Capítulo 16: A falta de protección (1)

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Para esa misma noche Douma se marchó del culto sin avisarle más que a Aotsuki y por supuesto a Sayoko. No era tan raro que Douma se ausentara en el culto y a falta de su líder la agenda de todos se modificaba de manera drástica por lo que la mujer mayor se vio en la obligación de tomar algunos cargos. En ese aspecto era más que claro que Aotsuki no podría hacerse con tal papel por mucho que deseara y eso era algo con lo cual degradarla por parte de las otras chicas.

Pero aunque a ella no le afectó ese hecho aumentó sus molestias.

Aotsuki miró el cojín donde Douma la pasaba la mayor parte del tiempo sentado la mayoría de las veces con papeles en la mano, pero muchas de esas con la mirada puesta sobre ella. Sintió lo vacío que resultó la habitación a la falta del chico. Ella exhaló exaltada, ¿Cómo era posible que tan siquiera le pasara por la cabeza sintiéndose extraña a la falta de Douma? Era como si… Lo extrañara. Y se sintió estúpida por el mero pensamiento. Un monstruo como él no podría ser extrañado por nadie, ¿No?

Pero a su vez creyó que no podía culparse a ella misma, quizás esa parte sofocante que Douma le dejaba tanto por su presencia como por su mirada se había esfumado, ya no tenía la sensación de un arma filosa atravesándola, y sin embargo, la inmensa soledad era aplastante y más aterradora que incluso el mismo chico.

Negó con la cabeza a la par que su mano se dirigía a acariciar su propio cuello haciéndose recordar como horas antes, cuando estaba a punto de irse, sus colmillos la perforaron y tomó su sangre. Él era un ser cruel, alguien despreciable bajo una fachada buena, pero sobre todo inhumano y jamás tenía que olvidarlo.

Apretó los obsequios que tomó y dio media vuelta para salir de la habitación antes de que mas pensamientos absurdos se apoderaran de su mente, en vez de eso iba a aprovechar esos días lo mejor que pudiera.

.

Lo que más deseaba era escapar, era como su meta final, pero a su vez se preguntaba si eso era un mero sueño, una fantasía. En el día vigilada (ella no era la única chica que deseaba escapar, pero posiblemente sí la única que sabía sobre la realidad de Douma) y en la noche con el chico sobre ella, si bien podía huir mientras Douma se encontraba confinado por el sol en el momento que este se ocultara sin duda iría por ella y estaba segura que no tardaría en atraparla, volver a sus garras donde sería torturada de una forma lenta y horrible por ignorar sus advertencias.

Un escalofrió pasó por su cuerpo con imaginarlo.

—¿Estas bien?

Aotsuki giró su rostro hacia la dueña de la voz. La chica se sentó a su lado en silencio.

—Hayami… —acabó por sonreír—. Sí, estoy bien.

—Perdón por dejarte sola, yo-

—No tienes que disculparte, supongo que los rumores, ¿No? —el silencio confirma sus palabras—. No te culpo por ello, si hubieras seguido cerca mío también te hubieran echado tierra encima, así que está bien.

—Eso no debería justificar que el que te abandonara de esa forma.

Podía entenderlo. Quizá no llevaban tanto conociéndose, pero Aotsuki para Hayami era una grata y reconfortante compañía, una que jamás tuvo en sus cortos diecinueve años. Pero a pesar de eso decidió alejarse para defender lo poco que había conseguido, y tampoco podían culparla por eso.

Lo peor de todo es que estaba seguro que si Nozomi siguiera en la casa no le hubieran importado los rumores y estuviera al lado de Aotsuki apoyándola. Una parte de eso le sentaba mucho más mal que cuando abandonó a su familia para ir a ese lugar.

—Sabes que puedes contar conmigo para cualquier cosa, no te pienso abandonar otra vez.

—Gracias.

—Oye, tú.

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⏰ Last updated: Dec 03, 2023 ⏰

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La Pasión de ser Devorado (Douma) ||KnY|| [04]Where stories live. Discover now