extra 5: FINAL

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Gojo no había podido dormir.
El mensaje que le había mandado su madre lo había dejado alerta y muy nervioso. Si, era verdad que sus padres estaban en proceso de divorcio (lo cual internamente lo hizo feliz), pero eso no quitaba el hecho de que "la bruja" seguía siendo su madre.

Geto había notado este cambió de humor repentino al la primera hora en la que ambos estuvieron despiertos, la hora del desayuno había llegado y se sorprendieron al ver a sus hijos en la sala avisando que ya habían desayunado.
Nanako estaba con su short de pijama sobre el sillón y mimiko estaba en el suelo con su pijama suave.

Gojo sonrió inconscientemente con la mirada perdida en su plato de desayuno; aún recordaba los momentos donde sus hijos entraban corriendo en los días donde gojo se quedaba en la casa de geto mientras pedían el desayuno porque la estufa era muy alta para el trío de niños regordetes.

-¿Algo bueno pasó cariño?- la voz de la persona que más amaba en el mundo sobre el silencio que lo atormentaba.

-solo pensaba en los niños... No me di cuenta de cuando crecieron tan rápido...

Geto sonrió débilmente, acomodó su cuchara sobre su plato y recargó su rostro sobre una de sus manos para ver a su futuro esposo.

- ¿Que sucede? Te ves... Raro

El cuerpo de gojo se estremeció al oírlo, lo menos que quería era preocuparlo.

Justo cuando abrió su boca par hablar un sonido de dolor de parte de sus hijas en la sala los alteró.

Ambos abrieron sus ojos y corrieron a la sala sin importarles su desayuno.

Al llegar allí vieron a nanako sobarse parte de sus piernas descubiertas con un color rojizo intenso mientras mimiko la veía preocupada y megumi con shock en su rostro.
La madre de gojo veía con desprecio a nanako mientras sobaba su mano rojiza.

-¡¿QUE TE PASÁ?!- Le preguntó gojo con enojo a su madre, era obvio que ella había golpeado a su amada hija.

-¿Para esto dejaste la casa? ¿Para educar
una niña irrespetuosa?¡ Las mujeres no deben enseñar las piernas y menos con tres hombres en la casa!

En todo momento geto estaba al lado de su hija que se sobaba la zona con dolor, jamás le había pegado a sus hijas, jamás ¿Entonces que derecho le daba a ella a hacer eso? Ya no era completamente familia de satoru gracias a su divorcio¿No era así?

-si algún día alguien le hace algo a ella será su culpa por ser tan libre, que asco que decidieras juntarte con una familia de inadaptados que lo único que hacen es dar pena agen- sin dejarla terminar, geto acababa de abofetear a la madre de su esposo.

-ya veo porque el señor gojo quería divorciarse con usted...- le dijo geto a la señora que estaba en shock ante la situación - hijos suban a sus habitaciones ahora mismo y no bajen hasta que les hable- en todo momento geto miraba desafiante a la mayor sin prestarle atencion a gojo, solo podía apretar sus manos con fuerza para evitar golpear más a la mayor.

-pero pap--la voz de megumi se quedó callada cuando geto lo miró con molestia, estaba realmente enojado.

-dije que fueran a sus habitaciones - trato de que su voz sonara lo más tranquilo posible pero su ceño fruncido junto al enojo de su voz no ayudaba en nada.

Nanako, mimiko y megumi se vieron entre si con sorpresa ya que era raro que geto se enojara con ellos o les hablará de esa manera. Los tres corrieron a sus habitaciones para no hacer que su padre se enojara más.

-¡¿Estás loca?! ¡¿Cómo te atreves a pegarle a mi hija?! - comenzo a reprochar gojo mientras geto cruzaba sus brazos para contenerse y golpearla con su puño.

ES A BASE DE NIÑOS [AU SATOSUGU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora