Bubblegum Btch [Tokyo Revengers]

01

—Estoy cansada. —Lloriqueé dejándome desparramar del sillón.

—Ya casi terminamos. —Me dijo Mitsuya mientras pestañeaba lento, y con sueño.

—Llevamos desde ayer a las cinco y aún no acabamos, y ya es otro día y son las tres de la mañana. —Murmuré. —¿Y si descansamos?

—No po... —Mitsuya cayó de sueño sobre el teclado de la computadora y se durmió.

—Ah órale, yo no puedo pero tú si. —Me quejé levantándome para ponerle una mantita en la espalda, para dejarlo dormir a gusto.

—¿Suri? ¿Aún estás aquí? —Preguntó la madre de Mitsuya, caminando hacia la cocina.

—No señora, soy un fantasma, morí mientras hacíamos tarea. —Dije burlona, y ella rió.

—Ya es muy tarde, y viendo que mi hijo se quedó dormido... ¿por qué no te quedas en su habitación?

—Ah, no se preocupe señora, estoy bien aquí.

—No me reproches y ve a dormir.

—Si señora. —Dije tomando mi celular para después ir a la habitación de Mitsuya.

Una vez ahí, el olor a Mitsuya inundó mis fosas nasales, era un olor rico en realidad, aunque del lado donde están sus zapatos si me llegaba un olor medio rarito.

—Iu, mejor evitar ese lugar. —Dije soltando una risa nasal.

—¿Necesitas algo? —Me preguntó la mamá de Mitsuya.

—Ah, no, estoy bien, gracias por dejarme quedarme. —Le di una sonrisa y ella asintió.

—Eres una buena niña, claro que te dejaré quedarte. —Me dijo y luego se fue de la habitación.

Me acerqué a la cama, quitando las mantas para poder acostarme, apenas lo hice, el sentimiento de seguridad y abrigo me hizo quedarme dormida.

°°°

—¡Despiertaaaaa! —Exclamó Luna saltando en la cama.

—¡Despierta, despierta! —Exclamó ahora Mana.

—Nostenchingando. —Murmuré cansada, tomé las mantas y me hice taquito para seguir durmiendo.

—¡Mitsuya!

—Ya, no griten, estamos cansaditos. —Dijo Mitsuya metiéndose a la cama conmigo. —Vayanse a su habitación.

—¡Despierten, ya es de día! —Exclamó Luna.

—Ya, ya, niñas, dejenlos dormir. —Les dijo su mamá, así que ellas finalmente se fueron. —Hey, ¿Quién les dijo que podían dormir juntos?

—Shhh.

—No me shushees niño. —Se quejó indignada.

Pero yo volví a dormir.

°°°

—¿Debería preocuparme?

—Nah, es normal que ella duerma tanto. —Murmuró mi abuelo. —Me sorprendió que no haya llegado a casa después de la escuela y se durmiera, ella duerme cada cierto tiempo.

—¿Y eso es normal? —Cuestionó sorprendida.

—Con Suria si. —Le dijo mi abuela. —Tiene una condición médica que le hace tener tanto sueño.