la parte frontal y parte del respaldar. La textura de la tela era satinada, le daba un toque bastante magnético y elegante al traje. - Asentí con mi cabeza en forma de aprobación.

Se dio la vuelta en dirección hacia mi persona, y me regaló una de sus mejores sonrisas. - Nuevamente evaluó la prenda que traía puesta y volvió a sonreír, esta vez de manera invicta. - Segura de sí misma, se acercó con grandes pasos y me abrazó con mucha emoción.

- ¡Aah! Gracias, cariño, no sé qué haría sin ti.. .- espetó, formando un puchero en sus labios. - Y esas fueron sus últimas palabras antes de meterse a duchar. - Me dio un beso en la mejilla y caminó en dirección al tocador.

Realmente, Abby, era hermosa. Espero y el cascarrabias de Joshua, no vaya estropearlo. Sino se las verá conmigo personalmente. Ella, ya había tenido suficiente estando en una relación que, al final, me pareció absurda la razón de la ruptura. - ¿Trabajo? ¿De verdad?. - Desde luego, sé que Gilbert tenía un horario complicado, pero perfectamente pudo dedicarle tiempo a mi amiga.

Considero que, si vas a estar en una relación y ambas partes se dicen querer mutuamente, éstas van a buscar solución al problema, y no darlo todo por perdido. A veces es cosa de comunicarse en pareja y organizar un espacio donde exista un momento para compartir en la intimidad. - Y cuando hablo de "intimidad" no me refiero a lo sexual, claro, es importante pero, el hablar cómodamente con tu pareja, desde luego ya están formando parte de ella.

Si vas a estar con una persona, ahí estarás. Y sino, no lo estás y ya.

Volteé en dirección a la puerta del baño.- fruncí el ceño. - Una voz singular tarareaba desde el tocador. Abigail, al parecer estaba cantando bajo la ducha. - Reí por lo bajo, mientras escuchaba su empeño por entonar la melodía. - Mala idea. - Aunque le daría un reconocimiento por el intento. - Una sonrisa sagaz se dibujó en mis labios.