Pirata Tanya del Fin

Capitulo 9

Tanya

"¿Alguna vez se rinde?" Gemí cuando otra bala de cañón salió volando por el lado de estribor, rozando por poco el Perla Negra.

"Aparentemente no", dijo Jack, mirando por encima del hombro hacia el buque de guerra de Norrington mientras avanzaba pesadamente sin esperanzas de alcanzarnos en una carrera recta, pero haciendo un buen trabajo para encontrar formas de solucionar ese problema.

Estábamos justo frente a la costa de Marruecos, en dirección a las Islas Canarias o el objetivo que habíamos determinado estaba en algún lugar de esa cadena de islas. Pero nos habíamos topado con un problema.

Para saber que nuestro objetivo estaba en las Islas Canarias, y en qué isla concreta, tuvimos que infiltrarnos en la corte del Rey de Marruecos. O el actual "Rey" podría simplemente decir "rey pirata" a este ritmo, ya que Marruecos y muchos de los estados del norte de África fueron, en este período de tiempo y probablemente durante mucho tiempo más, sus propios reinos piratas. Tenían sus propias demandas, tratados y todo tipo de estupideces que preferiría no recordar cómo tuvimos que superarlas.

Jack literalmente tuvo que venderme como esclavo al rey de Marruecos para obtener de él la información que queríamos.

No estaba contento con esto, pero si fuera por la causa, sufriría algo de lo que tuve que sufrir. Es decir, ponerme un traje de chica de harén, perfumado, y ser conducida a la habitación del rey, sólo para aprovechar la primera oportunidad que vi para dar un salto volador desde la terraza abierta. Si no hubiera tenido mi habilidad con los hechizos, habría muerto por una caída de cuatro pisos. Pero como podía volar, bueno, simplemente volé y sufrí la indignidad y las bromas de aterrizar en el Perla Negra con un traje de chica harén.

Yo recordaría esto. No sé cómo lo recuperaría por esto, pero lo recordaría.

De todos modos, engañamos al rey para obtener información sobre la ubicación de la siguiente parte del rompecabezas para evitar que Davy Jones asesinara a Jack y nos dirigimos hacia la isla. Pero eso significaba retroceder, lo que significaba que Norrington, que aparentemente nos había estado persiguiendo, había tenido tiempo de alcanzarnos. Y esperando en un puerto donde esperábamos refugiarnos para recolectar suministros. Bueno, ahora eso no estaba sucediendo. Ahora huíamos en dirección opuesta a nuestro objetivo principal, hacia una tormenta que se estaba gestando. Quería cuestionar esto, pero bueno, Jack conocía su nave y yo no. Pero claro, si nunca lo cuestionaba, nunca aprendería nada, así que también podría hacerlo.

"Jack, ¿estás seguro de que es una buena idea?"

"No lo sé", respondió Jack, mientras miraba su pequeña brújula antes de decir: "Necesitamos escapar de Norrington, y dice 'Muy por delante', así que vamos por delante".

"Maravilloso", dije sacudiendo la cabeza, mirando hacia la tormenta y notando un tono extraño en sus colores, casi rojo. Me pregunté de qué se trataba antes de escuchar algo que venía del otro lado del mar hacia nuestro lado de babor. Algo familiar. Corriendo por la cubierta, saqué una mira y le infundí un poco de magia para mejorar mi visión tanto como fuera posible. Miré y rápidamente vi lo que temía ver: un galeón dorado en camino, avanzando hacia nosotros a toda velocidad.

"¡Bien, está aquí!" Dije completamente consternado. Jack me miró y luego pasó a mi lado hacia el horizonte dorado en su camino.

"Oh, genial, ahora tengo a la Armada británica y a una antigua novia detrás de mí, como en los viejos tiempos", dijo Jack sacudiendo la cabeza antes de que una bala de cañón atravesara nuestra cubierta delantera, rebotando en la esquina del barco y aterrizando en las olas.

Mirando hacia adelante, me pregunté de dónde venía eso antes de ver el barco bajo en el agua. Casi parecía medio hundido, dañado por la batalla y de alguna manera no hundirse en las olas de la tormenta. Sus cañones disparaban salvajemente, y su tripulación... bueno, parecían cáscaras descompuestas de seres humanos.