Mi problemático alumno.(Todobaku)

Descubiertos.

***

Shōto y Katsuki caminaban por la calle tomados de la mano mientras miraban escaparates.

El rubio cenizo centraba su atención en las tiendas de deporte y el bicolor se fijaba de vez en cuando en las pastelerías, pues le encantaba la tarta de fresa.

Todo iba bien hasta que dos mujeres se fijaron en el profesor.

—¡Qué hombre tan guapo!

—¡Sí! ¡Parece un modelo!

A Bakugou no le gustó nada y se giró para mirar a las mujeres en cuestión con mucho odio, como queriendo decirles: ¡No miréis a mi novio, estúpidas!

Las dos parecieron asustarse y se alejaron pero Todoroki, que no se había dado cuenta de las miradas de aquellas desconocidas; creyó que Katsuki estaba mirando a alguien más.

—¿A quién miras, Katsuki?

—He mirado a unas extras que estaban hablando sobre ti para que no se acercasen.

Shōto se sorprendió, ya que no había sido consciente de estar siendo observando.

—¿En serio?—No me había dado cuenta.

—Lo sé pero ya no las busques.—Dijo celoso.

—Aww, no te pongas tan celoso Mi Katsuki~—Yo solamente tengo ojos para ti y lo sabes.—Dijo abrazándolo con ternura.

—Mng, más te vale, Shōto. Porque yo no te perdonaré si me engañas con alguien.

—No te preocupes, eso no sucederá.—Dijo dándole un beso en la mejilla izquierda.

Continuaron su paseo juntos hasta que se encontraron con un escaparate de dulces.

—Katsuki, ¿entramos aquí un momento?—Preguntó señalando una pastelería.

El adolescente miró en la dirección señalada y pudo ver a qué se refería su amado.

"Una pastelería... Odio los dulces pero voy a acceder por él."

—Está bien, entremos.

Pasaron a la pastelería y el profesor buscó los pasteles de fresa. El pastelero los vio y se aproximó a ellos.

—Buenas tardes, ¿en qué puedo ayudarles?—Preguntó sonriendo ampliamente.

El de ojos desiguales elevó su mirada y le contestó:

—Buenas tardes, estaba mirando pasteles. Enseguida le diremos los que queremos.

El pastelero asintió y se alejó para colocar unos pasteles que recientemente había sacado del horno.

—Katsuki, ¿hay algún pastel que quieras?

—No, a mí no me gustan los dulces.

Con su respuesta, el mayor decidió llamar al pastelero para preguntarle si tenía algún pastel que no fuera dulce, a lo que éste respondió:

—Sí, tenemos tres pasteles salados, cuatro picantes y nos queda uno de sabor amargo.

Bakugou miró con curiosidad los pasteles picantes y se decantó por uno que era de maíz relleno de arroz con curry.

—Entonces serán dos pasteles, uno de fresa y otro de maíz relleno con arroz y curry.

El pastelero puso cada pastel en una caja diferente y los introdujo cuidadosamente en una bolsa. Luego Shōto los pagó.

—Katsuki, ¿quieres que nos los comamos en algún banco de la plaza de aquí al lado?

—Sí, vale.

Buscaron un banco y se sentaron para comer.

—Aquí tienes, Katsuki.—Dijo entregándole la caja en la que iba el pastel de su novio.

—Gracias, Shōto.—Respondió agarrándola.

Procedieron a comer sus respectivas meriendas y, en un momento dado; Todoroki quiso conversar con su novio.

—Katsuki, cuéntame más sobre el día que has pasado con tu familia, ¿ha habido algún problema más, a parte del hecho de querer prometerte con una desconocida?

El rubio cenizo reflexionó sobre su respuesta y, finalmente; le contestó:

—Pues me inventé que me gusta un chico que es dos años mayor que yo y recibí mucho rechazo por parte de mi familia.—Mi madre llegó a decir que no quería a un hijo desviado.

—Así que tu familia es homófoba...—Eso será un problema para nosotros en un futuro, así que te aconsejo que no salgas del armario hasta que no te vayas a mudar conmigo el año que viene cuando vayas a empezar la universidad.

—De acuerdo, aunque realmente no es de su incumbencia.

—Lo es, necesitan saberlo para que no te insistan en el asunto de casarte con una mujer para darles nietos.

—Mmm... Sí, supongo que tienes razón.—Supongo que lo dices por experiencia, ¿verdad?

—Sí, yo le dije a mi familia y la mayoría lo tomó a mal.—Mi padre amenazó con desheredarme por tener una vida de "vicioso amoral" según él y en ese momento decidí buscarme un buen trabajo, que es el que tengo actualmente.

—¿Y quienes de tu familia te apoyan?

—Mi hermanos, que son tres.

—¿Nadie más? ¿Ni siquiera tu madre?

Todoroki negó con la cabeza y Katsuki se sintió mal en aquel instante por lo que opinaba su novio al principio.

—Debe haber sido duro para ti.

—Lo fue al principio pero ya estoy mejor, especialmente porque te tengo a ti.—Le dijo al adolescente alargando su mano para acariciar el rostro del rubio cenizo.

Bakugou le sonrió y acortó la distancia con Shōto con el fin de darle un beso.

—¿Shōto?—Dijo una voz masculina de repente que hizo que se voltearan.

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!