Gate: Así fue el ejército Español (y alguno más) a pelear allí

Capítulo 27: La Caza del Dragón

La princesa Piña fue nombrada gobernante de la Comunidad de Alnus o Alnus Hill (Área administrativa del nuevo mundo de manera formal por la ONU y la OTAN). Automáticamente la Orden de la Rosa se convirtió en su guardia personal y en parte de las fuerzas armadas de Alnus. El territorio abarcaba la primera línea de defensa de las fuerzas de la OTAN, donde se encontraba el extenso campamento de refugiados, y los alrededores, dónde se encontraba el campamento de la Orden de la Rosa que construía una fortaleza mientras que la ONU y la OTAN construía una pequeña aldea artificial para albergar más refugiados. Se estableció un censo de población y se planeó la instrucción de un pequeño pero bien entrenado ejército que sirva para apoyar en la región a los militares a la hora de aventurarse y que sean capaces de defenderse por si mismos. La población actual en Alnus era de 40.000 refugiados que habían solicitado el ingreso a la Comunidad, sin embargo seguían llegando refugiados constantemente.

Se decidió que la Orden de la Rosa entrenaría a nuevos integrantes, mientras que varios oficiales militares entrenarían a las tropas de forma que pudieran adaptarse a las capacidades militares de la Tierra, sin embargo, también se mencionó entrenar al ejército de Alnus con doctrinas militares antiguas, como los Tercios.

Mientras tanto, una misión diplomática imperial junto a varios representantes de los estados vasallos llegó a Itálica, dónde tras pasar exigentes medidas de seguridad, fueron llevados a la sala del trono, la cual se había convertido en un centro de operaciones. Toda la sala estaba repleta de instrumentos de comunicación, ordenadores, mesas, había una pizarra, maquinas expendedoras, una cafetera, etc. La delegación imperial en la que se encontraba el general Borhos se sorprendió al ver tantos dispositivos que no comprendían. Se les ofrecieron asientos en un lado de la sala que se había acomodado para poder proyectar imágenes mediante un proyector en una pizarra digital.

"¿Debido a que motivo tenemos que tomar asiento y observar una pared en blanco?" Preguntaba Borhos.

"Dentro de unos minutos, proyectaremos frente a ustedes la eliminación del Dragón de Llamas". Dijo el coronel español a cargo de Itálica, el coronel Francesc Alsina.

"¿Eh?" Expresaron todos los imperiales y sus aliados al unísono.

"Hace algo más de una semana, una Elfa oscura llegó a Alnus pidiendo auxilio, su pueblo fue atacado por el Dragon de Llamas, por lo que, como llevábamos tiempo buscándolo, un equipo del ejército aliado, Estados Unidos, envió varios equipos de elite a comprobar la ubicación de la criatura, la cual se ubica en el interior un volcán en el bosque Schwarz, en el Reino de Elba. Desde entonces hemos aprendido su rutina diaria, podremos ver todos como la Fuerza Aérea de los Estados Unidos aniquila a esa bestia".

<<¿Es por esto que exigieron que representantes de los estados vasallos acudieran? Ilusos, una cosa es vencer ejércitos y otra al Dragón de Llamas>>

"Un momento, eso es dentro de nuestro territorio..." Exclamó un diplomático de Elba.

"¿Algún problema? Se negoció que los combates no cesarían durante las negociaciones, ustedes forman parte del imperio y aunque sus tropas no han combatido contra nuestras fuerzas su nación nos a declarado la guerra".

El representante se quedó en silencio.

"También hay otro motivo para vuestra presencia".

"¿De que se trata?"

"Mientras que los preparativos prosiguen, queríamos tratar la creación del nuevo estado de Alnus, Alnus Hill, gobernado por la Princesa Piña y la Orden de la Rosa".

"¿Eh"? Volvieron a expresar.

"Vamos a tratar ese tema ahora mientras proyectamos información en esta pizarra".