𝐀𝐧𝐠𝐞𝐥𝐬 𝐥𝐢𝐤𝐞 𝐲𝐨𝐮 [3° 𝐭𝐞𝐦𝐩𝐨𝐫𝐚𝐝𝐚]©

PRÓLOGO

Queridos lectores, se preguntarán qué ha pasado en todo este tiempo de espera, tortura, magia,maleficios.

Durante dieciséis años he estado en un mundo lleno de oscuridad,avaricia,soberbia, encerrada junto a la criatura más sádica de todos los tiempos.

Nick, mi hermano mayor o eso es lo que me hizo creer Luke, mi padre.

Nick no era más que un monstruo, un animal, que a pesar de haber estado durante dieciocho años allí encerrado, todavía quería su venganza.

Durante los años encerrada en Southside traté de controlarlo,buscar una salida, pero lo que estaba claro es que eso no existía, no en ese lugar.

La torre no es que fuese muy amplía, pero era suficiente cómo para que se sintiera como en una cárcel de pladur.

Por otro lado, mi aspecto cambió.

Ya no era la niña de dieciocho años que conocía.

Me había vuelto mucho más fuerte, mis poderes se habían desarrollado más de la cuenta,hasta el punto de poder llegar a destruir al que se hacía llamar mi hermano.

Pero por cada ataque, por cada hora que pasaba, él se volvía mucho más fuerte.

Nick era cómo una réplica de Luke, sí es que no era él encarnado en Nick.

Echaba de menos mi vida, a mis primos, hacerles bromas y que me las devolvieran, echaba de menos sentirme una Winchester, aunque en realidad fuese una Harris.

Durante los dieciséis años que llevó encerrada aquí anhelaba todo aquello que había dejado atrás,pero había una cosa que añoraba más que nada.

Corbyn.

Cada día pensaba en él, en cómo sería nuestra vida si jamás lo hubiese abandonado en aquel castillo, aquel día en el que cruce el portal pensando que podría cerrarlo y que resultó que no pude porque Nick tomó el control de todo aquello.

Justo un año más tarde presentí su muerte, trate de arreglar algo a través de mis sueños, pero sólo lo empeore, pues lo mande al infierno al arrebatarle aquello que tanto quería.

Su alma.

Sí algo había heredado de Luke fue la posibilidad de hacer viajes trascendentales a través del tiempo, es por ello que conseguí mandarlo a un lugar donde estuviera junto a las dos personas que serían cómo sus ángeles de la guarda.

En la habitación que me asignó Nick tras llegar allí, se encontraba un espejo, recordando que los espejos sirven cómo portales y que a las 3:00 a.m. Estos se abren, pudiendo teletransportar a otras dimensiones.

Esa fue la manera del cómo conseguí escapar de ese mundo tan oscuro tras dieciséis malditos y largos años, llegando a Dallas (Texas).

En una ocasión escuche en sueños el paradero de la familia de Corbyn, así que no dude en ir a su encuentro.