Has dejado de ser mi hermano

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El cambio tan abrupto de temperatura lo hizo estremecer, el agua lo rodeaba, siendo tocado por leves olas que recorrían esa tina. El vapor se elevaba mientras Jiang Cheng sentía su cuerpo dejarse relajar por el calor que calaba poco a poco cada parte de su ser.

Por el reflejo de la tina pudo ver como el listón de su cabello se iba cayendo dejándolo libre. El tono del agua paso de clara a levemente gris mostrándole con sinceridad su nivel de suciedad. Pequeños toques que recorrían su cabeza eran acompañados por un líquido que pronto se volvió espuma. Recorriendo cada parte de su cabello enredándose para luego bajar siguiendo la caída de este.

Jiang Wanyin cerró sus parpados cuando el agua empezó a caer para limpiarlo. Un ruido se escuchó a su lado, pero no abrió sus ojos hasta que sintió unas manos posarse en su pecho junto con un pequeño y suave trapo, pronto se fueron deslizando por su cuerpo siguiendo un recorrido firme.

Bajando por su abdomen, tocando su cintura para luego subir pasando por sus pezones, dejando que saliera un suspiro de su boca, sin embargo no se detuvieron ahí. Más bien siguieron elevándose hasta llegar a sus hombros, fue entonces que lo noto, esos brazos que lo jalaron con un poco de fuerza haciendo que se inclinara hacia atraes cayendo sobre el pecho del Patriarca, no estaba solo en esa tina.

Quiso hablar pero una frescura proveniente de todo su cuerpo lo hizo relajar más su cuerpo. Dejando caer todo su peso sobre el otro cuerpo se dejó hacer, los recorridos de esas manos siguieron ahora tocando también sus brazos hasta llegar a sus dedos para luego regresar y bajar por sus costados.

Un suave olor a lotos se empezó a esparcir por el lugar mientras Jiang Wanyin disfrutaba de la sensación de limpieza que no había podido tener desde que llego ahí. No tomando con importancia cuando fue levantado dejando que se recargara en la tina, mientras que Wei Wuxian se colocaba enfrente de él, entre sus piernas. Permitiendo que el mayor las tomara para pasar aquel trapo por ellas debajo del agua. Subiendo y bajando, delineándolas con sus dedos, presionando de vez en cuando. Llegando hasta sus muslos rosando un poco sus uñas que dejo un recorrido electrizante por su cuerpo.

Siguió disfrutando de las sensaciones no notando que sus piernas fueron levantadas hasta ser detenidas por las orillas de la tina. Suspirando cuando esas manos seguían sus caminos. Olvidando lo extraño que era ver el cuerpo del mayor tan cerca del suyo así como el por qué era levemente sostenido cuando cierto banquillo que evitaba que se hundiera fuera retirado, obligándolo a recargarse más en aquel lugar.

Pero lo que si lo despertó de su ensoñación fueron las manos que llegaron a su miembro tomándolo con descaro, quiso levantarse para golpearlo pero sus piernas estando elevadas no lo permitieron.

Fue entonces cuando unos dedos empezaron a hacer pequeños círculos en la superficie de su entrada que trato de empujarlo pero una fuerza que estaba en sus caderas lo hundieron en el agua.

Trato con sus manos de tomar de los hombros del otro tratando de jalar para salir pero no fue hasta que este último quiso que pudo elevarse de nuevo para respirar.

Tosiendo al fin lo miro notando entonces que se encontraba arrinconado demasiado pegado a la tina con sus piernas separadas por la presencia del patriarca, así como inmovilizadas por ser elevadas. Mirando hacia abajo vio que estaba sobre el mayor evitando así ser hundido.

Trato de poner sus manos por las orillas de aquel lugar tratando de alzarse pero estas resbalaron, una risa del otro llego. – No podrás agarrarte, estas tan sueva que todo lo que toques se resbalara- Dijo el otro mientras metía un dedo en su interior.

Saco un grito, golpeando con fuerza el pecho del mayor pero apenas lo hizo fue hundido de nuevo. Tratando de agarrarse, sus manos no podían sostener nada, abajo del agua sintió el dedo en su interior moverse de un lado al otro, saliendo para luego presionar.

