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- Que cara, parece que alguien no cogió anoche - se burló el rubio.
- Cállate, Rosberg. Estuve de guardia anoche.
El alemán hizo una mueca de disgusto.
- Ahora soy "Rosberg" - hizo comillas con sus dedos - Y no Nico. Bien, dime qué pasa.
Lewis rodó los ojos - No sé de qué hablas.
- Ajá, entonces, ¿cuál es tu problema?
El mayor se recargo en la pared; suspirando.
- Sergio, Sergio es el problema.
- Uy me parece que hay problemas en el paraíso.
Lewis le miró con fastidio.
Hace mucho tiempo que había dejado de ser un paraíso.
- Sabes que no es un paraíso, y fue una simple pelea. Ya sabes el mismo tema de siempre.
- ¿Sigue aferrado al tema de adoptar? - Hamilton asintió - Que problema, amigo. Pero no puedes esperar que tu matrimonio sea un paraíso, si te casaste con Sergio Pérez.
El británico negó con la cabeza.
Rosberg era su amigo de toda la vida, prácticamente crecieron juntos, pues el menor era demasiado tímido e introvertido, además de que venía de otro país. Estudiaron en el mismo colegio, en el cual el rubio lo pasó muy mal, pues sus compañeros no se tomaban a bien el hecho de que hablara alemán y que hubiera nacido en dicho país.
En cambio desde que Lewis lo conoció, formaron fuertes lazos, consolidando una gran amistad, que con el paso de los años solo se hizo más fuerte.
También fueron juntos a la universidad, se mudaron juntos a Oxford, emprendieron un negocio y estudiaron la misma carrera y especialidad. Aunque todo parecía perfecto, había un pequeño pero, pues a diferencia de Lewis, quien siempre tuvo muy claro lo que quería estudiar, para Rosberg no era así, él nunca quiso estudiar medicina, ni trabajar en un hospital, solo no tuvo más opción.
Al ser tan unidos solían contarse todo, Nico en repetidas ocasiones le dijo que no le gustaba la medicina, pero su padre lo había obligado a estudiarla. Pues Keijo Rosberg era uno de los mejores cirujanos plásticos, razón por la cual se habían mudado a Inglaterra.
Descendiente de una familia de médicos, su amigo - casi hermano - se vio obligado a estudiar una carrera que no le gustaba.
A Hamilton le sorprendía el hecho de que a pesar de no gustarle lo que hacía, lo hacia de forma excepcional.
Ambos eran de familias con muy buen estatus económico, mientras Nico venía de una familia de médicos, Lewis tenía padres abogados, los cuales tenían su propio bufete de abogados, simplemente habían tenido vidas muy similares.
Terminaron estudiando juntos en Oxford, una de las mejores universidades del mundo. Estudiaron la misma especialidad, pues según Nico, el estudiar juntos lo hacía "más llevadero".
