El comienzo de la evolución.

Capitulo 11: la codicia del humano no tiene limites.

Tiara estaba completamente enfurecida, alterando su núcleo evolutivo que comenzó a generar grandes cantidades de voltaje eléctrico, alterando el ambiente.

Tiara comenzó a expulsar electricidad de su cuerpo, las nubes comenzaban a oscurecerse y cargarse de rayos que tronaban con fuerza, seguido de un cambio poco posible que se produjo en el ambiente, la electricidad parecía cobrar vida a su alrededor, vibrando violentamente y envolviendo a Tiara en un aura de poder, una fortaleza de rayos se formó a su alrededor, sin tener la posibilidad de llegar a ella por tierra.

Con ira en su mirada, Tiara señaló al infectado evolucionado que se le acercaba rápidamente. Un pequeño pero poderoso relámpago se disparó hacia él a una velocidad vertiginosa, sin embargo, con increíble agilidad, logró esquivarlo. El infectado saltaba y se movía con destreza, esquivando los rayos que salían de las manos de Tiara.

Sin embargo, justo cuando el infectado estaba a punto de alcanzarla gracias a un salto, una serie de relámpagos descendieron desde las nubes oscuras, impactando directamente contra su cuerpo, los poderosos rayos le hicieron retroceder, soltando un chillido de agonía en concecuencia, dejándo sus musculos y tendones chamuscados, y con contracciones musculares involuntarias y espasmos, fue un golpe critico pero no letal.

Tiara aprovechó ese momento para huir, ese infectado era demasiado fuerte, y dudarlo de seguir haciendole frente y sobrevivir, ya que su núcleo evolutivo había trabajado al 110% de su capacidad, dejando su cuerpo con efectos secundarios.

- ¡Maldito monstruo! ¡lo hare mierda cuando lo encuentre de nuevo!

Logrando correr y esconderse en el primer edificio que le dio la seguridad de estar a salvo.

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Lejos de la localización del combate se encontraba el equipo de soldados junto a la chica de ropa oriental llamada Kimiko.

Estaban corriendo con caras que tenían una mescla de miedo y seriedad evidente en sus rostros, algunos estaban heridos con marcas profundas de garras en sus cuerpos, pero se detuvieron al ver a su capitán de escuadrón alzo la mano diciendo con voz entrecortada.

- D-descansen.

Kimiko se tiro al suelo suspirando para soltar él miedo arraigado en su corazon, ese infectado evolucionado era tan rápido y poderoso que podia esquivar balas con facilidad, incluso se llevo a uno de los soldados a algún lugar lejos.

Uno de los voluntarios agarro al capitán de la operacion por él cuello de la camisa y grito con desesperación.

- ¡¡¿PORQUE CARAJOS NOS OCULTO LA EXISTENCIA DE ESA COSA?!!

- ¡¿tu crees que yo sabia de esa cosa?! ¡estoy igual de sorprendido que tu!

- ¡¡NO TE CREO!!

Se notaba que tenia la mente llena de miedo, lo que no lo dejaba razonar.

Los otros soldados lo agarraron de los hombros y le taparon la boca, teniendo que los infectados de menor rango vengan en consecuencia de sus gritos.

El ambiente era pesado y nada agradable en ese momento, pero todo eso cambio con el sonido de relámpagos a la distancia, siendo notado por los soldados.

- ¿pero que mierda?

Dijo un soldado al ver que había una nubes negras en donde estaban anteriormente, disparando rayos al suelo con bruralidad, escuchándose los chillidos del infectado evolucionado que los cazó hace un momento sufriendo.

Una idea broto en la mente de ese mismo soldado, diciéndola en un susurro, siendo escuchada por el capitán del grupo.

- ¿Sera que hay otro evolucionado?

El capitán de la misión tuvo un momento de dudas, por un lado estaba el evolucionado que fue visto en el hospital con un raro don, y por otro estaba el evolucionado que le estaba haciendo frente al infectado cazador.

No era una causa perdida si iban y encontraban a un evolucionado del tipo rayo ofencivo, serian recompensados con una gran suma de comida para un año, alimentando la codicia del capitán de la misión.

- ¡Atencion! ¡iremos a Investigar de que se trata, pero no podemos posponer la misión, por lo que nos dividiremos en dos grupos, uno con la evolucionada Kimiko que se dirigirá al hospital y mi grupo que investigara la posible existencia del evolucionado tipo rayo.

Algunos protestaron, pero no fue de mucha ayuda ya que él plan se llevo a cabo después de discutirlo mas a fondo.

Kimiko veia este plan como un gran fracaso, dividir el grupo que ya era de por si debil seria una misión suicida, aparte no podían usar mucho las armas de fuego por el ruido que generan, aun así no podia opinar, solo seguir el plan de ese codicioso y escapar cuando pudiera.

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Tiara estaba transpirando dentro de un edificio, sentándose en el suelo y apoyando su espalda en una pared, el dolor de cabeza era demasiado molesto y su nariz no dejaba de chorrear sangre, sus músculos estaban contrayéndose por la electricidad que se almaceno en sus músculos, evitando que se moviera con normalidad.

- jaaa ese hijo de puta me dio buena pelea.

Dijo Tiara al aire, levantándose con dificultad para luego golpear su hombro dislocado contra la pared y acomodarlo, soltando un grito abogado.

Alzo la mirada con cansancio para investigar el lugar en el que se encontraba, y si es posible, conseguir ropa, comida y medicina para usar.

El lugar no era muy llamativo, parecia una tienda de joyas abandonada, cosas inútiles para esa época apocalipsis, pero Tiara lo veia de otra manera.

- A mama le hubiera gustado esto... La extraño.

Tiara había agarrado un collar con un zafiro bien pulido, soltando unas palabras que le deprimio.

Tiara se quedo observando las joyas con ojos vacíos, su cabeza comenzó a nublarse, entrando en un estado de trance.

- Carajo, no otra vez.

Tiara sabia que le sucedía, ya lo habia vivido antes, era él núcleo evolutivo intentando meter su conciencia dentro del núcleo y retenerla durante días, aunque era beneficioso para ella ya que aumentaba él voltaje que podia usar después de volver en si, pero ese momento era demasiado inoportuno, estaba herida, con falta de energía eléctrica para defenderse y estaba en un lugar inseguro.

Con todas sus fuerzas se resistió al proceso de evolución, rugiendo con un grito por el esfuerzo que estaba usando, logrando volver en si, pero estaba muy cansada después de eso.

Con pereza busco alguna abitacion útil para descansar, logrando encontrar una llena de vitrinas con diamantes y jades que serian muy caros hace 4 años, empujando las vitrinas para bloquear la puerta, luego preparo una vitrina con interior alconchonado para poder acostarse, durmiéndose al poco tiempo.

- mañana... Sera un nuevo día, pero hoy... A dormir.

Dijo con la mente dormida, durmiendo plácidamente, dejando él dolor punzante de sus costillas rotas a un lado.
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Hola, para aquellos que esperaron este cap, les agradesco su paciencia.

Sin mas preámbulos me retiro.