Jalado del cabello logro salir a la superficie abriendo su boca con desesperación tratando de obtener aire para ser besado de inmediato, con una brusquedad desesperada. Mordió al otro queriendo que se separara pero eso parecía ser tomada como una bienvenida a que lo hiciera de vuelta.

Mordidas empezaron a ser presentes por ambos labios del menor quien ya sentía el sabor metálico en su boca, gruñendo poso sus manos en el pecho de Wei Wuxian pero al tener la suavidad producto de las sustancias de baño se deslizaron por estos hasta llegar al cuello de él.

Escuchando la risa del mayor sobre sus labios trato de maldecirlo pero solo permitió que el otro introdujera su lengua dentro de su boca. Haciendo un recorrido, tocando cada parte de ella para luego enrollarse con la suya. Sintió la saliva caer mientras buscaba el aire que era introducido en pequeños momentos por algunos movimientos de Wei Wuxian.

Sintiendo la ira acumularse en su pecho, movió su pierna con fuerza para golpear el costado del mayor. Logrando que se detuviera y tocara esa parte con dolor. Trato de salir pero al ya no ser sostenido su cuerpo volvió a caer dentro del agua, empezó buscando en que agarrarse pero no encontraba nada, movió sus piernas pero no lograba que cayeran para levantarse. El aire empezaba a faltarle se movió en desesperación, manchas negras nublaban sus vista, apretando los dientes trato de tener algo de lucidez para buscar una salida pero por más que empujaba al otro este no se quitaba para permitirle moverse más. Su boca se abrió en busca de oxigeno pero en vez de eso el agua entro torturándolo.

Un brazo bajo en el agua justo enfrente de él. Con toda la fuerza que tenía lo abrazo en busca de tenerlo como apoyo para salir y así fue, logrando sacar solo su rostro.

Su respiración era acelerada mientras el agua se escurría por su boca, sin embargo el brazo que le permitía estar en la superficie poco a poco fue bajando, llenándolo de desesperación otra vez, empujándose con fuerza en este logro enterrar sus uñas en el cuello del mayor jalándolo consigo.

Ambos cayendo dentro de la tina pero en vez de ser una pelea por salir, fue una en donde uno trataba de recorrer el cuerpo del otro mientras este último lo golpeaba en busca de evitar esto.

Su entrada que había estado abandonada fue invadida ahora por dos dedos que abrían paso separándose como unas tijeras logrando que Jian Wanyin se retorciera y su miembro despertara aun debajo del agua.

Prontos ambos salieron del agua gracias a la fuerza del Patriarca que pronto jalo al otro para arrinconarlo de nuevo en un extremo, besando y lamiendo su cuello mientras sus dedos abrían esa fuente de placer.

-¡¿QUE HACES?! ¡¿QUE DIABLOS HACES?!- Grito ante tal situación sintiéndose raro, extraño.

- ¿Acaso lo has olvidado? Tengo que prepararte antes de entrar. Ya no eres virgen pero aún hay que hacerlo - Soltó el otro con una tranquilidad que solo causo más enojo en el Jiang.

-¡¿QUE MIERDA ESTAS DICIENDO?! – Dijo tratando de no levantar sus caderas al sentir una corriente recorrer su columna producto de un punto tocado por esos dedos en su interior.

Volvió a ver la sonrisa socarrona del otro mientras se acercaba a su oído - ¿De verdad no lo recuerdas?- susurro mientras una de sus manos fue deslizándose para tocar el pezón del menor quien tembló ante el toque, formando pequeños círculos, presionando para al final pellizcar.

Jiang Wanyin harto jalo fuertemente del cabello de Wei Wuxian para alejarlo. Pero una sorpresa le llego al ver una cara de placer por parte de este. Recuerdos borrosos de esa misma expresión le llegaron. Pero en vez del agua era en el suelo de aquella cueva.

- No – Susurro – No puede ser – dijo más ronco - ¡ESO FUE UNA PESADILLA! - grito ya más alterado.