Me enamore de mi sobrino. "Kookmin" (ADAPTACIÓN)

Cap. 17 🔞

Ante sus palabras, tan inocentes y excitantes al mismo tiempo, un ronco y fuerte gruñido se escucho desde el fondo de mi pecho.
Lo tome de las caderas e hice que se inclinara hacia adelante, tal y como cuando se agacho a recoger el peine.

-Sostente del tocador.- Le ordene y él de inmediato lo hizo.

Levante su camisa y baje sus bragas que cayeron al piso y de inmediato saco sus pies de ellas. Con mi rodilla hice que las abriera y ahí lo tenía tal y como quería, inclinado con su culo a mi disposición, pero para disfrutarlo mejor, le quite la camisa para que quedara completamente desnudo.

-¡Jungkook!- Dijo mientras se retorcía y se perfectamente lo que quiere, porque yo quiero lo mismo, quiero hundirme en él.

-Ah, no nene... Ya sabes como me gusta.

-Tio... Follame... Follame ya.- Dijo con la cabeza gacha y con desesperación.

-Levanta la cabeza, quiero verte.- Y así lo hizo, nuestras miradas se encontraron nuevamente a través del espejo.

Tome el cabello de su nuca y lo enrede en mi mano para darle ese toque dominante que me gusta. Y de una fuerte embestida entre en él, no fue tan complicado porque ya lo habiamos hecho en el baño, Jimin arqueo su espalda mientras un grito de placer salía de su boca.

Le di una nalgada fuerte con mi mano libre y lo tome con fuerza de la cintura para comenzar a entrar y salir de él con un ritmo rápido e intenso.
Apreté mi dentadura para ahogar mis gritos. Jimin gemía y gemía una y otra vez y eso era un estímulo para mí.

Verlo por el espejo, gritar, gemir, abrir la boca y fruncir el ceño excitado y lo mejor ver como sus cabellos se movían al ritmo de mis embestidas, es de lo más erótico que jamas he experimentado. Bendito espejo, recuérdenme comprarme uno enorme en mi habitación.
Jalaba de su cabello levantando su cabeza para mirarnos mientras seguíamos follando de pie. La mano que rodeaba su cintura bajo hasta su miembro y comencé a masajearlo. Lo apreté y se estremeció, lanzando un grito, provocando que mi liberación estuviera cerca, me incline hacia él y con la lengua recorrí toda su columna, su piel suave y sudorosa, era magnifica.

-Tíio... Mírame... Mira como me corro para tí.- Oh por dios, que muchacho, que muchacho.

Esas palabras fueron como música para mis oídos, así que me incorpore y lo mire. apreté nuevamente su miembro y explotamos juntos una vez más.
Caímos de rodillas en el piso, el orgasmo que nos invadió fue algo increíble, tanto que nos dejo sin fuerzas.

Cuando me di cuenta, lo tenia abrazado de la cintura por su espalda y estábamos haciendo cucharita en la alfombra mientras nuestras respiraciones se calmaban.
Me encantan estos momentos, es increíble la relajación que me recorre.

-¿Cómo esta Garu?- Pregunto divertido y con una voz suave, al parecer también esta relajado.

-Muy bien... Más que bien. Aunque.- Subí mis manos y acaricié sus pezones.- Estos también necesitan un nombre.

-Mmm... Esa idea me agrada. ¿Qué se te ocurre?

-Aún no lo se, pero ya se me ocurrirá algo.-  Sonreí y bese su mejilla.

¿Eh? ¿Por qué bese su mejilla? Esto es... Sexo salvaje, muy salvaje, solo para satisfacer nuestras necesidades físicas, no tengo porque besarlo así con dulzura, o, esto... Demonios.

Mire el reloj de la pared, eran las tres de la mañana, mierda es muy tarde. Me levante de golpe, diablos, espero que Jisso no se despierte.

-¿Qué pasa?- Me pregunto confundido mientras se sentaba.