Prólogo

1.9K 114 19
                                    

Hay un molesto y fuerte zumbido junto a la oreja de Sanji que consigue despertarle. Es un ruido lo suficientemente consistente como para molestar al inconsciente de Sanji hasta el punto de tener que despertarse.

"Voy a matar a quienquiera que me este llamando ahora mismo", gimio, dejando caer la mano hacia el telefono que vibraba en el suelo junto a su cama. El cable de carga tiró y cayó al suelo con un ligero golpecito cuando el hombre se llevó el pequeño aparato a la oreja. Demasiado cansado para ocultar su enfado, habló con descaro. "Sanji Vinsmoke. ¿En qué puedo ayudarle?"

"Hola, soy la señora Portgas". Sanji se sobresaltó en su cama, con la espalda erguida, al oír la voz de una doncella tan bella y hermosa.

"Pido disculpas por el poco ortodoxo horario de esta llamada", se disculpó la señora Portgas con una risa torpe, seguida de una retahíla de "no se preocupe" y "por favor, nunca se disculpe señora" por parte de Sanji. "Vamos un poco retrasados; quería informarte de que has sido aceptado para el papel de Naruto Pierna Negra".

Sanji sintió que su respiración se detenía. En realidad, tal vez su corazón también se detuvo.

"Por favor, ven al set de grabación mañana al mediodía para empezar. Te enviaré todos los detalles", dijo la señora Portgas por la otra línea, seguido de algún saludo genérico de adiós antes de que terminara la llamada.

¿La había oído bien?

"Debo de estar soñando", se dijo Sanji, dejando caer la cabeza sobre la mano. La cama daba vueltas y la fina manta que le cubría las piernas parecía pesar cien kilos. Sus dedos se crisparon con fuerza contra el teléfono.

Hubo una última vibración cuando la pantalla se iluminó para mostrar una nueva notificación de un número desconocido.

***069-018X-XXXX***
Hola, soy la Sra. Portgas. Por favor, guarde este número ya que seremos compañeros de trabajo a partir de ahora ^_^. He incluido los detalles de localización y todo lo demás en el archivo adjunto, por favor échele un vistazo. Espero trabajar con usted Sr. Vinsmoke, y buenas noches.

Sanji tragó nada más que aire, con la boca más seca que el desierto del Sahara. No se lo pensó cuando le contestó con varios emojis de corazón al final, antes de colgar el teléfono. Si se trataba de un sueño, dio las gracias a su cerebro por haberlo imaginado tan bonito.

Era un cambio maravilloso respecto a lo habitual.

--

Aturdido sería poco para describir lo que Sanji sentía en ese momento. Mareado también sería un eufemismo, ya que sentía que el mundo giraba a su alrededor.

"Sr. Vinsmoke, ¿parece un poco indispuesto?" Dijo la Sra. Portgas, mirando a Sanji de arriba abajo.

"Por favor, llámeme Sanji", dijo finalmente, bastante nervioso. Todavía no se había recuperado del shock. "Y le agradezco la preocupación, pero estoy bien".

La señora Portgas le sonrió amablemente, lo que casi bastó para hacerle olvidar por completo sus nervios. Casi.

"Bueno, Sanji, te agradezco que hayas venido temprano", respondió, haciéndole un gesto a Sanji para que la siguiera mientras caminaba. "Nadie mas ha llegado todavia, asi que te mostrare el lugar. ¿Te parece bien?"

Sanji asintio. ¿Como podria negarse a una visita con una mujer tan hermosa?

"No lo haría de otra manera", dijo, con una sonrisa descarada dibujandose en su cara. La señora Portgas se rió, negando con la cabeza.

Sanji se aseguró de anotar mentalmente dónde estaba cada lugar, desde la sala de descanso hasta la caravana del director, pasando por los propios decorados. No era muy difícil de recordar, pero los decorados estaban tan separados que le aterraba incluso la idea de caminar entre uno y otro entre escena y escena.

"Tengo entendido que es la primera vez que actúas en algo así", dijo la señora Portgas una vez terminado el recorrido. Apoyó una mano en el hombro de Sanji, haciendo que su corazón latiera con fuerza en su pecho. "Pero no estés nervioso. Aquí todo el mundo se apoya. Si tienes algún problema, no seas tímido y díselo a alguien".

"Si alguien aquí es tan amable como usted, estoy seguro de que podré arreglármelas", sonrió Sanji, sin perderse cómo la señora Portgas le devolvía una sonrisa divertida.

Con un golpecito en el portapapeles, la señora Portgas echó un vistazo al interior de su muñeca. Su manga cayó ligeramente dejando ver un pequeño reloj de aspecto conservador.

"Ah, he perdido la noción del tiempo. Ya deberían estar todos aquí", dijo, ocultando rápidamente su muñeca una vez más cuando dejó caer el brazo a su lado. "Te presentare".

Sanji solo asintio con la cabeza.

El camino de vuelta fue silencioso. Sanji no pudo evitar echar un par de miradas furtivas a la mujer que caminaba a su lado; era increíblemente hermosa. Era una lastima que estuviera casada, si no, el intentaria coquetear.

"Estoy segura de que habrá oído hablar de la mayoría de ellos", dijo la señora Portgas justo cuando volvían a su punto de partida inicial. Ahora había mucha más gente. "Son todos bastante populares".

Sanji simplemente se encogio de hombros, esbozando una pequeña sonrisa. No estaba seguro de que responder.

Los dos se dirigieron a una gran sala, repleta de camarógrafos y otros tipos de equipo que correteaban por el lugar. En un rincón había una larga mesa con cajas de papel de aluminio y bandejas.
buffet. Justo al lado había un grupo de caras muy reconocibles.

Notas del autor:

En la a serie que graban utiliza nombres alternativos a los de los personajes porque sería muy raro que tuvieran los mismos nombres.

En vez de eso, tendrán los nombres que Oda originalmente les iba a dar

.

Recordatorio de que la historia no me pertenece, yo solo me encargo de la traducción.

Tomado de:
https://archiveofourown.org/works/40187592

Buenas Impresiones - ZosanWhere stories live. Discover now