Capítulo 1

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Haechan esperaba no tener que compartir más clases con Andie ¡lo iba a manifestar! Mara ya había hecho un grupo con todos, y aunque había margen para hacer y entregar los trabajos y en tan solo cuatro días habían empezado a proponer temas. Haechan tenía miedo de abrir siquiera el grupo y toparse con el número de Andie y su foto de perfil. Le daba curiosidad, por supuesto, pero quería ser fuerte, ¡tenía que serlo!

Renjun le leía los mensajes en la cafetería y respondía en nombre de los dos, pero él se negaba a abrir ese grupo. Llevaba cuatro días sin entrar. Solo lo haría cuando fuera crítico.

—No me jodas Haechan, abre el puto grupo. No te va a salir su foto de perfil, ¿ves? —Renjun le mostró la pantalla. —Directamente no tiene. Lee los putos mensajes porque me estoy cansando de ser tu mensajero, joder. —Haechan se sintió mal por su amigo. —No te estoy pidiendo que te hagas su amiguito, sé que se portó mal contigo. Pero tenemos un trabajo que entregar y tú mismo le dijiste que no se cambiara de grupo. Ahora acarrea con las consecuencias, porque... por irónico que pueda parecerte esto, he propuesto el tema de geopolítica militar entre Japón y Corea y solo Andrea está de acuerdo conmigo.

—¿En serio? No jodas. —Suspiró Haechan. —¿Y Mara y Moonhyun no quieren hacerlo de Corea y Japón? —Renjun negó.

—Si leyeras el grupo lo sabrías. Han sugerido el tema del proxy war del este asiático, en concreto la del Partido Comunista contra el Kuomintang en el 44.

—Es buen tema, no me importaría si cambiamos y...

—¡Haechan! ¡No me jodas! ¡Llevamos tiempo queriendo hacer un trabajo de Corea y Japón! ¡Esta es nuestra oportunidad! ¡Andie ha votado a favor, solo tienes que decir algo tú! —Se quejó Renjun. —Te juro por Dios que si te rajas y votas a favor del tema de Mara y Moonhyun te echo de mi vida y, además, tendrás que buscar tú toda la bibliografía de mi parte del trabajo.

—¡Vale, vale! ¡Qué intensito! —Renjun gruño. —Pero, ¿cómo es que Andie está de acuerdo con nuestro tema?

—Si hubieras abierto el grupo... —Repitió con retintín. —habrías visto que ella ha propuesto abordar el colonialismo del imperio japonés en la península, y como puede seguir tocando ese tema en nuestra propuesta de geopolítica militar desde una perspectiva de memoria histórica, prefiere hacerlo de Corea y Japón que de China.

—Guau. Es que... Me cuesta creerlo, o sea... la persona que peor se comportaba de mi clase durante diez años de mi vida, y ahora viene con estos temas para trabajos, ¿Cómo si quisiera vengar la memoria de las víctimas coreanas? No sé tío, no me fio.

—Pues hablando de la reina de Roma, mira quién está entrando por la cafetería. —Renjun señaló la entrada y Haechan se volteó sin disimulo. Estaban bastante lejos para que no se diera cuenta de su presencia. —¿Quién es ese? ¿Tú sabías que tiene novio?

—Pues... eh... no. La verdad es que nunca la he visto con novio. Seguramente lo conoció en Estados Unidos.

—Ya, será eso. —Renjun ignoró el tema. —Pero responde al puto grupo Haechan, que no se te olvide.

—¡Voy, voy! —Envió un mensaje rápido de confirmación diciendo:

Hola chicos, soy Haechan, me mola más el tema de Corea y Japón, creo que es más fácil en cuanto a bibliografía, pero también mola vuestra propuesta, ¿por qué no la usáis para las presentaciones de historia moderna? También podría quedar guay, ¿no?

—Eh, Haechan, mira. —Levantó la vista del teléfono y volvió a voltearse. Renjun le señalaba a Andie con los palillos. —Le está mirando el puto móvil. Flipas.

Haechan vio al chico que la acompañaba quitarle el móvil de las manos y leerlo en alto, donde ella no lo podía alcanzar. Se lo devolvió con un gesto borde y seco, tal vez estaba algo furioso o eso se imaginó Haechan. Andie se quedó parada en medio del pasillo donde estaban y pareció escribir algo rápido. Los móviles de Renjun y Haechan vibraron y rápidamente leyeron el grupo, donde Andie acababa de intervenir con un seco "OK". Los dos amigos se miraron frunciendo el ceño, no parecía una relación idílica.

Donghyuck volvió a mirar a la pantalla de su móvil y chasqueó la lengua.

—¿No me habías dicho que no tenía foto de perfil? ¡Mira! —Le tendió el móvil a Renjun para que viera su foto. Salía ella en el centro sonriente en un puesto de palomitas en lo que parecía una calle de Estados Unidos. —Encima la hija de puta sale guapa. ¡Ha tenido un glow up! ¡No es justo!

—Eh... Ya, Haechan a mí no me preocuparía su glow up o lo que mierdas hayas dicho. —Haechan frunció el ceño. —Me preocuparía saber por qué coño te tiene guardado entre sus contactos. Porque si puedes ver su foto de perfil es porque te ha agendado, si no estarías como yo, sin ver absolutamente nada. ¿Andie tenía tu número de antes?

—No que va, no es imposible...

—Tío llevas con el mismo número de teléfono desde los dieciséis. Es muy posible que te tenga guardado desde entonces.

—¡Qué va! Andie siempre me ha odiado, lo habrá hecho ahora, para atormentarme, seguro. —Renjun negó.

—Estás loco. Esta pava ha estado pensando en ti desde siempre, ella parece que tampoco te supera. —Bromeó.

—No me jodas Renjun, no estoy para gilipolleces. No hay manera que en este universo Andie Jung me tuviera entre sus contactos desde 2016. Ni hablar del peluquín, colega.

The way I hate you! [Haechan : NCT]Where stories live. Discover now