MODERN AU| Will Byers, estrella del béisbol y abiertamente homosexual, sufre un engaño de su pareja, Dean Evans.
En un intento de vengarse, su amigo Lucas propone encontrar a alguien para salir con Will y restaurar su reputación como venganza contr...
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Transcurren así quince minutos de fiesta, donde todos los chicos conversan, se escucha la música pesada de fondo y se mantienen de pie en el mismo lugar.
En la mente de Mike no hay más que un constante deseo de irse, alejarse de la música y respirar un poco de aire fresco.
— ¡Muchachos! .- gritó Lucas para ser escuchado por encima de la escandalosa música, estaba en el sofá, con algunos del equipo de básquetbol. Pero estaba Max, así que no cree que sea tan malo.
Los dos chicos se acercaron y fueron recibidos con saludos. Will ocupó el último espacio libre en el sofá y Mike lo siguió. Todos comenzaron a hablar y a beber, pero Mike se negó rotundamente a tomar algo. Pasaron alrededor de media hora así, a veces intentando involucrarlo en la conversación. Ciertamente, Will la estaba pasando bien. Y Mike no quería arruinarle la felicidad siendo un estorbo y estando amurrado toda la noche, procurando no tener su clásica expresión de amargado y no echar a perder la fiesta.
Will está más que consciente de que ese tipo de atmósfera no es ni medianamente cercana a la que Mike suele frecuentar. De cierta manera, quiere intentar que haga algo nuevo, que pruebe otra clase de diversión. Pero si al final Mike se siente incómodo y prefiere irse, podrían marcharse juntos. Will no quiere forzarlo a hacer algo que no quiere.
El pelinegro está concentrado en las pláticas que apenas comprende donde Will y los demás comparten diversas opiniones. O es así hasta que un fuerte olor a humo invade sus fosas nasales. A poca distancia, alguien está fumando un cigarrillo con total tranquilidad, como si estuvieran en un espacio abierto. Después de un breve intento por soportarlo, termina harto del intenso olor que parece no molestar a los demás.
— Voy a salir un momento. - dice Mike, levantándose del sofá.
— ¿Estás bien? ¿Sucede algo? - pregunta Will, acercándose con una expresión preocupada mientras Mike se pone de pie.
— No me siento muy bien. - responde Mike con la mirada fija en el vaso de plástico que sostiene, rebosante de soda. Siente cómo las burbujas ascienden y se dispersan en el líquido.
— Esta bien, saldré contigo. - Will se mantuvo en su lugar, alzándose ligeramente sobre las puntas de sus pies, escudriñando entre las personas en busca de un respiro en el patio.
Su esperanza se desmoronó al darse cuenta de que el lugar estaba atestado de gente y, en medio de la multitud, vio a Dean de la mano con Stacey, confirmando sus sospechas sobre si realmente la estaba engañando con el otro chico, típico de Dean. Un suave resoplido escapó de los labios de Will.
— ¿Dónde puedo encontrar habitaciones vacías? .-preguntó Will mirando a Jason.
Jason deja su vaso a un lado. — Hay algunas que suelen estar desocupadas. Solo sube las escaleras, avanza hasta el final del pasillo a la derecha, cerca del baño, ¿recuerdas? .- indicó con claridad.
