DIEZ

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Sana abrió otra lata de café para beberla, sabía horrible, sí, pero era más barata que el café normal y con un préstamo estudiantil que estaba pagando su primer año en la universidad, era bastante bueno. Al mismo tiempo, encendió la televisión buscando las noticias locales solo para hacer ruido mientras desayunaba antes de tener que irse.

-En la madrugada de hoy, un estudiante de la Universidad de Medicina de Anyang fue el salvador de la noche, cuando un Omega que estaba por dar a luz no podía recibir la atención médica que necesitaba...- Sana apenas se mostró interesada, solo estaba picando su arroz con sus palillos, moviéndolo de un lado a otro -Aquí estamos con Park ChanYeol, quién es el acreedor de esta hazaña, que nos demuestra, que debemos confiar en las personas que son nuestro futuro.-

La chica comenzó a ahogarse cuando vio a su hermano salir de una sala, quitándose el cubre bocas que dejaba ver su rostro sonriente y cansado. Golpeó su pecho tratando de no morir, mientras sus padres la miraban sin esperanza desde la cocina.

-¿Qué haces, niña? Te vas a morir- le dijo su madre de mala gana mientras le preparaba su almuerzo para que llevará.

-ChanYeol- tosió.

-No digas su nombre, si tiene suerte, no me lo voy a encontrar pronto- su madre pico con más fuerza la fruta que estaba picando, casi rompiendo la tabla donde estaba recargada.

-ChanYeol está en la televisión- volvió a toser, con lágrimas en los ojos, señalando la pantalla. Sus padres entonces corrieron hasta la sala de estar, mirando a su hijo ser entrevistado y cuando leyeron el título de la noticia, ambos sintieron que se les iba el color.

-Creo que me estoy llevando todo el crédito y no debería ser así, me ayudó mucho el cirujano Kim Junmyeon y después de una media hora de intervención, llegaron los especialistas del área, así que no soy el único héroe aquí...-

-¿Qué demonios hizo?- preguntó su madre, tratando de procesar todo -¿Sacó a un bebé de alguien? ¡Va apenas a empezar el tercer año de su carrera!-

-Dicen que lo hizo bien- dijo Sana bebiendo de su lata de café -Que el bebé está bien, lo están reconociendo como un héroe. No había médicos a esa hora en el hospital, al menos no parteros, ni pediatras, ChanYeol tuvo que intervenir hasta que todo el mundo llegó, sus superiores dicen que no habían visto tanta decisión en un estudiante desde hace mucho-

-Aish, ¿Qué tal si lo hubiera hecho mal? Hubiera hasta terminado en prisión- su padre paso su mano por su rostro -Ese chico toma tantos riesgos, pero ¿Está bien que alcé mi rostro con orgullo y decir "Sí, ese es mi hijo"?- su esposa le dio un golpecito en el brazo.

-Es hazaña de ChanYeol, no tuya, no hiciste nada por traerlo al mundo, él lo hizo bien porque es inteligente-

-Creí que habías dicho que era un vago- le recordó Sana.

-Lo es, ya le he dicho que se vista bien, los médicos son elegantes-

-Cuando son médicos, ahorita es estudiante, que se vista con una sudadera vieja si quiere-

-Cállate, mi bebé está hablando- todos volvieron su mirada a la televisión donde la sonrisa de la presentadora parecía ser la misma que la del todo el mundo al ver a ChanYeol.

-Esto me hace pensar en lo mucho que Anyang necesita médicos, la gente cree que por ser un pueblo pequeño, no hay necesidad de tantos médicos y muchos de mis colegas y yo, vamos creyendo que es mejor irse a grandes ciudades, pero ahora tengo aún más entusiasmo por graduarme y hacer lo mejor por mi pueblo-

-Eso es muy dulce, ChanYeol, ¿El bebé es de algún amigo tuyo? ¿Un familiar?- La sonrisa de ChanYeol puso nerviosos a toda su familia, en especial cuando llevó su mano a su pecho y lo soltó sin más.

Así empezó todoWhere stories live. Discover now