Beomgyu se removía inquieto por su habitación. No había podido dormir mucho por la emoción que le provocaba pensar en aquella cita. La cita que comenzaba en algunas horas. Debido a lo poco que pudo dormir, despertó muy temprano y ahora pensaba que se veía terrible. Aunque no fuera así. Intentó con todas sus fuerzas poder dormir más tiempo pero lo atacaba la emoción, corría por su cuerpo un ya conocido sentimiento que lo remontaba a sus primeros enamoramientos.
Pensó en llamar a Taehyun, pero al revisar la hora "7:05" decidió no hacerlo. Nadie en su sano juicio estaría despierto tan temprano un sábado.
Después decidió ir por un poco de leche tibia, a ver si eso resultaba y tampoco funcionó. Así que se puso a hacer un poco de ejercicio, apostando que con eso su emoción bajaba un poco, y de cierta manera, funcionó. No solía hacer ejercicio siempre, le fastidiaba el sudor que le llegaba a caer sobre la cara, pero comenzó a acostumbrarse al conseguir sus primeras conquistas, en ese tiempo fue cuando consiguió más citas. Después de una racha, decidió dejarlo por un tiempo, para concentrarse en salvar sus materias. Y ahora, volvía a ello por un poco de algo que lo calmara ante la ansiedad.
Después de unos cuarenta minutos de ejercicio, se quedó en el sillón de la sala mirando hacia el techo por un buen rato y comenzó a distraerse con sus pensamientos, de repente ya estaba pensando en el outfit que llevaría a la cita, eso lo hizo sonreír. Además, comenzó a preguntarse si Yeonjun y él se besarían, porque ya no era un paso arriesgado, ya conocía los labios del otro lo demasiado para que le diera vergüenza pensar en aquello.
Finalmente eran las diez de la mañana cuando volvió a mirar su reloj, así que ya podía llamarle a Taehyun, al parecer, él tenía aquella cita con Hueningkai hasta la semana siguiente. Sonó el tono que indicaba que la llamada se estaba procesando y tras tres pausas, finalmente se escuchó la voz de su amigo.
— ¿Beomgyu? — su voz todavía sonaba adormilada — Dios, ¿qué haces despierto?
— Ya son las diez de la mañana, ya deberías estar haciendo algo.
— Es sábado, tú deberías estar descansando — un bostezo se escuchó a través de la bocina —, espera, es verdad, hoy es tu cita con Yeonjun — se imaginó a su amigo sonriendo como burlándose de él.
— No he podido dormir bien, me la pasé hasta las doce de la noche practicando mi canción en la guitarra y después de eso comencé a pensar en posibles malos resultados, entonces se hicieron las tres de la madrugada y finalmente a las tres y media me quedé dormido, pero desperté y apenas eran las siete y desde ahí no volví a dormir...
— Entonces Yeonjun debe gustarte mucho, ¿cuándo fue la última vez que te pasó eso?
— Creo que hace unos tres años... Cuando, ya sabes, iba a verme con esta chica que me gustaba desde la secundaria... — recordó aquella breve ocasión y soltó una sonrisita.
— Trata de relajarte, dijiste que iba a pasar a tu casa por la tarde, así que no te estreses demasiado, todo saldrá bien, te lo prometo.
Beomgyu admitió que su amigo tenía razón, todavía faltaban demasiadas horas para ver a Yeonjun, podía dormir un par de horas más porque sino, la falta de sueño le iba a pasar factura en la cita con el pelinegro. Se despidió de Taehyun que seguramente regresaría a la cama y colgó la llamada finalmente. Suspiró y regresó a su habitación, pues sus padres seguían dormidos, se acostó en su cama y se tapó con una cobija que tenía por encima, trató de no pensar en nada y así por fin concilió el sueño.
[...]
Yeonjun abrió las cortinas tan pronto vio que casi daban las diez de la mañana en el reloj que había puesto a un lado de su cama. En cuanto despertó, lo embargó una inmensa felicidad y expectativa. ¿Beomgyu estaría emocionado o sólo era él quien había soñado con haber tomado su mano en un gran parque? Esperaba que todo saliera bien en aquella cita, en la primer cita que tendría en toda su vida.
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bad boy ; yeongyu
FanfictionChoi Beomgyu es un famoso "bad boy" conocido en la escuela porque le gusta tocar una canción a sus conquistas, sin embargo, de pronto, alguien comienza a "robarle" a las mujeres que quiere conquistar. Dispuesto a enfrentar a tal ladrón, termina por...