ep:8 ¡Te encontré!

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"Lo siento mamá y papá, pero no me dejaron más opción, lamento irme asi, yo solo quiero verlo una vez más por que mi corazón ama a p'tep en todos los universos y no puedo hacer nada para cambiarlo, diganle a mis hermanos que no se sientan culpables, que ya los perdone, solo les pido que no me detengan más, ire en busca de la persona que detuvo mi tiempo y por el cual no pude hacer latir más a mi torpe corazón,
Los quiero.

Atte: su amado hijo Barcode"

Pov. BARCODE

El llanto de un bebe estaba poniendo de mal humor a la gente en el tren y la señora no sabia que hacer, más que pedirle a su bebe que se calme mientras la cargaba.

Observe como las personas comenzaron a gritarle y aunque no queria moverme de mi asiento por que me daba miedo.

Decidi ponerme de píe yendo hasta donde se encontraba la señora y hablarle a la bebe.

-¿por que lloras linda?, ¿quieres que te cante una canción de cuna?- la señora me miro y me entrego a su bebe, asi lo tome en brazos, sintiendome algo nervioso, no era la primera vez que cargaba un bebe, habian persona que me daban a sus bebes para fotos y tambien me decian que mi voz lograba que sus bebes duerman, aunque no les creí esta sera la prueba para comprobarlo.

Así comence a cantar la canción que mamá me cantaba antes de dormir y el pequeño bebe fue parando su llanto poco a poco y los pasajeros se tranquilizaron.

-Gracias, muchas gracias- hablo la señora y asenti, mientras una chica se acerco a mi y me pidio una foto.

-te reconozco eres el Angel- me sorprendio que se me acercara tan emocionada pero acepte tomarme la foto y continue con el viaje en mi asiento.

Ya estaba acostumbrado a viajar en estas maquinas, la primera vez que subi tuve un ataque de panico, por que creí que era un monstruo y me tragaria, ahora que lo pienso me siento avergonzado de mi actitud.

[Pasajeros a bordo, esta sera la ultima estación, que tengan una increible experiencia en Bangkok.]

Al escuchar me prepare rapidamente, lo más terrible era bajar del tren, la gente se amontona y te arrastran.

-permiso, permiso por favor- el tren paro e intente estar lo mas cerca posible de la entrada pero en el instante que paro, la multitud bajo como si tratara de una ola gigantesca arrastrandome hasta el siguiente bagon, sin poder bajar.

Me aparte como pude, camine y pedi permiso pero no podia avanzar más, estando estancado entre la gente hasta que senti como alguien me jalaba sujetando mi mano con fuerza hasta lograr salir.

-¿gracias?- le dije confundido y me aparte.

-de nada, soy un gran fan- era un chico quizas de la misma edad que la mía o 1 año menor pero parecia ser alguien agradable.

-¿vienes en busca de la persona que amas?- asenti y me aferre a mi guitarra para luego despedirme y seguir mi camino.

-si no tienes donde quedarte puedes venir a mi casa.

Gire mi cuerpo y lo vi con sorpresa, aunque no lo conocia y podia ser peligroso, tener un lugar donde quedarse y no estar debajo de algun puente, fue demasiado tentador.

-No desconfies de mi, de verdad te admiro mucho y soy un verdadero fan, me gustaria ayudarte- lo pense un poco pero termine rechazando, por que aunque no soy la persona más inteligente del mundo, tampoco soy tonto, mamá me enseño a no hablar con extraños, bueno en eso falle, pero al menos no me quedare con un extraño.

-esta bien, toma este papel en el cual esta mi numero, si necesitas algo no dudes en llamar.

-gracias- dije esta vez con una sonrisa y me marche rumbo a la salida de la estación y me sorprendi al ver tanta gente caminando en las calles.

AmygdalaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora