Sexto

162 14 4
                                    

¿Ya llegamos?

China respiro hondo, recostado en su asiento con los ojos cerrados tratando de meditar y sacarse esa molesta voz de la cabeza, algo difícil teniendo en cuenta que estaba sentado junto a él en un avión a mas de mil pies de altura. Norte comenzaba a desesperarse, tenia demasiado tiempo sentado viendo nubes y China comenzaba a desesperarse por la constante pregunta del coreano.

¿Ya llegamos?

a menos que pretendas tirarte desde aquí, yo creo que no

Norte hizo una mueca y soltó un quejido, ese viaje era eterno. No sabia exactamente cuantas horas llevaba ahí encerrado, pero sin dudas eran demasiadas. Tenía las piernas dormidas y ya se habia aburrido de caminar por el pasillo del avión para estirarlas un poco, también se habia aburrido del paisaje azul y blanco que le ofrecía el cielo. Estaba harto.

¿A dónde se supone que vamos? Sigues sin decirme

Al infierno— Norte le dio un golpe en el brazo al chino, haciéndolo quejarse—Vamos a Colombia, a Colombia vamos ¿Contento?

¿Colombia? Pero ¡Eso esta del otro lado del mundo? ¿Qué vamos a hacer a Colombia? — China no contesto, solo se coloco su chaqueta sobre el rostro para poder dormir—Espera ¿Esa no es la que te gano en la guerra?

¡Ey, Ey, Ey! Ella no me gano en la guerra. Nuestro ejercito gano esa batalla ¿Entendido? Nosotros ganamos

Derrotar en tres días a un ejército sin municiones no suena como una victoria—《Maldita rata astuta》— Además ¿No fue ella la que te hizo huir como una gallina?

Yo no hui como gallina, yo solo... me retire de forma estratégica— La mueca en el rostro del menor hacia obvio que no iba a tragarse ese cuento—Era parte de la estrategia, todo estaba planeado para...— Norte lo interrumpió, imitando el sonido que hacían las gallinas—Planeado para...—Y una vez más—Ay, lo que sea. Cállate

Norte no pudo evitar reír, debía admitir que molestar al gigante asiático era realmente divertido. Volvió a mirar a la ventana y nuevamente solo había nubes y el suelo haciéndose mas grande. ¿Mas grande?

Se arrodillo en el asiento y pego la cara a la ventana, podía notar como las nubes comenzaban a subir y como el suelo era cada vez mas cercano. Y la voz del capitán en las bocinas del avión le confirmaban que estaban próximos a aterrizar.

¿Ya llegamos?

China suspiro resignado, pero solo pudo sonreír levemente al por fin poder decir—Si

Al bajar del avión Norte arrastraba su maleta mientras temblaba del frio y con la boca abierta inhalaba tanto aire como fuese posible, sentía que no tenía suficiente oxígeno. Seguía a China de cerca, aunque él tampoco parecía saber a dónde se dirigían.

¿A dónde se supone que vamos? — Pregunto por fin, luego de haber pasado un rato dando vueltas—¿Nos perdimos?

No estamos perdidos. Es el siglo veinte ¿Quién se pierde aun? — Norte solo pudo doblar los ojos y chasquear la lengua. China era demasiado orgulloso como para admitir que no sabia hacia donde ir—Estamos esperando a alguien. Cuando hable con México dijo que alguien vendría a recogernos

¿Quién? ¿Ella?

China giro la cabeza hacia donde Norte señalaba, ahí se encontraba una castaña sosteniendo un cartel improvisado con "China" escrito en marcador negro. Era evidente que ella tampoco sabía a quién estaba esperando exactamente pues paseaba su mirada sobre todos, esperando que alguien se acercara.

𝑷𝒂𝒅𝒓𝒆𝒔 𝒅𝒆 𝒓𝒆𝒑𝒖𝒆𝒔𝒕𝒐|| 🇨🇳ᴄʜɪɴᴀxᴄᴏʟᴏᴍʙɪᴀ🇨🇴Donde viven las historias. Descúbrelo ahora