Amor Halcón

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La música comenzó a sonar y todos se pusieron de pie. Por el pequeño pasillo entró Joaquín escoltado por sus padres y enseguida entró Emilio escoltado por los suyos. Fueron entregados uno con el otro y ya se encontraban frente al juez.

-Nos encontramos aquí reunidos para celebrar el matrimonio civil de Emilio Osorio Marcos y Joaquín Bondoni Gress- habló el juez.

A pesar de que era una boda civil todo estaba siendo bonito, los Emiliaco se mostraban felices, sus familias y amigos reflejaban orgullo; y las fans invitadas lloraban de alegría al ver a sus ídolos casándose.

-Ahora dirán sus votos- dijo el juez-. Primero usted joven Osorio.
-Voy a llorar- dijo Emilio y se escucharon unas cuantas risas, tomó las manos de su pareja-. Hoy te prometo esto: reiré contigo en los momentos de felicidad, y te reconfortaré en los momentos de dolor. Compartiré tus sueños y te alentaré a que los alcances estando siempre a tu lado en cada paso del camino. Te escucharé con compasión, atención y comprensión, y te hablaré con honestidad y sinceridad. Juntos construiremos y compartiremos un hogar junto a nuestros halconcitos. Seré tu esposo, tu amigo y compañero desde hoy hasta el final de nuestros días.
-Te amo- le susurró Joaquín-. Prometo ser siempre tu mayor admirador. Crearemos una familia juntos que se basará en la risa, la paciencia, la comprensión y el amor. Prometo no solo hacerme viejo a tu lado, sino también crecer junto a ti. Te amaré cada día a través de los días tranquilos como los tormentosos. Así como te dí mi mano para que la tomaras, hoy te entrego mi alma para que hagas con ella lo que más quieras.

Las lágrimas desbordaban de los ojos de ambos, Emilio le dió un tierno beso en la frente y todos sonreían ante esa bonita escena.

Wendy y Nicola pasaron al frente para entregar los anillos. Al entregárselos les dieron un abrazo y un beso en sus frentes, la pareja colocaron sus anillos.

-Emilio, ¿aceptas a Joaquín como tu legítimo esposo y compañero para amarlo y respetarlo todos los días de tu vida?- dijo el juez.
-Si acepto- dijo Emilio.
-Joaquín, ¿aceptas a Emilio como tu legítimo esposo y compañero para amarlo y respetarlo todos los días de tu vida?
-Si acepto- dijo Joaquín.

Los padres de ambos y los testigos pasaron a firmar el acta de matrimonio luego de que la pareja lo hizo.

-En nombre de la ley y de la sociedad los declaro unidos en legítimo matrimonio.

La pareja se dió un gran beso y los aplausos inundaron el lugar. Los Emiliaco ya eran esposos.