La familia Black

le dieron que!

pov. de Llamylet

La señora Pomfrey insistió en que Harry se quedara en la enfermería el fin de semana. El se quejo todo el tiempo y no le permitió que tirara los restos de la Nimbus 2.000. Sabía que era una tontería y que la Nimbus no podía repararse, pero Harry no podía evitarlo. Era como perder a uno de sus mejores amigos. El equipo de Gryffindor volvió a visitarlo el domingo por la mañana, esta vez con Wood, que aseguró a Harry con voz de ultratumba que no lo culpaba en absoluto. Ron, Hermione y yo no nos ibamos hasta que llegaba la noche. Pero nada de cuanto dijeramos o hicieramos nadie podía aliviar a Harry, porque los demás sólo conocían la mitad de lo que le preocupaba.

- Bueno nos vamos te quedas Llamylet - me pregunto Hermione

- si tengo que decirle algo voy rapido - les digo y ellos se van - me lo vas a decir o no - el me mira asombrado

- como- señalo su mente -  si vi al grim pero no se lo digas a los chicos

- James James como demonios le voy a decir si no se que hablas - le dije y el sonrio - Bueno ya que eso esta fuera quiero que des una sonrisa y que seas feliz decuardo que ames la vida aun que no te aya traído Buenos momentos de acuerdo - el asiente -Bueno me voy adiós - me levanto y me voy

Fue un alivio regresar el lunes al bullicio del colegio, donde estaba obligada a pensar en otras cosas, aunque tuviera que soportar las burlas de Draco Malfoy. si mi primo que no se sabe callar es tan tierno no creen

Malfoy no cabía en sí de gozo por la derrota de Gryffindor. Por fin se había quitado las vendas y lo había

celebrado parodiando la caída de Harry. La mayor parte de la siguiente clase de Pociones la pasó Malfoy imitando por toda la mazmorra a los dementores. Llegó un momento en que Ron no pudo soportarlo más y le arrojó un corazón de cocodrilo grande y viscoso. Le dio en la cara y consiguió que Snape le quitara cincuenta puntos a Gryffindor. y yo me le riera a mi primo y lo imitaba su caída

- es que su cara es que viste como se ajajajajajajajaja- yo solo me burlaba y Ron estaba rojo al igual que su pelo

-Si Snape vuelve a dar la clase de Defensa Contra las Artes Oscuras, me pondré enfermo -explicó Ron, mientras se dirigían al aula de Lupin, tras el almuerzo-. Mira a ver quién está, Llamylet y Hermione. Hermione y yo nos asomamos al aula.

- si mi tio esta allí sip- gritaba y saltaba de la emocion

-¡Estupendo!

El tio Lupin había vuelto al aula. Ciertamente, tenía aspecto de convaleciente. Las togas de siempre le quedaban grandes y tenía ojeras. Y con mas moretones. Sin embargo, sonrió a los alumnos mientras se sentaban, y ellos prorrumpieron inmediatamente en quejas sobre el comportamiento de Snape durante la enfermedad de Lupin.

-No es justo. Sólo estaba haciendo una sustitución ¿Por qué tenía que mandarnos trabajo?

-No sabemos nada sobre los hombres lobo...

-¡... dos pergaminos

-¿Le dijisteis al profesor Snape que todavía no habíamos llegado ahí? -preguntó el el tio Lupin, frunciendo un poco el entrecejo. Volvió a producirse un barullo.

-Si, pero dijo que íbamos muy atrasados...

-... no nos escuchó...

-¡... dos pergaminos! tio LUPIN DOSSSSSSSS - le repeti a lo de Ron

El profesor Lupin sonrió ante la indignación que se dibujaba en todas las caras.

-No os preocupéis. Hablaré con el profesor Snape. No tendréis que hacer el trabajo.