CON LOS MUSLOS HÚMEDOS

⁴ 🦊🐱 SURPRISE

🌷 NARRADORA

Un mes ha pasado desde aquella discusión y tanto el Alfa como el Omega no se han dirigido la palabra. Ambos se ignoran por completo. Pero el destino les tiene un camino diferente.

9:28 p.m.

- Maldición. - dijo saliendo del baño.

El castaño se asomó por la ventana y observó cómo Sunoo metía sus pertenencias en su carro.

- El idiota se largará. - dijo molesto guardando en el bolsillo de su pijama aquel plástico blanco.

🐱 JUNGWON

Salí de mi habitación porque iría a enfrentarlo, pero en medio del pasillo los golpes fuertes en mi puerta se escucharon. Me apresuré a bajar los escalones muy desconcertado, pues luego los gritos se hicieron presentes.

- YA VOY, MALDICIÓN.- abrí la puerta y me encontré con Jinsik. - ¿Qué haces aquí?.

- Jungwon, por favor dame una oportunidad. - tiró la botella al suelo, rompiéndola.

- Estás muy ebrio, ya vete.

Había un auto con dos tipos más, uno en el piloto y otro en la parte trasera.

- No me iré sin cumplir mi apuesta. - me abrazó y estaba intentando besarme, pero obvio no se lo permití y me giraba a los lados opuestos a él.

- Ya, Jinsik, vete de mi casa.

- Vamos muñequito, tú también quieres, lo sé.

- Suéltame, suéltame, Jinsik ya déjame. - estaba intentando zafarme, pero él me agarró con más fuerza.

- Te dijo que lo sueltes. - Jinsik me soltó y se giró para ver a Sunoo. - ¿Acaso, no oíste?.

- Sunoo. - él me tomó de la muñeca y me puso detrás de él.

- ¿Tú quién eres?. - comenzó a reírse en forma de burla.

- ¿Tienes algún problema?. - preguntó sin responder lo que le preguntaron.

- Sí, que ese es mi Omega. - ríe de nuevo. - Consigue el tuyo. - me iba a jalar, pero Sunoo lo tomó por la muñeca y se la dobló. - AHHH, AHH. - gritó por la presión en su mano.

- Soy el novio de Jungwon y si te atreves a ponerle una mano encima o vienes de nuevo aquí. - se acercó a su oído. - Juro que te mato y ten por seguro que nadie va a encontrarte. - finalmente lo empujó.

Los otros dos tipos iban a bajar del auto, pero Sunoo se quitó la chaqueta y me la puso a mí, dejando al descubierto el arma que traía con él en su cintura, miré el arma sorprendido y luego lo miré a él, nunca creí que Sunoo cargara algo así consigo. Jinsik lo miró y se levantó del suelo para luego subir al auto de sus amigos e irse.

- ¿Quién era?. - preguntó Sun, pero no respondí, aún seguía sorprendido por lo que traía en su cintura. - ¡CARAJO! ¿QUIÉN ERA ESE TIPO?. - gritó enojado.

- Es Jinsik. - lo tomé de la mano y lo metí a mi casa. - Es un ex-amigo de mi hermano.

- ¿Fue algo tuyo?. - no respondí. - RESPONDE, MALDITA SEA.