El primer secreto

7 3 0
                                    

La mañana fue maravillosa, el amanecer que me mostró mejoro mi estado de ánimo; pero extrañamente creo un sentimiento que cubrió mi corazón. Las preguntas se han multiplicado, la curiosidad comienza a propagarse por mi mente, como una horrible bestia hambrienta que solo busca alimentarse de mi dolor.

—Amanda —confusa miro a Laura que sonríe con amabilidad —Pareces muy distraída ¿Noticias nuevas que compartir? —incomoda me muevo sobre mi silla

—Ninguna —intento volver a la realidad, pero no recuerdo el tema del que estábamos hablando 

—Tú y Erick parecen llevarse muy bien —asiento y miro la mesa buscando un poco de vino "Sé que es temprano, pero necesito algo que me avive" —No te dejes engañar, Erick, solo finge —frunzo el cejo y volteo

—¿Qué has dicho? —sonríe 

—La única cosa que hace Erick excelente, es mentir —mis manos se vuelven puños e inhalo buscando paciencia —Él no ama a nadie, no cuenta con esa capacidad y es absurdo e innecesario que intenten engañarnos; solo lograrás que juegue contigo —con delicadeza toma la taza frente a ella, con un delicado movimiento bebe de ella

—Él ya no te ama —tose entre risas y niega divertida —No importa lo que digas, no creeré nada que salga de tu sucia boca...

—Amanda, él nunca me amo; porque no puede hacerlo... No son mentiras lo que digo, fui yo la usada por él, no al revés —deja la taza y sus ojos se vuelven sombríos —Erick solo usa a las mujeres, porque su corazón roto no ha logrado sanar —lentamente su mirada cambia y sus ojos se humedecen —Hizo una promesa y uso su corazón para sellarla, así que no pienses ni por un segundo, que podrás tener una relación con él, ni siquiera podrán ser amigos, porque él no confía en nadie —su voz se entre corta, veo como traga con dificultad y torpemente se pone de pie.

Mira a la puerta y sus ojos arden de ira y dolor, su pecho sube y baja conteniendo su furia.

—¿Nunca te amé? —pregunta Erick a mis espaldas —¿Ni siquiera pude hacerte sentir amada? Supongo que por eso me dejaste...

—Jamás me amaste, jamás me hiciste sentir amada y no es necesario que finjas, sé la verdad —escucho los pasos de Erick acercarse 

—¿Cual verdad? —su voz se siente molesta y herida 

—No puedes amar a nadie, no hay ni un pequeño espacio en ese corazón de piedra para que alguien pueda entrar; tú nunca la suplantarás ni tampoco permitirás que ocupen su lugar —las lágrimas resbalan por sus mejillas —Por eso me fui, por qué ya no podía seguir sacrificándome por ti; por una oportunidad que nunca me diste y que jamás nadie tendrá —desvía la mirada y bruscamente limpia las lágrimas de su rostro 

—Supongo que por eso fue más fácil dejarme por mi hermano...

—¡Sí! —grita herida —¡Él siempre estuvo a mi lado cuando tú me despreciabas, cuando me dejabas abandonada en la casa de tu madre! ¡Cuándo te perdías en el estúpido club y te rodeaban las mujeres! ¡Él sí estuvo para mí! —el llanto por fin sale y las lágrimas empapan su rostro, sus mejillas se ponen rojizas y los gemidos de dolor son callados por su delgada mano

—Que bien actúas, casi te creo...

—Me importa muy poco si me crees —me mira —No te cases con él, no importa las promesas que te haga, no le creas; él no puede amar a nadie... Mírame —intenta recomponerse, pero al verse vulnerable decide marcharse.

"Pocas personas pueden mentir mientras el dolor los parte desde a dentro; pude ver en sus ojos la verdad, sentí su dolor, ella no está mintiendo".

—Amanda, no escuches nada que te diga, ella mentirá siempre que pueda...

—Ella no está mintiendo —con el corazón abrumado me levanto —Solo basta con mirarla, para saber que aún te quiere...

—Ella miente...

—¿La amas? —mi pregunta lo toma por sorpresa —¿Aún la amas? —sonríe burlonamente 

—Por supuesto que no...

—Ni siquiera lo dudaste, tu respuesta fue rápida...

—¿Piensas creerle? Ellos solo buscan hacerse de la empresa...

—Al igual que tú —suspira —También haces planes, también engañas y creas tretas ¿Por qué ellos son diferentes? Míranos ¡Estamos haciendo lo mismo! —niega frenético y me voltea, sostiene mis brazos con fuerza 

—Nosotros no somos como ellos, tú no eres como ella...

—¡¿Cómo lo sabes?! ¡No nos conocemos de nada!

—¡Es cierto que no nos conocemos tan bien, pero no sucederá lo mismo que con Laura!

—Lo único que espero de ti, es sinceridad; hagas lo que hagas, espero saberlo primero de ti y no tener que enterarme por los demás —exhausta quito sus brazos de mi cuerpo. 

"Si lo que dice Laura es cierto, nos espera una vida lamentable; triste y solitaria, tal vez ni siquiera logremos ser amigos... Tal vez. Tal vez. Tal vez... ¿Por qué tenía que suceder esto ahora? ahora que mi mente no funciona correctamente, que mis emociones y sentimientos están inestables, que mi mente no deja de confundirme ¿Qué es lo que debo hacer? ¿Cómo debo lidiar con esto?".

—Amanda...

—Quiero irme a casa —retrocede —Necesito aclarar mi mente y mis sentimientos; desde que llegue aquí los sueños no hacen otra cosa que empeorar, las voces... Tú, todo está confundiéndome... Lo siento...

—No necesitas irte para pensar... Por favor, dame la oportunidad de demostrarte que no soy como dicen, hay mucho más de mí que solo lo que miras...

—Lo sé, es por eso que debo de alejarme; mis ideas no son claras y mis sentimientos son extraños y confusos, no dejo de sentir que te conozco de antes, las voces no dejan de asociarse contigo... Estoy perdiendo la cabeza y necesito recuperar el control —afligido me mira y asiente sin estar convencido.

"Sé que no puede entenderme, ni siquiera yo me comprendo; soy un caos y temo arrasar con el resto".

—Si te vas ahora, nuestro compromiso se rompe —agacho la cabeza ocultando esas lágrimas que se mueren por salir "¿Por qué carajos voy a llorar?" 

—¿Me estás amenazando?

—No, es lo que haré... No eres la única que siente esa conexión inexplicable que hay entre nosotros, ese imán que suele atraernos; en estos días he compartido más contigo de lo que he compartido con los demás en años —suspira y miro sus pies retroceder —No solo tú sientes miedo y confusión, no estaba en mis planes compartir algo contigo... —levanto la cara sorprendida por su confesión

—Erick...

—Si no eres capaz de arreglar los problemas entre nosotros juntos, no te obligaré a ser mi esposa —siento caer lentamente la lágrima por mi mejilla


—No te obligaré a nada, ni tampoco te buscaré... Solo vuelve... Prometo no volver a buscarte... —siento sus lágrimas caer por mi cara, sin lograr abrir mis ojos.


Toco mi pecho adolorida "¿Qué son estos recuerdos? ¿Qué intentas decirme?"...

—Si te vas, prometo no volver a buscarte —mi corazón se estruja y retuerce de dolor 

—¿Qué...


—Lo lamento Mandy, te juro por mi corazón que te pertenece; que jamás volveré a enamorarme y no permitiré que nadie ocupe nunca este corazón... Te lo prometo...


La vista se vuelve borrosa, abro y cierro los ojos, solo para ver el rostro consternado de Erick...

—Erick...

—¡Amanda!




CONTRATO © (Sin reglas).Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt