Blue Eyes.

Home sweet Home.

A pesar de que Max no quería dar el brazo a torcer termino por quedarse, no participo de la limpieza del bloque de celdas que sería su nuevo hogar, solo cuando el lugar estuvo despejado por completo y fue seguro se les permitió entrar. El lugar era un asco, deberían hacer una gran limpieza antes de estar completamente cómodos allí, pero era más de lo que habían tenido en meses. Con mucho trabajo podría convertirlo en su hogar. Habían encontrado las llaves de las celdas en el cuerpo de los guardias por lo que podrían tener habitaciones o algo lo más parecido a ello. Daryl fue el único que decidió que no dormiría en una celda, los demás se acomodaron en ellas sin problemas. Carol compartía la celda con Sophia, Rick con Lori,T- dog dormiría con Carl, Hershel estaría con Beth y Maggie y Glenn por supuesto habían buscado su propio espacio. Solo quedaba Max por su cuenta sola en una celda, pero no le importó, después de todo estaba acostumbrada a la soledad.

Aquella primera noche, Maggie y Glenn montaron guardia, Max se había ofrecido pero como había estado despierta la noche anterior la enviaron a descansar. Se había acostado pero no podía dormir así que se levantó y salió a tomar un poco de aire. Una débil luz de luna era lo único que alumbraba el lugar y gracias ella pudo ver una sombra seguirla desde que salió. 

- ¿serías tan amable de dejar de caminar como un gato enjaulado alrededor mío? - sabía que era Daryl, llevaba desde la mañana mirándola como si quisiera decirle algo, ella lo había evitado pero al final sabía que no les quedaría más que hablar. Ella se sentó en el pasto, cruzo sus piernas como un indio y apoyo su espalda en la pared. - ¿Quieres hablar?

- No... - él apoyo la espalda en la pared cruzando sus brazos en su pecho.

- llevas todo el día mirándome como si hubiese matado a tu hermano, es obvio que quieres decirme algo.

- ¿Y ahora te importa lo que quiera decir? - si Daryl pudiera verla notaría la expresión confundida en la cara de Max. ¿A qué venía ese comentario?

- ¿Disculpa?... ¿acaso soy yo la que te estuve ignorando todo el invierno? - la castaña había pasado de la confusión al enojo en cuestión de segundos.

- Pues no parecías muy preocupada por eso anoche en los brazos de Rick - le soltó de golpe sin pensar en lo que estaba diciendo.

- vete a la mierda Dixon... - Max había llegado a su límite, había pasado los últimos meses pensando,tratando de descubrir que fue lo que hizo para que él se alejara, tratando de darle su espacio y resignando se a pensar que quizás él nunca quiso ser su amigo y solo le tenía lástima. Pero que insinuara que algo pasaba entre ella y Rick era el colmo y no se lo iba a dejar pasar.

- No pensé que fueras de esa clase de mujeres.. - los ojos de Max se llenaron de lágrimas, se levantó de golpe y lo encaró, ya había tenido suficiente.

- Lo que yo haga o deje de hacer es problema mío... - no iba a negar esa acusación después de todo él seguiría pensando lo que quisiera.

- si y tal vez por eso Shane no confiaba en ti, después de todo son iguales. - Max no lo aguanto más, lo empujó y dio media vuelta para poner distancia entre ellos. Pero él la siguió, aún no había terminado. - ¿planeas ser la segunda esposa o con ser la amante te conformas?

- ¡Basta! - ella freno en seco ante esa acusación y volteo a verlo, ahora la luz de la luna le daba de lleno en la cara y él podía ver las lágrimas corriendo por sus mejillas.- jamás hubo ni habrá nada entre Rick y yo... yo no soy como Shane, lamento si hice algo que te molestara... me aleje, cuando vi que no querías mí amistad... te di tu espacio, casi no hablamos ¿Que diablos te hice para que me trataras así? - Max lloraba y ya no trataba de ocultarlo. Daryl se arrepintió de haberle dicho todas esas cosas, sabía que ella era incapaz de hacer algo así, no sabía que se le había cruzado por la cabeza al decirle eso.