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Espero y sea de su agrado, les agradezco el pequeño apoyo y los divertidos comentarios de cierta y especial personita.

Disfruten y cualquier error ortográfico mil disculpas, los arreglaré :]









La mañana transcurrió con naturalidad, de no ser que sus padres se habían retirado al despacho de la anfitriona, dejando a sus hijos desayunando.

Los 6 niños se miraban un tanto incómodos, menos dos de ellos.

Que se habían conocido la noche anterior, ambos se dirigían sonrisas amigables y un tanto entusiasmada,  Crowley quería hablar más con el fuera, ya que sentía que aquella casona ajena lo asfixiaba pero no sé le podía cumplir aquella petición por el estado de Aziraphale.

El cuál solo lleva dos días en tratamiento y seguía delicado.

Ya que bajando las escaleras aquella mañana, escucho unos pequeños quejidos y llantos, supuso que le habían cambiado algo en su pierna.

Lo miraba de lejos ya que sus hermanos mayores lo habían arrastrado con ellos hasta el otro extremo de la mesada, sabía que no les agradaba a aquellos pero eso no era excusa como para que se lo llevarán sin preguntar.

Comía sin interés, no era de comer mucho, pero lo intentaba, miraba a todos lados y había más y más ventanas, el jardín se veía espectacular desde dentro, no podría imaginar cómo sería caminar entre este.

Pero no quería salir así como así.

Levantó la vista para encontrarse con los ojos de  Aziraphale, el cuál comía alegre, su madre le había servido principalmente algo para el.

Obvio este no se quejo en lo absoluto y estaba más que feliz, de no ser por la mirada intensa púrpura que estaba a lado suyo.

Esto le causó molestia al pelirrojo, no podía creer que fueran así con el, al parecer el albino nunca les llevaba la contraria en nada, solo se dejaba llevar por ellos.

Apretó los dientes con molestia y siseo silencioso, cosa que captó la atención de Beatriz que estaba sentada al lado suyo.

- Y ahora a tu que te traes?_ pregunto tragando aún la comida en su boca, no admitía que está realmente buena.

- Ngk!, No es nada_ dijo aún teniendo la mirada clavada en Gabriel,  Belz miro hacia donde miraba su hermano.

- Es un manipulador para ser tan joven créeme_ Belz alzó los hombros con desinterés mientras seguía comiendo, no era que no le importara, simplemente no quería problemas.

El pelirrojo solo gruño y siguió con lo suyo, intentaba no prestarle tanta atención a eso.

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Con sigilo salió hacia el jardín, no había pedido algún tipo de permiso y técnicamente se habia escapado, no tenía por qué pedirlo.

Miraba atento a todos lados, mirando los grandes rosales blancos y varios tulipanes de aquel jardín, tenía demasiadas flores blancas de no ser por algunos arbustos de lavanda.

Camino más al fondo, encontrándose con una pequeña fuente de mármol

Estaba rodeada de lianas con algunas amapolas y otro tipo de plantas colgantes.

Tomo uno de sus grafitos y empezó a dibujar aquel lugar, la fuente tenía una paloma en la cima, era extraña pero linda por alguna razón.

Solo se escuchaba el cantar de algunas aves y la corriente de dicha fuente, estaba muy tranquilo y eso lo inquietaba.

SMALL REIGNSWhere stories live. Discover now